Dolarizados sin discusi¨®n

(...) Hace tres meses que el presidente Flores reuni¨® a tres de sus m¨¢s cercanos colaboradores (del 'equipo econ¨®mico') para contarles el cuento y preparar la aplicaci¨®n de la dolarizaci¨®n. El sigilo era imprescindible, se aclara, para evitar que los partidos de oposici¨®n 'y los banqueros' montaran una resistencia contra el proyecto y lo echaran abajo. Estando el Gobierno en plena y exclusiva posesi¨®n de la verdad, se volvi¨® necesario impedir que otros opinaran, debatieran, contradijeran y, en cualquier forma, estorbaran la puesta en marcha de una medida, cuya profunda sabidur¨ªa s¨®lo unos pocos pod¨ªan captar y entender. (...) ?Qui¨¦nes convencieron al presidente Flores? (...) Se dice que el secretario del Tesoro norteamericano, Lawrence Summers, se regocij¨® de que El Salvador no fuera una rep¨²blica bananera. (...) Sin embargo, nos hemos portado, en este asunto, como una rep¨²blica bananera, donde las leyes se decretan a rajatabla, sin que la opini¨®n de la gente se tome en cuenta. (...) Para poder untar a la econom¨ªa la pomada milagrosa, era ineludible pasar por encima de todo. Mother knows best.

M¨¢s aflictivo a¨²n es que adem¨¢s de bananeros somos conejillos de indias, pues lo de la dolarizaci¨®n no se ha aplicado en ning¨²n pa¨ªs con m¨¢s de cien mil habitantes, a menos que se trate de un remedio desesperado contra el colapso total de una moneda, como en el Ecuador. Panam¨¢ es un caso muy aparte, ya que el pa¨ªs naci¨® para que Estados Unidos pudiera construir su canal. (...)

San Salvador, 4 de enero