Los partidos albanokosovares radicalizan su petici¨®n de independencia por temor a la derrota del r¨¦gimen

Los partidos pol¨ªticos albanokosovares han redoblado en las ¨²ltimas horas sus reclamaciones de independencia para la provincia yugoslava, proyecto cada vez m¨¢s amenazado en el caso de que se confirme la derrota electoral del presidente yugoslavo, Slobodan Milosevic, y se cumpla la promesa occidental de redefinir sus relaciones con Belgrado, empezando por el embargo que actualmente existe. El ¨²ltimo en poner la cuesti¨®n sobre la mesa ha sido el l¨ªder moderado Ibrahim Rogova, presidente de la Liga Democr¨¢tica de Kosovo (LDK), quien en un mitin celebrado en la capital kosovar ha exigido a Occidente que reconozca la independencia del territorio con un tono distinto al utilizado hasta ahora por su dureza. Sin embargo, fuentes de la administraci¨®n internacional en Pristina consultadas por este peri¨®dico consideran que una victoria en Belgrado del l¨ªder opositor, Vojislav Kostunica, frenar¨ªa cualquier proyecto en este sentido que pudiera existir. "Adem¨¢s, este giro radical de Rugova terminar¨¢ de enterrarle como figura pol¨ªtica. Ya ha cambiado demasiadas veces de opini¨®n en muchas cuestiones", declar¨® un miembro de la administraci¨®n de Naciones Unidas en Kosovo (Unmik).

Rugova exigi¨® que adem¨¢s de elecciones locales -que tendr¨¢n lugar el pr¨®ximo 29 de octubre- se celebren comicios legislativos y presidenciales. Algo a lo que Unmik no est¨¢ dispuesta.

Por de pronto, la sola celebraci¨®n de elecciones yugoslavas en Kosovo ya ha servido para demostrar que hay m¨¢s serbios de los que se supon¨ªa en algunas partes de la provincia. "Todos pens¨¢bamos que en Pristina quedaban pocos cientos de serbios, pero lo cierto es que han votado 4.000", se?al¨® el general espa?ol Jos¨¦ Rodr¨ªguez, jefe de la oficina de relaciones militares de Naciones Unidas en Kosovo.

La existencia de un n¨²mero considerable de serbios en zonas clave de Kosovo supone que no existe una pureza ¨¦tnica albanesa en esos lugares como hasta ahora se?alaban las cifras manejadas por organismos internacionales. "Esto significa que habr¨¢ que dedicar m¨¢s recursos a los serbios. Si se normalizan las relaciones con Belgrado, puede que comencemos a tener menos fondos", opin¨® el representante de una ONG que pidi¨® guardar el anonimato.