"Cinema Paradiso' es la historia de mi vida"

Pregunta. El otro d¨ªa vi una foto tuya con Woody Allen. ?Sigue en pie vuestro plan de montar cines en Estados Unidos para exhibir pel¨ªculas europeas?Respuesta. Bueno, de momento la cosa no ha superado la fase de las buenas intenciones. Esa es una cuesti¨®n que saqu¨¦ yo en una reuni¨®n de profesionales, que para meter la nariz en Estados Unidos los europeos ten¨ªamos que hacerlo desde dentro. Y la mejor manera es tener nuestras propias salas, lo cual es factible en algunas ciudades norteamericanas como Nueva York, Los ?ngeles, San Francisco o Chicago. A Woody Allen le pareci¨® una buena idea. Piensa que en Manhattan la ¨²nica sala en la que se puede ver cine europeo es el Angelika Film Center.

P. Tal vez deber¨ªas involucrar a m¨¢s gente interesada en el cine europeo, como Martin Scorsese o Robert de Niro.

R. Buena idea. Recu¨¦rdame que la pr¨®xima vez que vaya a comer al Tribeca Grill suba luego a darle la lata a De Niro.

P. Siempre est¨¢s en fase expansiva, ?no?

R. No queda m¨¢s remedio. Lo que gano lo reinvierto en la empresa; por eso no tengo un duro.

P. Llorens, yo te he visto en un Porsche.

R. Un Porsche de la empresa. A m¨ª los aviones me dan grima y, si puedo, prefiero ir a todas partes por carretera. Haz n¨²meros y ver¨¢s que, de dos personas en adelante, es m¨¢s barato ir a Madrid en Porsche que en avi¨®n.

P. Y tal como est¨¢n las cosas en la depauperada industria cinematogr¨¢fica catalana, supongo que hay que ir bastante a Madrid.

R. La verdad es que se ha hecho todo bastante mal. Se ha dado prioridad a un seudopatriotismo de estar por casa en vez de fomentar una industria s¨®lida. Se ha subvencionado de manera arbitraria y la lengua ha sido m¨¢s importante que la cultura. No se pueden hacer pel¨ªculas s¨®lo para catalanes. Nuestro mercado natural es Espa?a, Europa... Yo estoy encantado de ser catal¨¢n, que conste, y de Cambrils para m¨¢s se?as, pero no necesito record¨¢rmelo a m¨ª mismo todos los d¨ªas. Ya me est¨¢ bien que ¨¦ste sea un pa¨ªs de fenicios biling¨¹es.

P. Supongo que tu fijaci¨®n por el cine arranca de la infancia.

R. Claro. ?Viste Cinema Paradiso? Es la historia de mi vida. Me identifiqu¨¦ mucho con el cr¨ªo protagonista. Todas esas emociones que sal¨ªan de la pantalla... Recuerdo lo ¨²tiles que eran las im¨¢genes de Raquel Welch a la hora de pel¨¢rsela en casa, aunque la verdad es que cuando la conoc¨ª me llev¨¦ una desilusi¨®n: ?sabes lo bajita que es?

P. La verdad es que no. Tampoco entiendo muy bien c¨®mo se pasa de ni?o de Cambrils a magnate de la industria cinematogr¨¢fica.

R. Trabajando. Yo enseguida me di cuenta de que no quer¨ªa heredar el colmado de mis padres en el Eixample y que me apetec¨ªa entrar en el mundo del cine. No sab¨ªa muy bien en qu¨¦ ¨¢rea, pero quer¨ªa formar parte de ¨¦l. Estudi¨¦ profesorado mercantil y mi primer trabajo fue de ayudante del contable en Izaro Films.

P. ?No hab¨ªas intentado ser actor? Yo a¨²n recuerdo aquellos anuncios de tus propias salas en los que sal¨ªas haciendo de padre de familia cin¨¦filo.

R. Intent¨¦ matricularme en el Institut del Teatre, pero no pas¨¦ la prueba de entrada. No es que me catearan, ?eh? Es que quer¨ªan que leyera un texto determinado y yo tra¨ªa el m¨ªo propio. Como insistieron en que leyera lo que ellos me daban, les envi¨¦ a la mierda y santas pascuas.

P. Parece que eres de los que montan su propia empresa para no recibir ¨®rdenes.

R. Yo viv¨ª la ¨²ltima ¨¦poca de las grandes distribuidoras espa?olas: Izaro, CB Films, S¨¢nchez Ramade, Cire Films... A finales de los setenta se acaba una manera de distribuir y empieza otra. La presencia de las multinacionales resulta m¨¢s evidente. Ya no puedes tener tu chiringuito y hacer lo que puedas. Hay que jugar m¨¢s fuerte y hablar directamente con los norteamericanos si quieres conseguir buenas pel¨ªculas, hay que ir a festivales. Yo mont¨¦ Lauren Films a principios de los ochenta, despu¨¦s de haber pasado por Paramount, y todo el mundo me dijo que era una mala ¨¦poca, que me la iba a pegar. Porque en este pa¨ªs lo que m¨¢s le gusta a todo el mundo es que te la pegues. En Estados Unidos se respeta al luchador que se la juega, aqu¨ª van a por ¨¦l a deg¨¹ello. En fin, que a pesar de tanto agorero mi empresa tiene ya 20 a?os de vida, 400 empleados y 250 salas en toda Espa?a.

P. Has ido por partes. Primero la distribuci¨®n. Luego la exhibici¨®n. Supongo que el siguiente paso es la producci¨®n.

R. Ya hemos producido algunas pel¨ªculas, aunque en la mayor parte de los casos se ha tratado de participaciones minoritarias. Ahora vamos a empezar a producir en serio. Desde Barcelona, para demostrar que, a pesar de lo dif¨ªcil que te lo ponen, puede hacerse industria en esta ciudad. Estoy obsesionado con hacer industria, que es una cosa que no tiene nada que ver con levantar subvenciones o hacer fuegos de artificio.

P. ?A qu¨¦ te refieres?

R. Hacer industria no es fabricar pel¨ªculas de terror, rodadas en ingl¨¦s, cuyo destino internacional no son las grandes salas, sino los videoclubs y la televisi¨®n por cable. Si la Generalitat, como parece ser el caso, considera que eso es hacer industria, apaga y v¨¢monos.

P. La Generalitat prefiere no tirar el dinero con el cine aut¨®ctono porque lo necesita para subvencionar a las multinacionales y que Schwarzenegger hable en catal¨¢n.

R. Yo ya no pago m¨¢s doblajes al catal¨¢n. Que se arruine otro.

P. ?Y cu¨¢les son las pel¨ªculas que te apetece producir?

R. Pues ni arte y ensayo ni imbecilidades ultracomerciales. A m¨ª me gustan las pel¨ªculas de John Ford, el cine cl¨¢sico que cuenta buenas historias, que transmite sentimientos. Para m¨ª, una pel¨ªcula es, ante todo, una buena historia bien explicada, que te emocione, o que te haga re¨ªr, o que te afecte de alguna manera. Es lo que te dec¨ªa de Cinema Paradiso. Yo miraba lo que ocurr¨ªa en la pantalla y pensaba: "Ese cr¨ªo soy yo, haciendo novillos en los maristas para pasar la tarde en el Rex, sabiendo que luego me voy a llevar un chorreo de los curas y d¨¢ndome igual".