La Fiscal¨ªa de Par¨ªs pide que se anule el caso del tr¨¢fico de armas
El juez instructor cuestionado mantiene un silencio herm¨¦tico, mientras sus compa?eros ha cerrado filas en torno a ¨¦l frente a los ataques recibidos de la familia Mitterrand y de sus amigos. La defensa de Pierre Falcone, el vendedor de armas en torno al que gira todo este asunto, aleg¨® ante el tribunal que el sumario est¨¢ viciado porque no se ha respetado un decreto de 1939 seg¨²n el cual toda investigaci¨®n sobre tr¨¢fico de armas ha de partir de una denuncia de 'los ministros competentes de la Defensa Nacional, de la Guerra, de la Marina, del Aire o de las Finanzas', iniciativa que no consta se haya producido en esta ocasi¨®n.
Mientras se discute sobre la legalidad del procedimiento, el diario Le Monde inform¨® ayer de que Jean-Christophe Mitterrand fue quien facilit¨® el contacto con Falcone a un militante socialista al que el presidente de Angola, Eduardo dos Santos, hab¨ªa encargado una gesti¨®n para comprar armas en Francia. El militante no encontr¨® eco en la c¨¦lula africana del El¨ªseo, que Jean-Christophe Mitterrand hab¨ªa dejado ya, y ¨¦ste ¨²ltimo se encontr¨® con aquel, de manera aparentemente casual, y le facilit¨® el nombre y la forma de localizar a Falcone como la persona capaz de resolver su problema.
De ah¨ª surgieron dos contratos sucesivos de venta de armas a Angola, en 1993 y 1994, por valor de 633 millones de d¨®lares (unos 115.000 millones de pesetas). En esa ¨¦poca, el hijo del ex presidente acababa de dejar la c¨¦lula africana del El¨ªseo y trabajaba para una entidad suiza vinculada al grupo petrolero franc¨¦s Elf, en la que habr¨ªa sido colocado por recomendaci¨®n de su padre.
Jean-Christophe Mitterrand reconoce haber jugado 'un papel de consejero' entre Falcone y Angola, pero niega que fuese tr¨¢fico de armas. A?os despu¨¦s, entre 1997 y 1998, Falcone le pag¨® en Suiza 1,8 millones de d¨®lares (unos 300 millones de pesetas), cuya naturaleza aclarar¨¢ 'ante los jueces', dice el hijo de Mitterrand, que ayer insisti¨® en que 'el di¨¢logo ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil' con un instructor distinto del que 'le odia'.
En aplicaci¨®n del principio de que las libertades condicionales dependen ahora de jueces que no son los de instrucci¨®n, otro magistrado decidi¨® ayer poner en libertad, bajo fianza de medio mill¨®n de francos (unos 12,5 millones de pesetas), a otro de los encarcelados por el juez Couroye. El beneficiario de la libertad provisional es Bernard Poussier, ex director general de la sociedad de suministro de armames vinculada al Ministerio del Interior durante la ¨¦poca en la que esta ¨²ltima tuvo a Falcone pr¨¢cticamente como ¨²nico proveedor.
En todo caso, el juez Courroye empieza a parecerse a esos jueces espa?oles de grandes casos a los que odian una multiplicidad de personas. As¨ª, el diario L'Est Republicain aport¨® ayer el dato de que el borrador de un discurso del ex ministro del Interior, Charles Pasqua, ha sido encontrado en el domicilio de Falcone, registrado, naturalmente, por el mismo juez. Pasqua ha negado tener algo que ver con el tan mentado vendedor de armas. De momento, no ha hecho comentarios sobre el hallazgo.
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