Dos ciudades en el vecindario
Un riachuelo divide el barrio de La Pe?a entre los municipios de Arrigorriaga y Bilbao
El riachuelo Illumbe divide el barrio de La Pe?a: a un lado habitan 7.000 vecinos, en la barriada de Zam¨¢cola, y al otro, 3.500, en Ollargan, Abusu y Santa Isabel. Lo peculiar es que los primeros est¨¢n empadronados en Bilbao, mientras que sus convecinos dependen del Ayuntamiento de Arrigorriaga, que est¨¢ a siete kil¨®metros. Ambos consistorios comparten la gesti¨®n del Hogar de Jubilados Zamape?a (con 310 socios de ambas localidades) gracias al acuerdo de colaboraci¨®n que firmaron hace un a?o.
El protocolo sent¨® las bases para que las instituciones locales desarrollaran proyectos en com¨²n en La Pe?a, como la construcci¨®n de unas instalaciones deportivas y un centro de d¨ªa que pretenden levantar para todo el barrio. Y es que para los vecinos de La Pe?a la frontera entre Arrigorriaga y Bilbao apenas es perceptible.
Bego?a Allende vive en Arrigorriaga desde que naci¨® hace 37 a?os, pero sus dos hijos de 11 y 5 a?os estudian en el bilba¨ªno colegio p¨²blico Juan Delmas, el m¨¢s pr¨®ximo a su piso de Ollargan. En el dorso de su tarjeta de Osakidetza figura un m¨¦dico del centro de salud de Zam¨¢cola y en su correspondencia pone el c¨®digo postal de la capital vizca¨ªna porque 'de lo contrario las cartas ir¨ªan primero a Basauri, luego al centro de Arrigorriaga, regresar¨ªan a Bilbao y entonces tardar¨ªan una semana m¨¢s en llegar'. Pero residir entre dos aguas tambi¨¦n tiene sus ventajas. 'Lo mejor de vivir en Arrigorriaga, es que al menos el impuesto de circulaci¨®n nos sale algo m¨¢s barato que a los de Bilbao', confiesa.
Como contraprestaci¨®n, los vecinos de Bilbao sienten con fuerza la pertenencia a la capital vizca¨ªna, mientras que para muchos de los empadronados en Arrigorriaga los siete kil¨®metros que les separan de su casco urbano diluyen su apego a ese pueblo.
La presidenta de la Asociaci¨®n de Vecinos de Ollargan, Mar¨ªa ?ngeles Teomiro, s¨®lo visita el centro de Arrigorriaga cuando debe hacer alguna gesti¨®n en el Ayuntamiento. 'Los vecinos de all¨ª no tienen conciencia de que nosotros somos tambi¨¦n de Arrigorriaga. Estamos un poco olvidadillos', se duele.
'Yo vivo en Bilbao, porque mi calle es una calle de Bilbao', sentencia Jos¨¦ Ortiz, de La Pe?a-Bilbao. Este anciano de 81 a?os juega a las cartas en el Hogar de Santa Isabel con los jubilados de Arrigorriaga y, cuando se re¨²ne con los amigos para tomar un vino por el barrio, no conoce fronteras. A Santa Isabel le une adem¨¢s la residencia de sus dos hijas que, al independizarse, decidieron mudarse a unos metros del domicilio paterno. Pero tambi¨¦n esta zona tiene sus inconvenientes. 'Si coges un taxi en Bilbao y le dices que vas a La Pe?a te cobra m¨¢s, aunque te deje en tu casa. Hay que decirle que te lleve a Zam¨¢cola', dice Carmen Lozano, residente en Zam¨¢cola desde hace 40 a?os.
Los ciudadanos de La Pe?a comparten tambi¨¦n la parroquia del Buen Pastor que, ubicada en Zam¨¢cola, es el principal centro de culto de Santa Isabel y Olatxu (Ollargan pertenece a la Iglesia de Santa Mar¨ªa de la Asunci¨®n). La ¨²nica diferencia que entre los vecinos de ambas m¨¢rgenes del r¨ªo Illumbe aprecia su p¨¢rroco, Jaime Alejandro, estriba en que los habitantes de Ollargan viven el cristianismo con menos pasi¨®n. 'Es gente m¨¢s joven, m¨¢s nueva en el barrio y participa menos en las misas. Pero, por lo dem¨¢s, vienen y se mezclan. Aqu¨ª hacen las compras, bautizan a sus hijos, los ni?os van a la catequesis...', expone.
Mientras que Mar¨ªa As¨ªs Fern¨¢ndez, delegada de Relaciones Ciudadanas de Bilbao (PNV), se muestra convencida del marcado bilbainismo de los residentes en Zam¨¢cola, el alcalde de Arrigorriaga, Alberto Ruiz de Azua, de su mismo partido, reconoce que sus vecinos pueden sentirse un tanto aparte. 'Se sienten un poco abandonados. Quiz¨¢ por la lejan¨ªa con el centro, piensan que Arrigorriaga invierte mucho m¨¢s en el n¨²cleo urbano que all¨ª. Pero no est¨¢n m¨¢s marginados que otros barrios perif¨¦ricos, como Kubo o Lanbarketa. Adem¨¢s, en los ¨²ltimos diez a?os hemos invertido muchos millones en La Pe?a, hemos quitado toda su industria y la hemos tra¨ªdo a un pol¨ªgono cercano', explica Ruiz de Azua.
Tanto Mar¨ªa As¨ªs -quien curiosamente habita en La Pe?a-Bilbao-, como Ruiz de Azua, aseguran que las relaciones entre ambos ayuntamientos son 'muy buenas' tras el protocolo de colaboraci¨®n rubricado hace un a?o.
Disputa sobre una calle
Hasta que decidieron colaborar, los intereses de ambos municipios chocaban a veces en este barrio. Los ejemplos son varios. Antes de que se construyera la rotonda de Zam¨¢cola, incluida en el Plan de Ordenaci¨®n Urbana de Bilbao, el plan de Arrigorriaga reservaba este suelo para la creaci¨®n de viviendas. A¨²n hoy quedan algunos resquicios de aquella falta de coordinaci¨®n, como el desconocimiento sobre la propiedad de un tramo de una olvidada acera que limita Ollargan, cuya reforma ha sido varias veces reivindicada por la Asociaci¨®n de Vecinos de esta barriada. 'El Ayuntamiento de Arrigorriaga dice que es de Bilbao. El de Bilbao dice que es de Diputaci¨®n, pero hemos ido a Diputaci¨®n y nos han dicho que no hay ning¨²n plano que certifique que es de su competencia', critica la presidenta de la agrupaci¨®n vecinal.
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