Espa?a baila a Corea

El ritmo en la circulaci¨®n de bal¨®n muy alto. Esta fue la sencilla receta con la que Espa?a acab¨® de golpe con las miles de horas de preparaci¨®n con las que la Rep¨²blica de Corea hab¨ªa llegado a estos Juegos; con sus minuciosos entrenamientos y con los cuerpos estilizados de sus futbolistas. Al final, mand¨® el bal¨®n. Y en esos t¨¦rminos, Corea sigue estando muy lejos de Espa?a, que es una autoridad en la materia. Esta selecci¨®n de I?aki S¨¢ez se expresa sin la presi¨®n que acompa?a y atenaza a su hermana mayor. Act¨²a con naturalidad y clarividencia. Lleva dos a?os jugando de la misma manera. Y S¨¢ez, un tipo sereno e inteligente, ya se lo advirti¨® a sus muchachos antes de salir ayer al estadio Hindmarsh de Adelaida: "Quiero que pens¨¦is en el Mundial sub 20 de Nigeria. El primer partido es vital ganarlo". La referencia no pod¨ªa ser m¨¢s positiva: muchos de estos chicos (Gabri, Xavi, Marchena, Aranzubia, ...) acabaron adjudic¨¢ndose aquel campeonato. As¨ª que ayer empezaron de id¨¦ntico modo: arrasando. Cierto que se trataba de un rival menor, con una de las peores defensas que se recuerdan, pero Espa?a deb¨ªa emplearse con contundencia y lo hizo, sin repetir pasadas amargas experiencias (aquel empate a dos ante Corea en el Mundial de Estados Unidos). Los chicos de S¨¢ez, adem¨¢s, firmaron dos de los grandes goles que se recordar¨¢n en este torneo. El primero tras un zurdazo dificil¨ªsimo de Velamaz¨¢n; el segundo, tras un zigzagueo de Jos¨¦ Mari. Ambos muy bellos.Espa?a resolvi¨® de un plumazo todas las dudas que le planteaba el poderoso f¨ªsico de los coreanos. Como coincid¨ªan en el hotel, los espa?oles ve¨ªan con frecuencia a los coreanos. Y pensaban: ?qu¨¦ altos! Otras veces se cruzaban en el gimnasio de hotel y los espa?oles mascullaban asombrados: ?qu¨¦ musculosos! Temores infundados. Acudi¨® a los 10 minutos Toni Velamaz¨¢n a la luna del ¨¢rea, amortigu¨® con el pecho el bal¨®n que hab¨ªa centrado Gabri, y lo golpe¨® tras el bote con tal potencia y precisi¨®n que lo envi¨® a la escuadra izquierda de Kim, el portero coreano. Y as¨ª fue como Toni Velamaz¨¢n, el patito feo de la Quinta del Mini, se present¨® en el torneo ol¨ªmpico con un gol esplendoroso, un prodigio de t¨¦cnica y precisi¨®n que desmoron¨® toda la musculatura coreana.

Entonces se vio que detr¨¢s de la aparatosa armadura no hab¨ªa nada. Que las diferencias entre el f¨²tbol asi¨¢tico y el espa?ol siguen siendo siderales. Que era un rival para golear. Y a ello se aplic¨® Espa?a sin pesta?ear. Con la correcci¨®n e inteligencia que ha caracterizado a este equipo desde que se hiciera cargo I?aki S¨¢ez. Bast¨® que se juntaran un rato Gabri, Xavi, Tamudo (todos ellos por debajo de 1,75 de altura) con el milanista Jos¨¦ Mari. Tamudo y Jos¨¦ Mari, por cierto, formando una pareja de baile m¨¢s que interesante. El delantero de Milan coleccion¨® un pu?ado de variados quiebros antes de dejar sentenciado el encuentro. Otro tanto muy hermoso.

El combinado espa?ol fue fiel a sus principios: el bal¨®n al piso, el tr¨¢nsito r¨¢pido por las bandas y la cabeza privilegiada de uno de sus centrocampistas, Xavi, que sabe qu¨¦ es lo m¨¢s conveniente en cada momento. Es dif¨ªcil encontrarle algo mal hecho al mediocampista del Barcelona. Su dominio del juego es extraordinario. Su entendimiento con Gabri, absoluto.

Muy grandes, pero muy torpes. As¨ª eran los dos centrales de Corea. Desde juveniles probablemente los jugadores espa?oles no se hab¨ªan topado con un par de centrales tan patosos. En el ¨¢rea peque?a uno pod¨ªa hacer lo que quisiera con tal de cumplir dos condiciones: ser espa?ol y tener un poquito de habilidad. Los requisitos los segu¨ªan tanto Tamudo como Gabri y Jos¨¦ Mari, que se pusieran las botas. El paso a la siguiente fase lo tiene Espa?a en el bolsillo, sobre todo viendo que Chile vapule¨® ayer a Marruecos y que se clasifican para cuartos los dos primeros de cada grupo.