El apoyo de los hombres resulta indispensable para el cambio

Ejemplos positivos

"La discriminaci¨®n contra las mujeres y las ni?as nunca cesar¨¢ sin el apoyo y la comprensi¨®n de los hombres", se?ala el informe El estado de la poblaci¨®n mundial 2000, difundido ayer por la ONU. El estudio reconoce que los varones son v¨ªctima de los estereotipos culturales, que se inclulcan desde la infancia."Las actitudes y conductas masculinas est¨¢n muy influenciadas por las expectativas de las sociedades sobre lo que significa ser hombre", afirma el estudio de Naciones Unidas. A?ade que "la asunci¨®n de que la contracepci¨®n, el embarazo, el parto y la prevenci¨®n de enfermedades de transmisi¨®n sexual son cosa de las mujeres refuerza que los hombres no se impliquen en proteger ni su salud reproductiva ni la de su pareja". En el caso del sida se considera imprescindible una mayor implicaci¨®n masculina para poder frenar la pandemia.

"En las culturas donde se acepta el patriarcado como la ¨²nica estructura familiar adecuada el hombre y la mujer pueden quedar atrapados en un tipo de relaciones y dependencias que frustren a ambos. Una mujer sin marido puede tener dificultades para sobrevivir, pero un hombre puede tener una vida dura sin una esposa que cultive el campo, cocine y cuide de los hijos", establece el informe.

El trabajo de la ONU matiza que para los hombres que ocupan los escalones sociales m¨¢s bajos el control sobre la mujer le permite una posici¨®n de poder que se les niega en otras esferas de su vida.

El informe recoge algunas ejemplos positivos de c¨®mo el cambio de conducta masculino ha permitido mejorar la situaci¨®n femenina. En este sentido, cita el papel desempe?ado por los empleados sanitarios de India, que han motivado a otros hombres para preocuparse por la salud de sus esposas y participar en el trabajo dom¨¦stico. Tambi¨¦n se refiere a otras experiencias en Nicaragua o Mali.En el cap¨ªtulo de experiencias ejemplarizantes se cita el caso del banco Grameen de Bangladesh. Ese banco de los pobres, pionero de los microcr¨¦ditos, ha recurrido a las nuevas tecnolog¨ªas para combatir la pobreza femenina. Provistas de un tel¨¦fono m¨®vil, muchas mujeres trabajan como telefonistas en sus pueblos.

La ONU considera que acabar con la discriminaci¨®n es una tarea que debe implicar no s¨®lo a los gobiernos, sino tambi¨¦n a a las familias y a las comunidades. Mientras tanto, recuerda que "el estatus de las mujeres como ciudadanos de segunda clase tiene un coste financiero y social que no les afecta s¨®lo a ellas. Los hombres y las sociedades tambi¨¦n pagan un precio por ello".