La sencilla historia de una chica guapa que lleg¨® del fr¨ªo
La amistad del pr¨ªncipe Felipe de Borb¨®n con la modelo noruega Eva Sannum tiene ya tres a?os y se ha intensificado ¨²ltimamente
ENIVIADO ESPECIALEl pasado lunes, Eva Sannum, la joven noruega de 25 a?os a la que se atribuye una relaci¨®n sentimental no confirmada oficialmente con el pr¨ªncipe Felipe de Borb¨®n, respiraba tranquila; nadie la esperaba a la salida de la escuela Westerdal, en el viejo centro de Oslo, donde estudia publicidad. Hab¨ªa vuelto la calma. La semana anterior hab¨ªa sido objeto del acoso implacable de los paparazzi espa?oles. Su actitud hab¨ªa ido desanimando a sus perseguidores. Muchas sonrisas y ni una sola palabra. El jueves tan s¨®lo quedaban de guardia un par de paparazzi, a la espera de la otra mitad de esta historia; el pr¨ªncipe Felipe de Borb¨®n, heredero de la Corona espa?ola, que mantiene una relaci¨®n con esta modelo noruega desde hace ya m¨¢s de tres a?os que, aparentemente, se ha intensificado en los ¨²ltimos meses.
Se conocieron en Madrid a principios del oto?o de 1997. Aquel verano el pr¨ªncipe hab¨ªa estado en Oslo para sumarse a la fiesta de cumplea?os del rey Harald de Noruega. Haakon, el pr¨ªncipe heredero, invit¨® a Felipe de Borb¨®n y a su primo Nicol¨¢s de Grecia a una reuni¨®n privada en casa de Katherine Knudsen, una modelo con la que Haakon manten¨ªa una relaci¨®n sentimental. Dos meses m¨¢s tarde Katherine viaj¨® a Madrid por cuestiones de trabajo, las mismas hab¨ªan llevado a su amiga y colega Eva Sannum a la capital de Espa?a, y Haakon fue a visitarla. El pr¨ªncipe noruego organiz¨® una cena con su amigo Felipe de Borb¨®n y pidi¨® a Caterina que invitara a su amiga Eva. Una cena a cuatro.
Durante 1998 la pareja se vio en pocas ocasiones. Amigos de Eva tienden a pensar que la relaci¨®n estaba congelada, pero hay un dato revelador: ya en el oto?o de 1997, cuando I?aki Urdangar¨ªn viaja a Noruega para jugar un partido de balonmano con su equipo, el FC Barcelona, Eva recibe una llamada del cu?ado del pr¨ªncipe para que le sirva de gu¨ªa en Oslo.
En 1999 la pareja parece intensificar sus encuentros. Amigos de Eva apuntan a que se ve¨ªan cada dos meses. En verano tiene lugar el viaje a la India que reflejan las fotograf¨ªas recientemente publicadas por la revista ?Hola! En octubre el pr¨ªncipe Felipe viaja a Oslo, se aloja en el hotel Confort, un establecimiento barato del centro de la ciudad, y alquila un coche. La prensa local descubre a la pareja. Felipe, Eva y su amiga Caterina, que para entonces ya ha roto su relaci¨®n con el heredero noruego, pasan el d¨ªa en la cercana estaci¨®n de esqu¨ª de Frognersetren. Por la noche acuden a una fiesta organizada por Haakon.
Este a?o se han seguido viendo con la misma o m¨¢s asiduidad, seg¨²n aseguran personas cercanas al c¨ªrculo de amistades de Eva en Oslo, un grupo muy leal a la joven que intenta protegerla de la persecuci¨®n de los medios de comunicaci¨®n. Pese a ello, se sabe que este verano pasaron juntos una larga temporada. El pasado noviembre, ambos fueron descubiertos en un cine de Oslo. Los fot¨®grafos erraron el tiro porque la pareja sali¨® por otra puerta.
Hace dos semanas, aprovechando el viaje oficial del heredero de la Corona espa?ola a M¨¦xico para asistir a la toma de posesi¨®n del presidente Vicente Fox, Eva se reuni¨® con ¨¦l en una isla del Caribe. Sus amigos dan por hecho que la pareja har¨¢ lo imposible para encontrarse ahora, durante la Navidad.
Eva Sannum naci¨® en 1975 en L?venstad, una peque?a poblaci¨®n al norte de Oslo, en una familia de clase obrera. Cuando ten¨ªa 10 a?os sus padres se divorciaron. Eva y su hermana Linda, dos a?os mayor, se quedaron con su padre, Bj?rn Sannum, que reconstruy¨® su familia junto con Grete Berg Gerhardsen, que aport¨® a su hija Hilda, un a?o mayor que Linda, que pas¨® a ser otra hermana m¨¢s. Su madre se volvi¨® a casar y vive en Grecia. Eva la visita con cierta asiduidad.
Tras el divorcio, los Sannum se instalaron en el barrio de Stovner, a unos 10 minutos de Oslo, en el extremo este de la capital noruega, dividida por el r¨ªo Aker, al oeste del cual se asienta la parte rica y burguesa. El este es obrero; el viento tiende a soplar de poniente y la industria ocup¨® las orillas del Aker. Los humos y el holl¨ªn determinaron las zonas buenas y malas de la ciudad. Stovner es un lugar desangelado, el cl¨¢sico barrio dormitorio de grandes bloques acristalados construido durante los a?os setenta. Los Sannun viv¨ªan en una casa pareada, de las que llaman terrazas, por colgar de la colina dominando el valle.
Bj?rn Sannum tiene ahora 53 a?os y las cosas le han ido bien. Es propietario de un taller de pintura y accesorios para el autom¨®vil. Hace un a?o vendi¨® la casa de Stovner y se traslad¨® a Mortensrud, a unos 30 kil¨®metros del centro de Oslo. Tiene ingresos por encima de la media noruega. El a?o pasado declar¨® a Hacienda 671.400 coronas, m¨¢s de 13 millones de pesetas. Su hija Linda, que trabaja en una agencia de viajes, declar¨® 184.000.
Eva tan s¨®lo 43.000 coronas. Y es que ahora ya no trabaja m¨¢s que muy de vez en cuando porque ha retomado sus estudios. Ha sido siempre una chica muy lista que sacaba muy buenas notas en la escuela p¨²blica de Stovner, al lado de su casa. Para lo que es la tradici¨®n meritocr¨¢tica noruega y luterana, Eva no ingres¨® en una de las escuelas especiales del centro de Oslo para los ni?os de clase obrera que destacan en los estudios, sino que sigui¨® en su barrio.
A los 15 a?os la vida de Eva dio un giro importante. Fue descubierta en la calle por una de las agencias de modelos m¨¢s famosa de Noruega, la de Eivor Obrevoe, que ostenta el titulo de model mama, seg¨²n la tradici¨®n escandinava, donde este oficio tiene gran predicamento. Hizo algunos trabajos, pero hasta que no cumpli¨® los 18 no sali¨® a trabajar fuera de su pa¨ªs. Entre 1994 y 1998 recorri¨® el mundo; desde Hamburgo a Mil¨¢n pasando por Ciudad del Cabo, Miami o Londres. En parte gracias a ello, y tambi¨¦n a su facilidad para los idiomas, adem¨¢s de noruego, habla ingl¨¦s, espa?ol y alem¨¢n; y se maneja en franc¨¦s, griego e italiano. No se puede decir que alcanzara la categor¨ªa de top model, pero s¨ª que se convirti¨® en una buena profesional.
Algunos de sus primeros trabajos, concretamente los que realiz¨® en Hamburgo, fueron para cat¨¢logos de ropa interior femenina. Pero en ning¨²n caso existen fotos de Eva posando desnuda. Tan s¨®lo las fotograf¨ªas de la mallorquina playa de Calvi¨¤ publicadas por la revista Intervi¨², unas im¨¢genes tomadas desde lejos durante el verano de 1998 en las que la joven noruega toma el sol y se ha desprendido de la parte superior del biquini. En los ¨²ltimos a?os Eva ha abandonado pr¨¢cticamente su trabajo como modelo. Tan s¨®lo sube a la pasarela en ocasiones especiales, como recientemente para presentar una colecci¨®n de dise?adores finlandeses en la embajada de este pa¨ªs en Oslo. Si en Espa?a, el perfil de esta joven a¨²n levanta sospechas, en Noruega no s¨®lo es impecable sino atractivo. Para la opini¨®n p¨²blica, Eva Sannum es lo m¨¢s parecido a una moderna cenicienta, la chica de clase obrera que seduce al pr¨ªncipe encantador.
La casa real de este pa¨ªs escandinavo no tiene ni siquiera un siglo -fue instaurada en 1905 tras la separaci¨®n de Suecia- y simboliza la identidad nacional m¨¢s que en ning¨²n otro lugar. Para los noruegos los problemas sentimentales de sus monarcas no son nada nuevo. En 1961, el entonces rey Olaf V ofreci¨® su renuncia al primer ministro para que su hijo, el actual rey Harald V, pudiera casarse con una plebeya, la actual reina de los noruegos, Sonja. Renuncia que no le fue aceptada. Haakon, su nieto, se casar¨¢ el pr¨®ximo verano con Mette-Marit Tjessem-H?iby, una madre soltera, con un pasado algo turbulento, aunque menos de lo que algunos han querido hacer creer. Su relaci¨®n levant¨® ampollas en una parte de la sociedad noruega. Haakon no renunci¨® a ella. Hace unas semanas anunciaron formalmente su compromiso y la boda se celebrar¨¢ el 25 de agosto pr¨®ximo. Su madre, la reina, no estaba muy satisfecha, pero tras el anuncio del compromiso y la aparici¨®n ante las c¨¢maras de una Mette-Marit regiamente vestida, modosa y sencilla, la opini¨®n p¨²blica parece haberse puesto de su lado. Mette-Marit ya acude a los actos oficiales. Se estren¨® en la ceremonia de la entrega del Premio Nobel de la Paz al presidente coreano Kin Dae Jung.
El escritor y acad¨¦mico Carl-Erik Grimstad, hasta hace poco secretario de la familia real noruega, piensa que existe un paralelismo entre los pr¨ªncipes espa?ol y noruego: apunta a que son dos monarqu¨ªas cuya incidencia pol¨ªtica las diferencia de las dem¨¢s. Y Grimstad es totalmente partidario de que los reyes se casen por amor. La experiencia de la familia real brit¨¢nica y la situaci¨®n embarazosa en que puso a la instituci¨®n mon¨¢rquica, as¨ª lo muestra. "Hoy d¨ªa es impensable un matrimonio que no sea por amor. Si no lo es abre la puerta a aventuras extramatrimoniales que se conocer¨ªan inmediatamente por cierto tipo de prensa y entonces s¨ª que es cuando se producen los esc¨¢ndalos". Por esta raz¨®n, piensa Grimstad, tarde o temprano las monarqu¨ªas europeas acabar¨¢n teniendo que aceptar, por ejemplo, a un rey homosexual.
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