El a?o de Graci¨¢n recuerda al escritor que abri¨® el siglo del humanismo europeo

La comisaria del a?o graciano, la catedr¨¢tica de Literatura de la Universidad de Zaragoza, directora de la c¨¢tedra que lleva el nombre del pensador en la instituci¨®n Fernando el Cat¨®lico, Aurora Egido, opina que El critic¨®n 'cierra y culmina el Siglo de Oro espa?ol y abre el del humanismo europeo, porque habla de un hombre esc¨¦ptico y desenga?ado que describe c¨®mo enfrentarse a la vida tal y como es'. Egido concluye que el d¨ªa de ayer es el principio de un largo tiempo de trabajo que culminar¨¢ con reediciones y ediciones de nuevos estudios, 'porque se trata de divulgar, no entre los estudiosos, la obra de un aragon¨¦s reconocido internacionalmente'. Graci¨¢n fue traducido al lat¨ªn en el siglo XVIII; est¨¢ traducido al franc¨¦s, ingl¨¦s, italiano, checo y rumano, y sus textos en espa?ol fueron distribuidos en Portugal en el siglo XVII.

En realidad fue el 8 de enero de 1601 cuando, seg¨²n el documento que se guarda en la iglesia parroquial de Belmonte, el jesuita fue bautizado. Baltasar Graci¨¢n, autor de El h¨¦roe, El pol¨ªtico y de los m¨¢s conocidos Or¨¢culo manual y arte de la prudencia o Agudeza y arte de ingenio, recibi¨® el reconocimiento de un pueblo que vio doblado su censo ante la presencia de vecinos de localidades cercanas y autoridades literarias y pol¨ªticas. El a?o graciano comenz¨® en la iglesia y sigui¨® con un vino en el pabell¨®n de la localidad. Aurora Egido no ocultaba su emoci¨®n ante las muestras de alegr¨ªa de tantos vecinos en torno a la figura de un autor, para muchos tan importante como Cervantes, tan citado como ¨¦l, pero tan escasamente le¨ªdo. A Belmonte llegaron Miguel Batllori, decano de la Academia de la Historia; catedr¨¢ticos como Manuel Fern¨¢ndez Montesinos, sobrino de Lorca, que prepara con la doctora Egido una obra que publicar¨¢ la Fundaci¨®n Garc¨ªa Lorca; el presidente de la comunidad aragonesa, Marcelino Iglesias; el de la Diputaci¨®n Provincial, Javier Lamb¨¢n, y el consejero de Cultura, Javier Callizo.

Ahora, el centenario, como explicaba la comisaria, tratar¨¢ de profundizar en la divulgaci¨®n de la obra de un autor del que la mayor¨ªa conoce sus refranes o dichos. Un autor esencial para pensadores como Schopenhauer, Nietzsche, Hobbes o Sartre, y autor de moda entre los brokers neoyorquinos que manejan y citan sus aforismos.

El alcalde de Belmonte, Jos¨¦ Catal¨¢n, logr¨® en los a?os ochenta cambiar el nombre de Belmonte de Calatayud por el de Graci¨¢n y sue?a con comprar la casa natal del pensador, por la que su due?o pide 50 millones de pesetas.

Egido se?ala que el acto cumbre de las celebraciones ser¨¢ la mesa redonda que se celebrar¨¢ en Nueva York en julio de este a?o, en los actos organizados por la Asociaci¨®n Internacional de Hispanistas, y a la que se espera acudan m¨¢s de medio millar de estudiosos.

En Zaragoza comenz¨® ayer un ciclo de tres d¨ªas sobre su obra y en mayo y noviembre se celebrar¨¢n dos congresos internacionales en Huesca y Zaragoza: Graci¨¢n, pensamiento y erudici¨®n y Baltasar Graci¨¢n en sus obras. A estos dos congresos hay que sumar otra cumbre que se celebrar¨¢ en octubre en la UNED de Calatayud, los actos de la Universidad Libre de Berl¨ªn y las jornadas gracianas de Viena y N¨¢poles. Una exposici¨®n bibliogr¨¢fica reunir¨¢ la obra de Graci¨¢n en Zaragoza entre noviembre y diciembre.

A¨²n con tantos actos, Aurora Egido pone el acento en la necesidad de reiniciar la publicaci¨®n de sus obras con rigor cr¨ªtico.