Un modelo rodeado de pol¨¦mica

Para la oposici¨®n y los sindicatos, el hospital de Alzira es la encarnaci¨®n de la pol¨ªtica privatizadora que impulsa el Consell de Eduardo Zaplana en el ¨¢mbito sanitario. Tanto que en el cierre de la campa?a de las ¨²ltimas elecciones generales, el entonces secretario general del PSOE, Joaqu¨ªn Almunia, inst¨® al candidato del PSPV, Antoni Asunci¨®n, a recuperar la gesti¨®n p¨²blica del centro en su primera medida "como presidente de la Generalitat".La postura de los populares no ha mantenido la intensidad del frente anti-Alzira. El hospital naci¨® como bandera del nuevo modelo sanitario que deseaba aplicar el PP al llegar a la Generalitat y el espejo en el que se deber¨ªan mirar los centros de la red p¨²blica. Incluso se lleg¨® a barajar que el hospital de La Plana -finalmente con gesti¨®n p¨²blica- pudiera estar gestionado como el centro de La Ribera. Este impulso inicial fue perdiendo fuelle poco a poco hasta la situaci¨®n actual, lindando en la indiferencia.

Quiz¨¢s este cambio de actitud tenga que ver con los resultados obtenidos durante el primer a?o por el centro, gestionado por la aseguradora Adeslas en un 51%, Bancaixa, Caixa Carlet y la CAM, con el 15% cada una, Dragados, con el 2% y Lubasa con otro 2% de las acciones. El hospital no super¨® gran parte de los ¨ªndices de actividad estimados. De los 19.500 ingresos programados, no pas¨® de 13.000 y realiza¨® 13.000 intervenciones, frenta a las 19.000 estimadas. Tampoco fueron los esperados los resultados econ¨®micos de 1999 a tenor de la provisi¨®n de fondos suplementaria a la que tuvieron que hacer frente las tres cajas de ahorros que participan en el proyecto.