Australia ya no ve el doble ganado de antemano

Cuando alguien preguntaba un pron¨®stico antes de la final de la Copa Davis, todo el mundo daba por hecho que Espa?a iba a perder el partido de dobles. Todos, menos los capitanes y los jugadores espa?oles. Los australianos hablaron sin remilgos al principio. No ten¨ªan problemas en asegurar que ¨¦se era el ¨²nico punto que ten¨ªan seguro. Pero, a medida que se acerca el partido, afloran sus dudas."No", afirma Mark Woodforde, que junto a Sandon Stolle forma una pareja veterana y relativamente nueva para Australia; "el doble no est¨¢ ganado antes de empezar. Que nadie se enga?e".

Woodforde tiene un historial sublime, pero sus mejores ¨¦xitos los ha conseguido junto a Todd Woodbridge: un palmar¨¦s impresionante, con 12 t¨ªtulos del Grand Slam y 14 victorias en la Copa Davis por s¨®lo dos derrotas. Sin embargo, junto a Stolle han jugado s¨®lo un torneo en el circuito, y de eso hace ya a?os, y su experiencia en este certamen se limita a tres partidos, de los que han perdido dos -ante Rusia y Estados Unidos en 1999- y han ganado uno -contra Brasil este a?o-.

La experiencia del doble espa?ol no es mucho mayor. M¨¢s bien al contrario. ?lex Corretja y Joan Balcells han jugado juntos s¨®lo en la Copa Davis. Y eso supone que han disputado tres partidos, los correspondientes a las eliminatorias que llevaron a Espa?a hasta esta final.

Su balance es de dos victorias -ante Italia y Estados Unidos- y una derrota -frente a Rusia-. Es corto, cierto. Pero, aun as¨ª, es la pareja espa?ola que m¨¢s partidos ha jugado y la que m¨¢s ha ganado desde la desaparici¨®n de la de Emilio S¨¢nchez y Sergio Casal en 1993. Desde entonces, el equipo espa?ol ha utilizado 12 parejas distintas para cuatro victorias y diez derrotas.

El partido ser¨¢ especial. Puede ser clave en el reto m¨¢s importante para el tenis espa?ol en su primera final desde 1967. Para los australianos es una despedida. Woodbridge lo dej¨® ya antes de la final, puesto que su esposa va a dar a luz estos d¨ªas y se qued¨® en Australia. Pero Woodforde, de 35 a?os, y Stolle, de 30, dicen adi¨®s en este partido. "Es la mejor forma de despedirse", aseguran los dos. "El doble es un compendio de buen juego, amistad y sentido de equipo. Y todo ello lo he encontrado tambi¨¦n en Stolle", prosigue Woodforde.

Corretja y Balcells quieren tambi¨¦n responder a la confianza del G-4. "No lo damos por perdido, ni mucho menos. Tenemos nuestras opciones y vamos a hacer todo lo posible para aprovecharlas", concluye Balcells.