A Hviid le falla el coco
El espa?ol, eliminado en 400 estilos, nad¨® muy por debajo de su nivel
Qu¨¦ cosas tiene la nataci¨®n. A pesar de encontrarse en el mejor momento de su carrera, Frederik Hviid fue v¨ªctima ayer de una empanada mental en su serie de los 400 metros estilos. En el primer parcial (mariposa) se acomplej¨® porque sus rivales iban muy r¨¢pido, olvidando que eso era normal porque los puntos fuertes del espa?ol llegan al final, con la braza y el estilo libre. Luego nad¨® mejor que nunca el hect¨®metro de espalda, cuando no pod¨ªa ver a los dem¨¢s. Pero ya era tarde: qued¨® eliminado con un registro muy inferior a su valor actual. El disgusto fue enorme porque viv¨ªa para lograr una medalla."Me ha fallado el coco, precisamente en el momento para el que me hab¨ªa preparado durante tantos meses, siete horas al d¨ªa, sin descanso en s¨¢bados o domingos, sin ver a mi esposa en los ¨²ltimos cuatro meses", concluy¨® el nadador canario despu¨¦s de cenar, tras rumiar su frustraci¨®n desde el mediod¨ªa. Esas horas fueron muy duras: "Hoy he pensado de todo. En retirarme de inmediato, en que he dado a mi vida una direcci¨®n equivocada, en que no ha merecido la pena dedicarla a estar metido en una piscina. Ahora, con la cabeza m¨¢s fr¨ªa, veo que el deporte es como la vida amorosa. Hay d¨ªas maravillosos y otros horribles. Hoy, precisamente hoy, me ha tocado uno horrible".
Y dif¨ªcil de explicar. Primero lo intent¨® su entrenador, el holand¨¦s Paul Willdeboer, a media tarde: "Frederik ha sufrido una crisis de intimidaci¨®n por razones subjetivas. Le ha tocado la calle adyacente a la de Tom Dolan , por quien se hab¨ªa dejado comer el coco los d¨ªas anteriores, cayendo en su guerra psicol¨®gica". El t¨¦cnico dio un dato concluyente: "Frederik ha nadado el parcial de espalda en 1,5 segundos menos que cuando qued¨® campe¨®n de Europa en Estambul el a?o pasado. O sea, que s¨®lo ha rendido al mismo nivel que en los entrenamientos cuando no ve¨ªa a sus rivales".
Tras ver c¨®mo Dolan bat¨ªa el r¨¦cord del mundo en la final vespertina, Hviid analiz¨® al pormenor, empezando por el campe¨®n ol¨ªmpico: "Yo me sent¨ªa tan fuerte que incluso me hab¨ªa propuesto ganarle. Pero, al ver que ¨¦l sal¨ªa lanzado, se me cruzaron los cables, cre¨ª que no iba bien y olvid¨¦ que no estaba en un Europeo, donde mis rivales nadan la mariposa m¨¢s despacio. Me atasqu¨¦, y perd¨ª mucho tiempo". Tras el magn¨ªfico trayecto de espalda, lleg¨® la mayor contradicci¨®n: "Mis tiempos en Estambul de los parciales de braza y libre fueron los mejores del mundo en 1999. Y mi entrenamiento de este a?o ha sido much¨ªsimo m¨¢s duro que el del anterior. Hasta dej¨¦ de participar en el Europeo para concentrarme en los Juegos", a?adi¨® Hvidd, quien lleva tatuados los aros ol¨ªmpicos en su costado izquierdo desde 1996. Su tiempo al final (4.21.63) est¨¢ muy lejos de su mejor marca, la de Estambul (4.17.16), que a su vez es inferior a la potencia exhibida en los entrenamientos. ?l se cree capaz de bajarla en dos segundos, lo que le hubiera dado ayer la medalla de bronce.
Hviid trabaj¨® mucho con el psic¨®logo McDermott, estadounidense como su esposa, durante su larga estancia en la Universidad de Washington. No le ha visto en los ¨²ltimos cuatro meses, aunque se han mantenido en contacto por correo electr¨®nico: "Aunque est¨¢ claro que mi problema de hoy no ha sido t¨¦cnico ni f¨ªsico, tampoco quiero achacar el fracaso solamente a esa separaci¨®n de McDermott. Han sido varios peque?os factores unidos", agreg¨® el canario, quien ya piensa en los 1.500 metros: "No aspiro a entrar en la final, pero los nadar¨¦ con rabia para batir el r¨¦cord de Espa?a. Me lo debo a m¨ª mismo". ?Y Atenas 2004? "No, est¨¢ muy lejos. La nataci¨®n no da dinero y yo tendr¨¦ que mantener pronto a una familia".
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