Sampietro se niega a dimitir y dice que el PP ha intentado sobornarle

La rocambolesca historia pol¨ªtica de Ceuta va para largo. Al menos si se atiende a las primeras palabras del presidente de la ciudad aut¨®noma, Antonio Sampietro, del GIL, que ayer lanz¨® un mensaje claro desde la cama del hospital de Marbella en la que se recupera de la crisis sufrida tras la cadena de dimisiones de consejeros que ha sufrido: no piensa dimitir, volver¨¢ de su exilio marbell¨ª la pr¨®xima semana y buscar¨¢ la manera de volver a tener la mayor¨ªa absoluta que ha perdido. Adem¨¢s, dentro de la encarnizada batalla que mantiene con el delegado del Gobierno, Luis Vicente Moro, dijo que ¨¦ste le hab¨ªa intentado sobornar para que dimitiera a cambio de la retirada de las querellas que hay en marcha contra ¨¦l. La Delegaci¨®n del Gobierno lo desminti¨®. Mientras, la oposici¨®n, liderada por el PP y los cinco tr¨¢nsfugas del GIL, se afana en recuperar el poder. Ayer presentaron la solicitud para convocar juntas extraordinarias de las cuatro sociedades municipales m¨¢s importantes. Con el GIL en minor¨ªa, el control de estas empresas con presupuestos muy elevados pasar¨ªa a la oposici¨®n.

Pero no s¨®lo las noticias de la actividad pol¨ªtica en Ceuta son poco comunes. Tambi¨¦n su escenificaci¨®n. Sampietro, que no hablaba desde que el lunes fue ingresado tras saber que tambi¨¦n le abandonaba Aida Piedra, consejera de Turismo de su absoluta confianza, convoc¨® a los medios de una forma original: mediante un tel¨¦fono de la Asamblea de Ceuta, y con el sistema manos libres, se pod¨ªa grabar su voz. Hablaba desde la habitaci¨®n de un hospital de Marbella, la ciudad desde la que lleg¨® de la mano de Jes¨²s Gil para conquistar Ceuta.

All¨ª lanz¨® duros ataques contra todos: acus¨® al delegado del Gobierno de intentar sobornarle 'mientras estaba asistido y con 20 de tensi¨®n', llam¨® a Piedra 'traidora n¨²mero uno', coment¨® que hasta Manuel Fraga le hab¨ªa llamado para interesarse por su salud y dijo que no piensa dimitir. M¨¢s tarde, dijo a EL PA?S que resolver¨¢ la situaci¨®n: 'Soy mucho m¨¢s listo que todos ellos juntos, no paro de hablar por tel¨¦fono y encontrar¨¦ una salida'.

Pero la situaci¨®n a la que se enfrenta dista de ser f¨¢cil. El GIL obtuvo 12 de los 25 diputados en la Asamblea. Con el apoyo de la tr¨¢nsfuga Susana Berm¨²dez lleg¨® a 13, mayor¨ªa absoluta. El PP se qued¨® con ocho, los socialistas con uno y los musulmanes del PDSC con tres. Ahora, Sampietro ha perdido a seis de sus fieles. Pero no se rinde. La f¨®rmula que busca, aunque poco factible, es la de atraer al PDSC y a tres del PP, entre los que estar¨ªa el ex presidente Jes¨²s Fortes, ahora desplazado por la c¨²pula de su partido.

Pero Fortes parece obedecer la disciplina del PP, y ayer compareci¨® en una rueda de prensa en la que no habl¨® para disipar los temores de traici¨®n.

La situaci¨®n comienza a enrocarse. Y al PP le quedan dos opciones. La m¨¢s c¨®moda, esperar a que Sampietro caiga por su propio peso, en cuyo caso buscar¨ªa el apoyo de los tr¨¢nsfugas y del PSOE para formar Gobierno, como se ha pactado. La otra es m¨¢s r¨¢pida: la moci¨®n de censura, 10 d¨ªas desde que se presente. Pero tiene un coste a?adido: hay que contar con el PDSC, y eso complicar¨ªa a¨²n m¨¢s la formaci¨®n de una confusa mayor¨ªa en la que estar¨ªan populares, socialistas, musulmanes y tr¨¢nsfugas del GIL.