Rusia admite 55 a?os despu¨¦s el asesinato de Wallenberg por el KGB

Han tenido que pasar 55 a?os para que se haga justicia en Rusia, aunque sea p¨®stuma, al diplom¨¢tico sueco Raoul Wallenberg, que salv¨® a miles de jud¨ªos de los campos de la muerte nazis y que, capturado por las tropas sovi¨¦ticas en Budapest al final de la II Guerra Mundial, termin¨® probablemente con un tiro en la nuca en una celda de la Lubianka, el cuartel general moscovita de la polic¨ªa pol¨ªtica, por entonces, NKVD, y m¨¢s tarde, KGB.

Ayer, la fiscal¨ªa general reconoci¨® oficialmente que Wallenberg fue detenido de forma arbitraria por "¨®rganos no judiciales", pese a su inmunidad diplom¨¢tica, y que fue encarcelado m¨¢s de dos a?os y medio, "hasta su muerte en una prisi¨®n sovi¨¦tica". La rehabilitaci¨®n se extiende tambi¨¦n a Vilmos Langfelder, el ch¨®fer que conduc¨ªa el coche de Wallenberg cuando ambos fueron detenidos en enero de 1945 por soldados sovi¨¦ticos, que los entregaron a las fuerzas de seguridad. Seg¨²n el fiscal general, Vlad¨ªmir Ustinov, una minuciosa investigaci¨®n ha determinado que los dos miembros de la legaci¨®n sueca en Budapest fueron capturados como si fuesen soldados enemigos, pese a que Wallenberg, ciudadano de un pa¨ªs neutral, gozaba de inmunidad diplom¨¢tica. Luego, sin que se presentase acusaci¨®n alguna, siguieron presos y fueron tratados como "socialmente peligrosos".

La fiscal¨ªa ha establecido que se les debe aplicar plenamente la ley sobre Rehabilitaci¨®n de las V¨ªctimas de la Represi¨®n Pol¨ªtica, promulgada el 18 de octubre de 1991, poco despu¨¦s del fracasado golpe comunista y mientras la URSS saltaba en pedazos.

Los investigadores escarbaron a fondo en los archivos del KGB en busca de m¨¢s detalles, pero, seg¨²n la fiscal¨ªa, no lograron determinar las causas exactas de la detenci¨®n y las circunstancias del cautiverio y muerte de Wallenberg y Langfelder.

El 26 de noviembre, sin embargo, Alexandr Y¨¢kovlev, que fuera padre de la glasnost (transparencia informativa) en tiempos de Mija¨ªl Gorbachov y que preside la comisi¨®n rehabilitadora, asegur¨® que Wallenberg (miembro de la m¨¢s conocida familia de industriales de Suecia) fue ejecutado en la Lubianka, "sin ning¨²n g¨¦nero de dudas".

?Punto final?

Est¨¢ todav¨ªa por ver si esta rehabilitaci¨®n tard¨ªa, el informe de la fiscal¨ªa y la declaraci¨®n de Y¨¢kovlev bastan para poner punto final a la historia, que ha dado origen a pel¨ªculas, libros, exposiciones, tesis doctorales y miles de art¨ªculos a lo largo de 55 a?os. En 1957, los sovi¨¦ticos dijeron que ten¨ªan una nota de un m¨¦dico que indicaba que Wallenberg (conocido a veces como el Schindler sueco por haber salvado a miles de jud¨ªos) hab¨ªa muerto en 1947 de un ataque al coraz¨®n, en la sede del NKVD.

Pero tambi¨¦n hubo testimonios que le situaban despu¨¦s de esa fecha en diversos campos de concentraci¨®n estalinistas, en pleno Archipi¨¦lago Gulag. Y entre las causas de su muerte, se especul¨® con el envenenamiento, la tortura y el tiro en la nunca, la versi¨®n que Y¨¢kovlev da ahora por indiscutible.

"No hay ninguna prueba definitiva de lo que ocurri¨®", asegura, sin embargo, Jan Lundvik, miembro del comit¨¦ sueco-ruso que se ocupa del asunto. ?l espera cuando menos la respuesta a la siguiente pregunta: "?Por qu¨¦ no se present¨® nunca un certificado oficial de defunci¨®n?". Aunque fuese falso. Total, que el caso Wallenberg a¨²n no est¨¢ cerrado del todo.