Pinochet vuelve a Santiago para someterse a los an¨¢lisis previos a su interrogatorio

La nueva estrategia de la defensa de Pinochet de aceptar las diligencias ordenadas por el magistrado y poner fin a su desacato judicial -concretada en la noche del lunes, en v¨ªsperas de que hoy se le tomara declaraci¨®n indagatoria seg¨²n el calendario inicial-, motiv¨® a Guzm¨¢n a modificar las fechas de los ex¨¢menes y el interrogatorio al ex dictador, aplacando la tensi¨®n que rodeaba el caso. Los ex¨¢menes mental y neurol¨®gico se efectuar¨¢n en el Hospital Militar, que pertenece al Ej¨¦rcito, y en el Hospital Cl¨ªnico de la Universidad de Chile, mientras que las pruebas de laboratorio ser¨¢n analizadas en otros dos centros m¨¦dicos.

La estrategia de la rebeld¨ªa judicial impulsada por el jefe del equipo jur¨ªdico de Pinochet, Pablo Rodr¨ªguez -quien entre 1970 y 1973, durante el Gobierno del presidente Salvador Allende, encabez¨® el grupo terrorista de ultraderecha Patria y Libertad-, s¨®lo hab¨ªa logrado aislar a su cliente, hasta el punto de que ni el Ej¨¦rcito estaba en condiciones de apoyarlo en esa actitud. Una vez constatado el error, el entorno pinochetista hizo un giro radical y resolvi¨® cooperar con Guzm¨¢n. La se?al fue fijar su domicilio en la poblaci¨®n de Bucalemu, situada a unos 150 kil¨®metros de Santiago, para que el interrogatorio tenga lugar all¨ª.

El nuevo programa de diligencias permitir¨¢ a Guzm¨¢n tener algunos resultados de las pruebas m¨¦dicas, pero dif¨ªcilmente todos, antes de la declaraci¨®n indagatoria. Los querellantes reaccionaron ayer con satisfacci¨®n porque se realizar¨¢n por fin las diligencias, pero denunciaron que el ex dictador no es tratado como otros inculpados. Uno de los abogados acusadores, Eduardo Contreras, critic¨® ayer la 'excesiva generosidad' de la justicia con el general, que, a su juicio, 'atenta contra la igualdad ante la ley'.

Entretanto, la Corte Suprema chilena dej¨® pendiente para hoy su examen de la solicitud de recusaci¨®n de Guzm¨¢n presentada por la defensa del general. Aunque los abogados defensores dicen que Pinochet se presentar¨¢ a los ex¨¢menes y esperan que ¨¦stos comprueben que su salud no es suficientemente buena para enfrentar un proceso penal, todav¨ªa algunos de ellos insisten en que tampoco est¨¢ en condiciones de soportar un interrogatorio. Pero Guzm¨¢n sostuvo en declaraciones al diario Le Monde que la ley chilena es categ¨®rica y no toma en cuenta razones humanitarias. 'Para librarse de un proceso, el inculpado debe ser declarado loco o demente', afirm¨®. Guzm¨¢n tambi¨¦n declar¨® al rotativo franc¨¦s que ha sufrido 'muchas presiones' y 'amenazas', incluso de 'miembros del Gobierno', por su labor en el caso Pinochet.

El interrogatorio al ex dictador es un mero tr¨¢mite antes de su procesamiento como autor de 18 secuestros y 57 homicidios en el caso de la caravana de la muerte, pues el juez Guzm¨¢n ya proces¨® al ex dictador el pasado 1 de diciembre y su resoluci¨®n fue anulada por los tribunales superiores s¨®lo por la falta de ese requisito. 'Creo que se ha tomado una distancia prudente entre los ex¨¢menes y la declaraci¨®n indagatoria, y es posible que el resultado de las pruebas m¨¦dicas ya est¨¦ el lunes, o por lo menos haya ya una primera opini¨®n', coment¨® Jos¨¦ Mar¨ªa Eyzaguirre, uno de los ocho abogados que defienden al ex dictador.

Fosas con desaparecidos

Por otra parte, el pleno de magistrados de la Corte Suprema nombr¨® ayer a los jueces de tribunales de apelaciones Amanda Valdovinos y H¨¦ctor Carre?o para investigar, respectivamente, la veracidad de las denuncias contenidas en los informes entregados al Gobierno de una fosa en Colina, 25 kil¨®metros al norte de la capital, donde estar¨ªan sepultados ilegalmente los cuerpos de 20 detenidos desaparecidos, y de otra en la Cuesta Barriga, 65 kil¨®metros al oeste de Santiago, donde se encontrar¨ªan los restos de otras seis personas. Se trata de la primera acci¨®n del poder judicial para acelerar las investigaciones sobre los informes en los que las iglesias chilenas y los militares daban cuenta del paradero de v¨ªctimas de la dictadura.

La investigaci¨®n no ser¨¢ una tarea f¨¢cil para los jueces. Los datos concretos que aportan los militares son pocos, mientras los que lograron recopilar las iglesias son muy generales. Adem¨¢s, el secreto de la fuente que proporcion¨® la informaci¨®n est¨¢ protegido por ley. En la dictadura, en no pocos casos, restos de detenidos desaparecidos que estaban sepultados clandestinamente fueron retirados de esos lugares por unidades de las Fuerzas Armadas, para evitar el riesgo de que fueran ubicados.

Por su lado, el Senado pidi¨® ayer a los chilenos que 'tomen conciencia' y entreguen la informaci¨®n de que dispongan sobre el paradero de desaparecidos, para 'avanzar en la reconciliaci¨®n' nacional.