Premio a la econom¨ªa social
La primera caracter¨ªstica com¨²n que resaltar¨ªa de James Heckman y Daniel McFadden es que se trata de humanistas con una preocupaci¨®n genuina por la resoluci¨®n de problemas sociales y no de aficionados a la t¨¦cnica por la t¨¦cnica.Otra caracter¨ªstica notoria es su af¨¢n por explotar la ingente masa de informaci¨®n estad¨ªstica de la que disponemos hoy en d¨ªa sobre las circunstancias de los hogares, as¨ª como las posibilidades de hacerlo que ofrecen los ordenadores modernos, a fin de estudiar emp¨ªricamente las decisiones individuales y la efectividad de las pol¨ªticas p¨²blicas.
En tercer lugar Heckman y McFadden han proseguido este af¨¢n con extraordinaria originalidad y calidad cient¨ªfica. Esto ha hecho que se cuenten, junto con Zvi Griliches y G. S. Maddala, fallecidos en 1999, entre los que han influido m¨¢s, tanto en sus m¨¦todos como modos de pensar, sobre varias generaciones de economistas e investigadores sociales en todo el mundo.
Los galardonados son economistas, pero el ¨¢mbito de sus preocupaciones y m¨¦todos trasciende lo estrictamente econ¨®mico, por lo que su actividad nos resultar¨ªa igualmente familiar y pertinente desde el punto de vista de la sociolog¨ªa, de la psicolog¨ªa social o de la ciencia pol¨ªtica.
James Heckman ha sido descrito por la Academia Sueca como el investigador l¨ªder mundial en la evaluaci¨®n de pol¨ªticas laborales y educativas. Su trabajo ha tenido por objeto dar respuesta emp¨ªrica a cuestiones como cu¨¢l es el impacto de la participaci¨®n en un programa de formaci¨®n profesional sobre las oportunidades de empleo o los salarios posteriores.
Incluso con informaci¨®n abundante, la respuesta a este tipo de cuestiones es dif¨ªcil porque en econom¨ªa carecemos de datos experimentales, o incluso teni¨¦ndolos estos pueden no ser adecuados. Por ejemplo, en las encuestas se suele observar que salarios m¨¢s bajos van asociados con tasas de participaci¨®n en cursos de formaci¨®n m¨¢s altas. ?Quiere esto decir que el efecto de la pol¨ªtica es reducir los salarios? Desde luego que no. Lo que ocurre es que los trabajadores menos aventajados suelen tener mayores incentivos a formarse, y su desventaja se refleja tanto en salarios m¨¢s bajos como en tasas de participaci¨®n en cursos m¨¢s altas. Heckman ha caracterizado este efecto de autoselecci¨®n y sus implicaciones para las posibilidades de evaluar emp¨ªricamente las pol¨ªticas sociales.
Para dar una muestra de la importancia de sus resultados es mejor darle la palabra al propio Heckman (lo cual, dicho sea de paso, le encanta): "Toda la evidencia disponible apunta al gran valor a largo plazo de aumentar la formaci¨®n y la educaci¨®n de los m¨¢s j¨®venes. (...) La formaci¨®n trae consigo m¨¢s formaci¨®n; el aprendizaje temprano promueve el aprendizaje posterior. La inversi¨®n en educaci¨®n de los m¨¢s j¨®venes proporciona una rentabilidad social mucho mayor que la inversi¨®n en los quincea?eros o en los adultos de mediana edad. (...) Con los trabajadores adultos, la situaci¨®n es m¨¢s compleja. Las pol¨ªticas para mejorar la formaci¨®n pueden ayudar, pero mi investigaci¨®n y la de otros demuestra que tales pol¨ªticas son muy costosas, incluso si se dirigen a j¨®venes con bajas cualificaciones, y ciertamente si se dirigen a trabajadores m¨¢s maduros. La rentabilidad econ¨®mica de la formaci¨®n para estas personas es tan baja que una pol¨ªtica m¨¢s ¨²til ser¨ªa subvencionar su empleo. Los empleos subvencionados ofrecen una alternativa atractiva a otro tipo de subsidios: promueven empleo, integran a los no cualificados en la econom¨ªa, y les proporcionan a ellos, a su entorno, y a sus hijos la dignidad y el beneficio social del trabajo".
Daniel McFadden ha contribuido decisivamente al desarrollo de los m¨¦todos para el an¨¢lisis de decisiones discretas, combinando magistralmente la teor¨ªa econ¨®mica y la observaci¨®n emp¨ªrica. A menudo los economistas estudian decisiones continuas: cu¨¢nto gastar o cu¨¢nto ahorrar. No obstante, algunas de las decisiones m¨¢s importantes que tomamos en nuestra vida son decisiones discretas: elegir estudios, ocupaci¨®n, pareja, tener hijos, comprar una vivienda. McFadden ha estudiado numerosos problemas sociales de este tipo. Por ejemplo, las decisiones sobre el transporte urbano: ?De qu¨¦ depende que nos desplacemos a trabajar en coche propio o en transporte p¨²blico? ?Cu¨¢l es el efecto de un nuevo t¨²nel urbano sobre la demanda de transporte? A los responsables del tr¨¢fico en Madrid les convendr¨ªa comprender el sentido de los estudios de McFadden al respecto. Daniel McFadden tambi¨¦n ha destacado por su inter¨¦s en la econom¨ªa medioambiental. Ha contribuido a la estimaci¨®n del valor de los recursos naturales y a la medici¨®n de los da?os ecol¨®gicos sobre la costa de Alaska producidos por el desastre petrol¨ªfero de 1989.
Los trabajos profesionales de Heckman y McFadden pueden resultar incomprensibles para el no especialista. Los problemas son complejos y su empe?o est¨¢ en ir m¨¢s all¨¢ de los trazos gruesos. Pero no se dejen enga?ar, tipos como Heckman y McFadden son muy ¨²tiles a la sociedad. Por eso el que hayan sido galardonados es una buena noticia de la que debemos congratularnos.
Manuel Arellano es profesor de Econometr¨ªa del CEMFI.
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