El arquitecto Guillermo V¨¢zquez Consuegra gana el concurso del Museo del Mar de G¨¦nova
El profesional sevillano construir¨¢ tambi¨¦n el Palacio de Justicia de Ciudad Real
El arquitecto sevillano Guillermo V¨¢zquez Consuegra construir¨¢ el Museo del Mar y de la Navegaci¨®n en G¨¦nova (Italia), una de las apuestas m¨¢s fuertes que la ciudad italiana realiza para celebrar en el a?o 2004 su nombramiento como capital europea de la cultura. V¨¢zquez Consuegra, que a sus 55 a?os es uno de los profesionales m¨¢s reputados de la arquitectura espa?ola, realizar¨¢ este edificio de 14.000 metros cuadrados, su primera obra en Italia, tras ganar las dos fases de un concurso internacional. Adem¨¢s, tiene otros proyectos en cartera.
El Museo del Mar de G¨¦nova (Italia), que se levantar¨¢ entre el a?o 2001 y el a?o 2003, incorpora al proyecto unas atarazanas construidas en el siglo XVI llamadas edificio Galata, que han estado en desuso esta ¨²ltima d¨¦cada y que se encuentran en la zona portuaria de la ciudad. Este edificio tiene adosada actualmente a la fachada principal, de estilo neocl¨¢sico, una estructura de hormig¨®n armado de los a?os veinte que, seg¨²n el proyecto dise?ado por el arquitecto, ser¨¢ demolida."Nuestro proyecto es arriesgado. Se trata de construir una segunda piel de vidrio al edificio que, en el caso de la fachada principal, guarda una distancia de 14 metros con la neocl¨¢sica. Entre ambas fachadas hemos colocado toda la comunicaci¨®n vertical (ascensores, montacargas y sistemas t¨¦cnicos), de forma que quedar¨¢ un gran vest¨ªbulo con 25 metros de altura", explica V¨¢zquez Consuegra que ya ha construido otros museos como el de la Ilustraci¨®n en Valencia y, a finales de este a?o, iniciar¨¢ otro de sus proyectos m¨¢s mimados: el Museo Nacional de Arqueolog¨ªa Mar¨ªtima, en Cartagena.
Un nuevo lenguaje
El edificio italiano Galata, cuyas b¨®vedas de ca?¨®n sirvieron durante siglos para construir la galera genovesa -una embarcaci¨®n que dio fama a la ciudad en todo el Mediterr¨¢neo- contar¨¢ con una planta m¨¢s. "Ser¨¢ una gran sala-mirador, cerrada y acristalada pero a cielo abierto, que albergar¨¢ los temas de astronom¨ªa y servir¨¢ tambi¨¦n como mirador hacia la ciudad. Hemos previsto una ranura en el vidrio transl¨²cido para que la gente pueda contemplar el paisaje. No es una intervenci¨®n puramente epid¨¦rmica, sino que con ella el edificio tendr¨¢ un nuevo lenguaje", explica el arquitecto que, desde 1993 trabaja en el nuevo borde mar¨ªtimo de la ciudad de Vigo.La navegaci¨®n, el viaje, conceptos que han marcado profundamente la obra de Guillermo V¨¢zquez Consuegra, esbozados incluso en la fisonom¨ªa de una de sus primeras construcciones como el edificio de viviendas de Ram¨®n y Cajal en Sevilla, son una constante en su obra.
El autor del Pabell¨®n de la Navegaci¨®n en la sevillana isla de La Cartuja, acaba tambi¨¦n de obtener el primer premio del concurso para el Palacio de Justicia de Ciudad Real, una edificaci¨®n de 16.000 metros cuadrados en cinco plantas cuyas obras comenzar¨¢n en oto?o del pr¨®ximo a?o. El proyecto para el Palacio de Justicia de Ciudad Real, resultado de un concurso nacional al que el Ministerio de Justicia invit¨® a participar a una docena de estudios, se levantar¨¢ en una zona perif¨¦rica de la ciudad manchega.
"Este edificio, como todo mi trabajo, mantiene una relaci¨®n con la zona en la que estar¨¢ ubicado", asegura V¨¢zquez Consuegra. "Tiene forma de hache y lo hemos planteado abierto hacia una peque?a plaza, que se llama del Trillo, lo que crear¨¢ un gran atrio necesario para este tipo de edificios p¨²blicos. La parte trasera est¨¢ abierta hacia un jard¨ªn interior", adelanta el arquitecto quien, por primera vez, ha optado por materiales como el aluminio y el vidrio para su proyecto.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.