La prensa 'peina' los votos de Florida

Los 180.000 votos que no se escrutaron en las elecciones de Estados Unidos los est¨¢ contando ahora la prensa. Pero al igual que durante el tortuoso proceso electoral que ha llevado a George W. Bush a la Casa Blanca, los medios de comuncicaci¨®n no se han puesto de acuerdo sobre la metodolog¨ªa del recuento. The Miami Herald ha roto filas y ha decidido contar s¨®lo las 60.000 papeletas que no estaban claramete perforadas. Y por otro lado, los grandes peri¨®dicos nacionales se han unido para contabilizar tambi¨¦n las otras 120.000 perforadas por duplicado, entre las que se incluyen las controvertidas papeletas mariposa de Palm Beach.

'The Miami Herald es el mayor peri¨®dico de Florida y por eso creemos que nosotros somos los que debemos hacer esta historia; nosotros debemos dirigirla y no ser s¨®lo un peque?o participante en un consorcio de todas las grandes organizaciones medi¨¢ticas de EE UU en el que nuestro papel no destacar¨ªa', puntualiz¨® Matin Baron, el director de The Miami Herald, que hasta hace unos meses trabajaba en The New York Times.

El consorcio lo forman The New York Times, The Washington Post, The Wall Street Journal, la empresa Tribune (The Chicago Tribune y Los Angeles Times) la agencia Associated Press, The Palm Beach Post, Saint Petersburg Times y la CNN. A ¨²ltima hora, USA Today ha dicho que quiz¨¢ se vincule al proyecto de The Miami Herald.

La disputa medi¨¢tica ha sido fundamentalmente por la metodolog¨ªa y los costos, pero tambi¨¦n por el uso de mecanismos que aseguren la fiabilidad de un proceso que, de antemano, enfrenta numerosas cr¨ªticas y el posible desaf¨ªo legal del partido republicano. The Miami Herald ha contratado a una empresa internacional de auditor¨ªas, BDO Seidman, que s¨®lo ha asignado a un contador por condado, mientras que el consorcio utilizar¨¢ a tres contadores de National Opinion Research Center en cada uno de los 67 condados. 'Es la ¨²nica forma de evitar la subjetividad o lo errores que podr¨ªa haber si cuenta una sola persona', se?al¨® Alan Murray, jefe de la delegaci¨®n en Washington del Wall Street Journal. En la carrera por los recuentos, The Miami Herald lleva la delantera al consorcio, que todav¨ªa no se ha puesto manos a la obra porque acaba de llegar a un acuerdo de principios. Nadie sabe cu¨¢nto tardar¨¢ la revisi¨®n. Lo ¨²nico seguro es el alto precio de la cruzada, entre medio mill¨®n y un mill¨®n de d¨®lares (176 millones de pesetas). Cada condado cobra un precio: 580 d¨®lares la hora en Palm Beach a dividir entre todos los medios de prensa; 10 d¨®lares por hora m¨¢s 400 de dep¨®sito en Miami-Dade a cada uno de los medios, y 300 d¨®lares a dividir en Broward.

Esta semana, una de las reporteras de The Miami Herald y el contador de BDO Seidman se afanan en el piso 18 del Ayuntamiento del condado de Miami-Dade escudri?ando perforaciones a un ritmo de entre 650 a 900 papeletas por d¨ªa. A diferencia del bullicio que caracteriz¨® el drama post-electoral, esta vez se realiza en un silencio sepulcral, pero la ceremonia es la misma: el funcionario levanta la papeleta y se la muestra de cerca y ellos la examinan. La reportera y el contador registran luego los datos en una hoja con varias categor¨ªas: perforaci¨®n horizontal, perforaci¨®n circular, chad desprendido de una dos o tres esquinas, y sin ning¨²n tipo de perforaci¨®n.

Ning¨²n medio ha dicho que al final piense declarar a Al Gore o George Bush ganador, sino ofrecer las cifras resultantes por categor¨ªas y que cada cual saque sus conclusiones. Las intenciones, afirman, es sentar el r¨¦cord para la historia, despu¨¦s de que la sentencia de la mayor¨ªa conservadora del Tribunal Supremo abortara los recuentos y sirviera la presidencia en bandeja a Bush. Pero no har¨¢ falta declararlo expresamente. Los resultados hablar¨¢n por si s¨®los y, de ser Gore el favorecido, la legitimidad, ya dudosa, de la presidencia de Bush, sufrir¨ªa otro golpe. (Bush gan¨® por 197 votos en Florida y, a nivel nacional Gore le super¨® por m¨¢s de 350.000).

Los republicanos tienen los ca?ones enfilados ante los nuevos recuentos. Esta semana, el jefe del partido republicano en el sur del Florida, que supervisa las operaciones, relataba a EL PA?S su estrategia. 'Vamos a condenar cualquier intento de considerar esto como un recuento en vez de una revisi¨®n o inspecci¨®n. Nuestro equipo legal est¨¢ preparado para actuar en caso necesario', afirm¨® Luigi Crespo. El Partido Republicano est¨¢ realizando adem¨¢s su propio recuento por si tiene que acudir a los tribunales de nuevo.