El 'golpe' de O'Neill en Espa?a

El nuevo secretario del Tesoro de Estados Unidos, Paul O'Neill, debe guardar un grato recuerdo de Espa?a. Porque en Espa?a hizo la mejor operaci¨®n de su vida cuando en 1997, en su anterior cargo de presidente de Alcoa, compr¨® la empresa de aluminios Inespal por s¨®lo 410 millones de d¨®lares (61.500 millones de pesetas). Los activos val¨ªan 4.000 millones de d¨®lares, as¨ª que O'Neill vino a pagar 10 centavos por cada d¨®lar. "Fue la mejor operaci¨®n que he visto en 20 a?os en el sector del aluminio", dice Wayne Atwell, analista de Morgan Stanley Dean Witter, que asesor¨® en la operaci¨®n al ministro de Econom¨ªa, Rodrigo Rato. Cuando se encuentren, en la pr¨®xima reuni¨®n del Fondo Monetario Internacional o en cualquier otro foro, Rato y O'Neill podr¨¢n hablar de aquella ocasi¨®n, hace tres a?os, en que ambos jugaron una especie de partida de p¨®ker financiero de la que sali¨® vencedor, con Inespal en la cartera, el empresario estadounidense. O'Neill realiz¨® una espl¨¦ndida jugada. Por un lado, sab¨ªa que el Gobierno espa?ol, en el que el Partido Popular acababa de estrenarse, ten¨ªa prisa por privatizar Inespal. Por otro, conoc¨ªa bien las dem¨¢s multinacionales que pod¨ªan pujar por la compa?¨ªa espa?ola, y calcul¨® que ninguna de ellas estaba en condiciones de realizar la compra. Alcam hab¨ªa sido propietaria de la mayor¨ªa de los activos de Inespal y se hab¨ªa desprendido de ellos, por lo que pod¨ªa suponerse que no querr¨ªa recuperarlos; Pechiney estaba inmersa en su propio proceso de privatizaci¨®n y no le conven¨ªa hacer nuevas inversiones; Reynolds se concentraba en los aluminios dom¨¦sticos y en aquel momento no deseaba hacer compras fuera de Estados Unidos; y las dem¨¢s empresas eran demasiado peque?as para gestionar Inespal, explica otro de los analistas que participaron en la privatizaci¨®n. El presidente de Alcoa hizo una oferta muy baja, dice el analista Wayne Atwell, contando con que no habr¨ªa ninguna otra. Supo esperar a que el Gobierno espa?ol rebajara sus pretensiones. Y acert¨®. Fue un gran negocio. El Gobierno espa?ol puede lamentar no haber ingresado m¨¢s dinero, pero en todos los dem¨¢s sentidos hizo una buena operaci¨®n porque Alcoa dispon¨ªa de un equipo de ejecutivos excelente, se comprometi¨® a no despedir trabajadores y los resultados de su gesti¨®n han sido, por ahora, muy satisfactorios para la empresa espa?ola, a?aden fuentes de Morgan Stanley Dean Witter.La opini¨®n en Espa?a es bien distinta. La venta de Inespal, un complejo de fabricaci¨®n de aluminio de dimensi¨®n desproporcionada, seg¨²n los expertos, y que perdi¨® entre 1990 y 1996 un total de 67.000 millones de pesetas, fue intentada por el Gobierno del PSOE en 1990, sin ¨¦xito. Tras una ampliaci¨®n de capital suscrita por el Estado en 1994, el ¨²ltimo Gobierno del PSOE retom¨® las conversaciones para su venta en el a?o 1995.

En junio de 1997 se logra un acuerdo de venta y en febrero de 1998 se cristaliza la operaci¨®n con el desembolso de 61.500 millones de pesetas por parte de Alcoa, primer fabricante mundial del aluminio. Seg¨²n la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) que controlaba el capital de la empresa ahora es muy f¨¢cil decir que no fue una buena venta, pero su versi¨®n es otra.

Fuentes de la SEPI se?alan que la mejor oferta con diferencia era la presentada por Alcoa, ya que las otras que se presentaron ped¨ªan, adem¨¢s, dinero por hacerse cargo de Inespal. "Lo importante de la oferta de Alcoa era que despejaba el futuro de la compa?¨ªa espa?ola, ya que se compromet¨ªa a realizar un plan industrial con unas inversiones de 64.950 millones de pesetas en un periodo de diez a?os. Esta cifra de inversi¨®n era un 75% superior que la media de las inversiones de Inespal en los a?os 1995, 1996 y 1997. La SEPI resalta que Alcoa se compromet¨ªa a mantener el total de la plantilla compuesta por 4.500 personas y a convertir a Inespal en su centro neur¨¢lgico de Europa. Adem¨¢s, la compa?¨ªa estadounidense se comprometi¨® a invertir otros 25.800 millones de pesetas en mejoras mediambientales.

En una l¨ªnea parecida se ha pronunciado la Federaci¨®n Minero Metal¨²rgica de CC OO. Para este sindicato, no hab¨ªa ofertas mejores, ya que la de Alcoa aportaba nuevas inversiones, daba viabilidad al grupo de aluminio espa?ol y manten¨ªa el empleo. CC OO reconoce que quiz¨¢ el precio no fue muy alto pero ello solamente es un componente del acuerdo. Lo cierto es que Inespal, de perder una media de 11.000 millones de pesetas al a?o en los ¨²ltimos ejercicios bajo control espa?ol, pas¨® a ganar 16.000 millones en el a?o 1999. Ello ha sido posible porque se ha integrado en un grupo de dimensi¨®n mucho mayor que le ha permitido una gesti¨®n m¨¢s racional y una disminuci¨®n de costes.