"Palestinos y jud¨ªos deben entender que no se librar¨¢n unos de otros"

Geograf¨ªa, composici¨®n demogr¨¢fica y vocaci¨®n pol¨ªtica imponen a Jordania una presencia en el conflicto de Oriente Pr¨®ximo mayor de lo que cabr¨ªa esperar de su tama?o. La diplomacia jordana trabaja estos d¨ªas con intensidad para intentar reconstruir los puentes del di¨¢logo entre israel¨ªes y palestinos que han saltado por los aires con el nuevo estallido de violencia. El ministro de Asuntos Exteriores, Abdul Ilah Jatib, que acompa?¨® al rey Abdal¨¢ a las cumbres de Sharm el Sheij y El Cairo, volv¨ªa de entrevistarse con el presidente palestino, Yasir Arafat, cuando ayer recibi¨® a EL PA?S. "La paz es la ¨²nica opci¨®n", repiti¨® una y otra vez durante la entrevista, subrayando as¨ª la postura que su pa¨ªs mantiene desde hace a?os. Pregunta. ?En qu¨¦ consiste la "diplomacia tranquila" que, seg¨²n su primer ministro, est¨¢ llevando a cabo Jordania?

Respuesta. Tenemos una larga historia de participaci¨®n en los contactos diplom¨¢ticos y pol¨ªticos de esta zona, porque somos una de las principales partes directamente implicadas en el proceso de paz. Jordania ha defendido una soluci¨®n pol¨ªtica del conflicto ¨¢rabe-israel¨ª desde los primeros momentos tras la guerra de 1967. Y hemos alcanzado nuestra paz con Israel como parte de ese proceso global. Sabemos que el n¨²cleo del problema en la regi¨®n es la dimensi¨®n israelo-palestina del mismo. Sin una soluci¨®n de esa parte del conflicto, no habr¨¢ paz en la regi¨®n. Estamos totalmente convencidos de ello y tratamos de convencer al resto de que act¨²en sobre la base de que la paz es la ¨²nica opci¨®n. Los palestinos no pueden librarse de los israel¨ªes y los israel¨ªes no pueden librarse de los palestinos. Cuanto antes se convenzan de ello, menor ser¨¢ el sufrimiento y el dolor que padecen sus pueblos. Hay que volver a la situaci¨®n previa a los enfrentamientos. Confiamos en que los israel¨ªes se hayan dado cuenta de que no pueden silenciar a los palestinos con el uso de la fuerza.

P. Usted estuvo anoche en Gaza. ?Qu¨¦ impresi¨®n se ha tra¨ªdo?

R. S¨ª; a pesar del deterioro de la situaci¨®n sobre el terreno, visit¨¦ a Arafat en su despacho, en Gaza. Le reiter¨¦ nuestra posici¨®n de que la ¨²nica soluci¨®n es la vuelta al proceso de paz y encontr¨¦ que los palestinos se mostraban receptivos. Est¨¢n esperando que los israel¨ªes pongan fin a ese trato, a las muertes diarias. Tambi¨¦n piden que los israel¨ªes replieguen sus tanques y artiller¨ªa pesada a las posiciones que ocupaban antes de los enfrentamientos.

P. Esta crisis ha provocado una reacci¨®n sin precedentes en la calle ¨¢rabe. ?Qu¨¦ la hace diferente de las anteriores?

R. En primer lugar, el insulto que todos los ¨¢rabes y los musulmanes sintieron tras la visita de Sharon a Al Aqsa. Es muy grave. Se trata de uno de los lugares m¨¢s sagrados del islam. Incluso para la gente que no es muy religiosa, se trat¨® de algo ofensivo, porque es muy simb¨®lico. Y cuando se trata de los s¨ªmbolos nacionales y religiosos hay que ser muy cuidadoso. Sharon debiera darse cuenta de que ha causado mucho dolor y sufrimiento y que ha complicado terriblemente la situaci¨®n regional. Debemos decirle a ¨¦l y a todo el mundo que la paz no es un gesto de caridad hacia el pueblo palestino. Los israel¨ªes necesitan la paz, verdadera paz, tanto como los palestinos. ?sta es una oportunidad hist¨®rica, y si se pierde, toda la regi¨®n sufrir¨¢. Por otra parte, todos en esta zona est¨¢n observando el proceso de paz, los contactos diarios, las reuniones, cada detalle. Y de repente han visto el tratamiento agresivo, el excesivo uso de la fuerza contra los palestinos. Ha sido un golpe bajo. Cre¨ªan que se estaban hablando como socios. Han visto que se impon¨ªa la relaci¨®n ocupante-ocupado justo cuando la gente intentaba liberarse de esa imagen.

P. Mi impresi¨®n es que los ciudadanos, no s¨®lo en Jordania, sino en todo el mundo ¨¢rabe, se est¨¢n mostrando m¨¢s radicales que sus dirigentes (piden la ruptura total de relaciones con Israel). ?No abre eso una brecha entre los Gobiernos y sus pueblos?

R. En Jordania respetamos los sentimientos de nuestro pueblo. Sentimos de igual forma. Pero, cuando se trata de tomar medidas cr¨ªticas, actuamos de forma responsable, intentando decir a todo el mundo que la paz es la ¨²nica opci¨®n. Aunque eso tiene que ser correspondido desde el otro lado, porque, como he dicho, la gente ha resultado realmente sorprendida por la forma en que las fuerzas israel¨ªes se han enfrentado a los j¨®venes y ni?os palestinos desarmados. Estas escenas han ofendido no s¨®lo a los jordanos o a los ¨¢rabes, sino a todo el mundo. Eso tiene que acabar, es lo importante. En todas las sociedades hay un amplio espectro de opiniones, pero los Gobiernos responsables act¨²an de forma responsable. El fracaso en superar esta crisis y volver a la mesa de forma digna reforzar¨¢ sin duda a los que se oponen a la paz en ambos lados.

P. La mayor¨ªa de los jordanos con los que he hablado me han dicho que no ven los beneficios del tratado de paz que ustedes firmaron con Israel en 1994. ?C¨®mo les explicar¨ªa la necesidad de mantenerlo?

R. En primer lugar, seguimos convencidos de que la paz es la ¨²nica opci¨®n. Pase lo que pase, se volver¨¢ a la mesa de negociaciones, unos y otros afrontar¨¢n esta realidad y se dar¨¢n cuenta de que no pueden eliminar al adversario. Lo triste es que se convencer¨¢n de ello tras el sacrificio de mucha gente inocente. En segundo lugar, estamos intentando dar apoyo y ¨¢nimo para que avance el proceso de paz, y nuestras relaciones nos dan los medios para hacerlo. Si fallamos, nos encontraremos ante una presi¨®n mucho mayor.

P. Jordania no s¨®lo tiene una importante poblaci¨®n palestina, sino que es adem¨¢s el ¨²nico acceso exterior a Cisjordania. ?Teme usted una eventual extensi¨®n de la violencia?

R. No; creo que la mayor¨ªa de la gente sabe que se trata de una confrontaci¨®n entre israel¨ªes y palestinos, y que la mejor forma de actuar es dar apoyo a los palestinos y trabajar de forma efectiva para ayudarles. Creemos que s¨®lo una Jordania fuerte y unida puede hacerlo. La gran mayor¨ªa de nuestra gente evitar¨¢ cualquier acci¨®n que pueda minar la capacidad del pa¨ªs para hacer frente de forma constructiva a la situaci¨®n.