Cumplea?os feliz con Kiko Veneno
En contraposici¨®n a las ¨²ltimas semanas, en las que figuras como Lou Reed, David Byrne o Caetano Veloso han dominado la programaci¨®n musical, ahora se vive de nuevo una situaci¨®n de equilibrio entre artistas for¨¢neos y nacionales. Y esta coyuntura se produce gracias a la visita de figuras consagradas, a nivel art¨ªstico y de ventas, como Kiko Veneno. El catal¨¢n parece que ha recuperado la buena forma y la sala Jam de Bergara se ha acordado de ¨¦l para encabezar la fiesta de su cuarto aniversario. Dicho sarao se celebra hoy y el cantante y guitarrista lo aprovechar¨¢ para presentar las canciones de su ¨²ltimo disco, La familia pollo (RCA), en el que vuelve a apostar por la rumba, por el pop y por la simpat¨ªa en unas letras que rebosan inocencia (aunque en Feos arremeta contra la clase pol¨ªtica). Los mismos ingredientes que mezcl¨® con ¨¦xito en ?chate un cantecito, aderezados con espor¨¢dicas gotas de blues y de son cubano. As¨ª, tras alg¨²n paso en falso y favorecido por la paup¨¦rrima competencia, s¨®lo animada por la reciente recuperaci¨®n de Peret, Kiko Veneno se perpet¨²a como indiscutible rey de la rumba pop.
Aunque el Kafe Antzokia de Bilbao no tiene nada especial que celebrar, ha anunciado para esta noche la actuaci¨®n conjunta de dos nombres bien conocidos en la escena rock internacional y en el mundillo del pop rock espa?ol: el norteamericano Steve Wynn y los gijoneses Australian Blonde. El motivo de su actual gira no es otro que promocionar Momento (Astro), un trabajo tambi¨¦n conjunto que rompe con la producci¨®n previa del grupo asturiano y sorprende a quienes esperaban una nueva remesa de temas inmediatos que mantuviera viva la llama adolescente eternamente ligada al pop. S¨ª se trata de un disco pop, pero parece que los autores han alcanzado su madurez mostrando una mayor templanza y acorazando las melod¨ªas con una completa bater¨ªa de instrumentos poco usuales en el rock, como la tuba.
As¨ª logra sabor a?ejo Australian Blonde, cuarteto que a mediados de los noventa encabez¨®, junto a Los Planetas, un movimiento indie que en buena medida reneg¨® de ellos cuando ficharon por una multinacional. A esa discogr¨¢fica ya no pertenecen pues, tras vivir d¨ªas de ef¨ªmera gloria al popularizar su tema Chup chup gracias a un anuncio y a participar en la pel¨ªcula Historias del Kronen, la llamada generaci¨®n X les tom¨® por la solapa y les sacudi¨® con furia en busca de un nuevo hit que nunca lleg¨®. Y, por cierto, tampoco parece que est¨¦ en Momento.
La que tampoco tiene un hit reconocible, pero s¨ª que vende numerosos discos en Espa?a es Noa, cantante israel¨ª que mostr¨® maneras casi desp¨®ticas durante la rueda de prensa que ofreci¨® el pasado viernes en Bilbao. Entonces se prohibi¨® fumar en su presencia, ech¨® de su mesa a la novata traductora y s¨®lo permiti¨® ser retratada de frente o luciendo su perfil derecho. Pero ma?ana seguro que todo son atenciones con quienes acudan a verla y escucharla al pabell¨®n de La Casilla. All¨ª ha prometido cantar en ingl¨¦s, hebreo, yemen¨ª y castellano un repertorio ubicado entre la sofisticaci¨®n del pop y la llaneza de la tradici¨®n de su lugar de origen. Una propuesta, en suma, alejada del estereotipo folcl¨®rico ligado a la m¨²sica asi¨¢tica, y todo por haberse criado en el Bronx neoyorquino.
Noa ha recurrido en Blue touches blue a elementos del techno, por lo que quiz¨¢ le interese pasarse este fin de semana por el Gazteszena de San Sebasti¨¢n. All¨ª se celebra estos d¨ªas el Elektronikaldia 2000, el segundo festival de m¨²sica electr¨®nica donostiarra, con la participaci¨®n destacada del norteamericano Terre Thaemlitz, el d¨²o brit¨¢nico SND, el alem¨¢n Thomas Brinkmann y el ex Cabaret Voltaire Richard H. Kirk (hoy); los japoneses Nobukazu Takemura y U.F.O., los alemanes Jazzanova y el brit¨¢nico Phil Asher (ma?ana), y el d¨²o ingl¨¦s The Wire Sound System, Fenno'berg y los zaragozanos John Landis Fans (el domingo). Ser¨¢n por tanto tres d¨ªas para confirmar o desmentir la frialdad de unas tendencias art¨ªsticas que recurren a la inform¨¢tica y la avanzada tecnolog¨ªa de sonido para crear ritmos y melod¨ªas tachadas de artificiosas, sint¨¦ticas y deshumanizadas.
No puede decirse lo mismo de las canciones que hoy y ma?ana sonar¨¢n en vivo en el Teatro Gayarre de Pamplona, donde se representar¨¢ Memory con el esp¨ªritu y la inspiraci¨®n de los c¨¦lebres musicales de Broadway como tel¨®n de fondo. De hecho, la actriz principal de la obra, una joven que aspira a protagonizar uno de ellos, nos permite compartir el sue?o de ver desfilar por los grandes almacenes en los que trabaja como dependienta a las estrellas de los espect¨¢culos que la seducen y obnubilan. ?se es el contexto en el que se recuperan n¨²meros de West Side story, Sonrisas y l¨¢grimas, Fama o Cantando bajo la lluvia.
La m¨²sica juega tambi¨¦n un papel importante en Dimonis, representaci¨®n pagana creada en 1981 por Comediants para la inauguraci¨®n del c¨¦lebre Carnaval de Venecia. Desde entonces, la compa?¨ªa catalana mantiene viva una bacanal de efectos pirot¨¦cnicos, luces y percusiones, un espect¨¢culo de luces y sonido en el que los demonios reclaman un sitio en la Tierra, un espacio en el que danzar y achicharrarse de calor entre las omnipresentes llamas. M¨¢s de un vitoriano se sofocar¨¢ y asustar¨¢ con ellos ma?ana en las calles de su ciudad.
Por otra parte, los aficionados vizca¨ªnos pueden celebrar este fin de semana la puesta en escena de El inspector en Barakaldo. De dar vida a los m¨¢s de 30 personajes que intervienen en la obra del ucraniano Nikolai Gogol se encargar¨¢n ocho actores de Suripanta Teatro. Esta compa?¨ªa extreme?a ha adaptado este cl¨¢sico para deleite de quienes quieran re¨ªrse a gusto con las corruptelas de varios funcionarios atemorizados ante la visita de un inspector de la Administraci¨®n. Sobre ello versa una c¨¢ustica farsa que tuvo que afrontar m¨¢s de un problema en el momento de su estreno, en 1836.
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