Bouso?o venci¨® a Umbral por un voto en una de las rondas finales del Cervantes
Dos jurados forzaron una nueva votaci¨®n para dar el premio al columnista
Pasaban pocos minutos de las seis de la tarde del pasado 13 de diciembre, cuando el escritor Francisco Umbral recib¨ªa a los periodistas en su chal¨¦ pr¨®ximo a Madrid. Acababan de comunicarle que hab¨ªa conseguido el Cervantes 2000. El autor de Las palabras de la tribu quiso agradecer p¨²blicamente la ayuda de tres miembros del jurado: Cela, Hierro y Garc¨ªa Posada, 'que se lo han trabajado a muerte'. No se sabe si a muerte, pero lo cierto es que se lo trabajaron a fondo porque el hecho de que el poeta Carlos Bouso?o tuviera un voto m¨¢s que Umbral en una de las ¨²ltimas votaciones del jurado, no impidi¨® que el escritor y columnista de El Mundo se alzara con el premio.
Seg¨²n han confirmado varios miembros del jurado, en esa ronda Bouso?o sumaba cinco votos; Umbral, cuatro, y se hab¨ªa producido una abstenci¨®n. Bouso?o era ya el ganador, pero los defensores de la candidatura de Umbral -presentada sin ¨¦xito en numerosas convocatorias- no estaban dispuestos a irse de nuevo de vac¨ªo. Dos de los diez miembros del jurado, el escritor Camilo Jos¨¦ Cela y el cr¨ªtico literario Miguel Garc¨ªa Posada, lograron reconducir el resultado argumentando que no cab¨ªa la posibilidad de abstenerse. Los diez jurados se dieron diez minutos para reflexionar y aceptaron la imposici¨®n de Cela y Garc¨ªa Posada. Todav¨ªa fueron necesarias nuevas rondas de votos hasta que por fin lograron el premio para Umbral con seis votos frente a cuatro. Hab¨ªan transcurrido casi cuatro horas en las que los diez estudiaron 25 candidaturas.
El jurado del Premio Cervantes 2.000 estuvo presidido por V¨ªctor Garc¨ªa de la Concha, director de la Real Academia Espa?ola (RAE) e integrado por Jorge Edwards, Camilo Jos¨¦ Cela, Jos¨¦ Hierro, Salvador P¨¢niker, Alonso Zamora Vicente, Gregorio Salvador, Jaime Posada, Miguel Garc¨ªa Posada y Santiago de Mora Figueroa, marqu¨¦s de Tamar¨®n. A la reuni¨®n asisten con voz pero sin voto el director general del Libro, Fernando de Lanzas, y un t¨¦cnico jur¨ªdico del Ministerio de Cultura.
Seg¨²n manifestaciones realizadas por ellos mismos en diferentes momentos, es conocido que los defensores a ultranza de la candidatura del escritor y columnista de El Mundo fueron los escritores y anteriores premios Cervantes Camilo Jos¨¦ Cela y Jos¨¦ Hierro; el cr¨ªtico literario de El PA?S Miguel Garc¨ªa Posada; el director de la Academia colombiana, Jaime Posada, y Santiago de Mora-Figueroa, actual embajador en Londres y ex director del Cervantes. Varias fuentes coinciden en se?alar a este ¨²ltimo como el jurado que intent¨® ejercer su derecho a abstenerse, derecho que le fue negado.
De la Concha, presidente del jurado, asegura que la ins¨®lita prohibici¨®n de ejercer la abstenci¨®n a los miembros del jurado se acord¨® con el consenso de todos los miembros. 'Si surge un imprevisto', asegura De la Concha, 'el jurado es soberano para decidir. Por ejemplo, el cargo de presidente no es nato y lo primero que hicimos en la reuni¨®n fue escoger un presidente. Me votaron a m¨ª. Otra decisi¨®n que consensuamos fue la aplicaci¨®n del sistema Goncourt en las votaciones y que consiste en elegir a cinco en la primera ronda, cuatro en la segunda y as¨ª sucesivamente. Y un tercer punto acordado fue el secreto absoluto de todas deliberaciones'.
Lo que no quiere precisar el director de la Academia es si la prohibici¨®n de ejercer la abstenci¨®n se acord¨® al comienzo de la sesi¨®n o en el momento en el que Bouso?o se alzaba con el premio con cinco votos frente a cuatro. Pese a la parquedad del director de la RAE, todo apunta a que el acuerdo se tom¨® despu¨¦s de la novena votaci¨®n, ya que si todos los miembros lo hubieran acordado al principio, a ninguno se le hubiera ocurrido abstenerse repentinamente.
Las versiones recogidas entre algunos de los miembros del jurado sobre los argumentos que se utilizaron para reconducir el resultado, prohibiendo la abstenci¨®n, son bastante sorprendentes y dispares. Uno de ellos cuenta que se invalid¨® la votaci¨®n en la que ganaba Bouso?o porque la suma de cuatro votos m¨¢s una abstenci¨®n no constituyen mayor¨ªa en un jurado de diez personas. Otro jurado explica que el abstencionista, integrante del equipo de apoyo a Umbral, ofreci¨® renunciar a su voto para romper el empate de cinco a cinco que soportaron durante numerosas votaciones. Cuando el resto de los defensores de Umbral oyeron la oferta, se les pusieron los pelos de punta. Un jurado argument¨® que no se pod¨ªa abstener porque el voto era secreto y si no se ejerc¨ªa, todo el mundo sabr¨ªa quien hab¨ªa sido. El Nobel Camilo Jos¨¦ Cela hizo una nueva exhibici¨®n de su escasa paciencia y amenaz¨® a sus compa?eros con publicar un art¨ªculo titulado El pucherazo, si se permit¨ªa la abstenci¨®n que dejar¨ªa sin premio a su protegido.
Volvi¨® la calma y siguieron votando hasta pasadas las 18.00. El resultado, que seg¨²n las normas debe ser secreto, lo di¨® a conocer la ministra de Cultura, Pilar del Castillo, a las 18.15: Umbral ganaba a Bouso?o por seis votos frente a cuatro.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.