Kosovo avanza
A falta de datos precisos, parece claro que los albanokosovares han optado en los comicios locales del s¨¢bado -su primer paso para librarse de la tutela internacional- por la moderaci¨®n de la Liga Democr¨¢tica de Kosovo, la formaci¨®n del hist¨®rico dirigente Ibrahim Rugova, frente al partido del ex comandante guerrillero Hashim Thaci. El resultado de los comicios, considerados limpios por la OSCE y aceptado ayer por el derrotado Thaci, debe ser bienvenido por varios motivos. El principal es que casi un mill¨®n de albaneses con derecho a voto -los serbios boicotearon las elecciones- hayan sido capaces de librarse de las emociones de su reciente y tr¨¢gico pasado a la hora de acudir pac¨ªficamente a las urnas. Son m¨ªnimos los poderes derivados de estas elecciones para el control de 30 ayuntamientos durante los dos pr¨®ximos a?os: poco m¨¢s que recoger la basura y ocuparse de los colegios y de los centros de salud; todo lo importante debe pasar por el filtro de las autoridades de la ONU, que dirigen Kosovo como un protectorado desde que, a mediados del a?o pasado, la OTAN forzara con sus bombardeos la retirada de las fuerzas serbias. Pero su valor simb¨®lico es grande. Son las primeras elecciones tras la guerra que permiten a los kosovares dotarse de un mecanismo de representaci¨®n reconocido por la comunidad internacional. Y constituyen un ensayo general para los comicios parlamentarios que las Naciones Unidas deben convocar en Kosovo en alg¨²n momento del a?o pr¨®ximo, llamados a resucitar definitivamente la cuesti¨®n, ahora en un conveniente limbo, del destino final de la que t¨¦cnicamente es a¨²n una provincia serbia.
El tiempo dir¨¢ pronto si ¨¦ste ha sido m¨¢s un voto a favor del moderado Rugova o contra los insurgentes del UCK. Los albanokosovares, una sociedad conservadora, han entendido que si el UCK fue determinante en la derrota de Slobodan Milosevic, y triunf¨® all¨ª donde Rugova fracas¨®, la paz debe ser administrada por una formaci¨®n implantada de antiguo en el territorio y que pueda dar mayor predecibilidad, orden y seguridad a sus vidas. En cualquier caso, la victoria de la Liga en los comicios locales es m¨¢s una cuesti¨®n de estilo que de fondo, puesto que tanto este partido como los ex guerrilleros buscan como objetivo final e irrenunciable la independencia del territorio protegido ahora por m¨¢s de 40.000 soldados internacionales.
El cambio de r¨¦gimen en Belgrado ha alterado la situaci¨®n de Kosovo. La mera presencia de Milosevic en el poder era el mejor argumento de Pristina por su independencia. Su sucesor, el presidente Vojislav Kostunica, no puede reconocer unos comicios boicoteados por su minor¨ªa; pero la nueva Serbia predemocr¨¢tica ya no es un seudoestado paria dirigido por criminales de guerra, sino un pa¨ªs en v¨ªas de reforma, capaz de competir por la comprensi¨®n occidental en el pr¨®ximo debate sobre el estatuto de Kosovo. Si los resultados del s¨¢bado reflejan una tendencia, tambi¨¦n en lo que se refiere a la inevitable negociaci¨®n futura con Belgrado, el talante conciliador de Rugova deber¨ªa augurar un mejor entendimiento con el enemigo.
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