La renta de 61.845 pesetas para las personas sin recursos entrar¨¢ en vigor el pr¨®ximo 1 de enero

A partir del 1 de enero pr¨®ximo, todas las personas residentes en Euskadi, mayores de 25 a?os, que carezcan de recursos econ¨®micos para llevar una vida digna tendr¨¢n derecho a recibir una renta mensual de 61.845 pesetas. PNV, PP, PSE y UA cerraron ayer este acuerdo, que podr¨ªa ser mejorado si prospera una proposici¨®n de ley socialista que rebaja a 18 la edad m¨ªnima para recibir esta ayuda. La Carta de Derechos Sociales ser¨¢ aprobada en comisi¨®n el 5 de diciembre y antes de fin de a?o, en pleno. Los promotores insisten en que se ha devaluado gravemente su iniciativa.

Oasis de acuerdo

Quienes acrediten ante los servicios sociales que carecen de ingresos o que ¨¦stos son inferiores al 75% del Salario M¨ªnimo Interprofesional (SMI) tendr¨¢n aseguradas en 2001 las 61.845 pesetas mensuales en que se ha fijado la renta universal para las familias de un solo miembro. En el caso de dos miembros ser¨¢n 82.460 pesetas, 90.700 pesetas si son tres, y un 10% m¨¢s por cada nuevo miembro, hasta un tope de 109.000 pesetas, por doce meses. La cantidad de partida supone el 75% de las 14 pagas del SMI (70.680 pesetas mensuales) y supera en m¨¢s de 11.000 pesetas al actual Ingreso M¨ªnimo de Inserci¨®n (IMI) o salario social que regula la Ley contra la Exclusi¨®n Social. De hecho, "la Carta de Derechos Sociales no supone un borr¨®n y cuenta nueva con los avances sociales conseguidos por los ciudadanos vascos, sino que viene a complementarlos y mejorarlos", subray¨® ayer la portavoz socialista Gemma Zabaleta.

El texto de la ley que aprobar¨¢ la C¨¢mara no establece tampoco la edad m¨ªnima que deber¨¢n tener los perceptores. En estos momentos los beneficiarios del IMI -50.000 pesetas- tienen que tener un m¨ªnimo de 25 a?os, pero el Gobierno vasco podr¨¢ reducir esta edad. El PSE ha tramitado una proposici¨®n de ley que reduce la edad de los perceptores del IMI a 18 a?os.

La ponencia parlamentaria que estudia la Carta Social puso ayer punto final a la elaboraci¨®n del dictamen, que ser¨¢ sometido el pr¨®ximo d¨ªa 5 a la Comisi¨®n de Trabajo y Acci¨®n Social, y d¨ªas m¨¢s tarde al pleno de la C¨¢mara. Las regulaciones de la Carta Social, una vez que entren en vigor, sustituir¨¢n las recogidas en la vigente Ley contra la Exclusi¨®n Social. Sin embargo los beneficiarios de las actuales ayudas de emergencia y de los convenios de inserci¨®n seguir¨¢n contando con ellos, al margen de que reciban o no la renta universal.

La nueva ley consolida el derecho a la inserci¨®n social y laboral de todos los ciudadanos vascos y, adem¨¢s, les garantiza una renta b¨¢sica universal cuyo objetivo fundamental es precisamente la inserci¨®n. Desde que la Carta de Derechos Sociales entr¨® al Parlamento hace cuatro a?os por la f¨®rmula de la iniciativa popular (avalada por 83.000 firmas de ciudadanos de todo el Pa¨ªs Vasco), ha dado un par de giros de 180 grados. Primeramente el PNV se opuso a a su toma en consideraci¨®n; es decir, pretend¨ªa que el texto presentado por varios colectivos no iniciara el tr¨¢mite parlamentario que pudiera transformarlo en una ley. Ahora ha acabado apoyando la mayor parte de las posturas del PSE, que a su vez ha moderado las aspiraciones de los promotores de la Carta social.

EH la consider¨® un objetivo prioritario para la "construcci¨®n nacional y social", al dotar a los m¨¢s desfavorecidos de una m¨ªnima independencia econ¨®mica con cargo a los fondos p¨²blicos. Sin embargo, tras su marcha del Parlamento ha abandonado en ese campo a quienes le votaron en las elecciones. A su vez, el PP mir¨® desde el comienzo este asunto con gran desapego, pero cuatro a?os despu¨¦s va a estampar su firma en el texto que universaliza una renta para todas las personas sin recursos.

Este amplio consenso sobre la Carta Social se plasma precisamente en uno de los momentos de mayor divisi¨®n e incomunicaci¨®n entre los partidos vascos. Como un oasis en plena crispaci¨®n, el PSE ha atraido a sus enmiendas tanto al PNV como al PP y a UA, y tambi¨¦n en gran medida a EA e IU, aunque estos partidos quer¨ªan que la renta fuera del 100% del IMI.La Carta Social se va a convertir, casi con toda seguridad, en la ¨²nica iniciativa parlamentaria de trascendencia social que salga adelante en la C¨¢mara antes de que el lehendakari Juan Jos¨¦ Ibarretxe convoque elecciones auton¨®micas anticipadas.. De hecho, el Gobierno del PNV-EA, dada su precaria situaci¨®n, ha renunciado a presentar el proyecto de Presupuestos para 2001. Quiz¨¢ por ello, y a pesar de que no era del agrado del PNV, el Gobierno ha puesto un especial inter¨¦s en que la Carta Social salga adelante y la propia Presidencia del Ejecutivo ha empujado para cerrar un acuerdo que salve la legislatura, aunque fuera una iniciativa popular.