Cientos de inmigrantes se movilizan por la entrada en vigor ma?ana de la Ley de Extranjer¨ªa
Las movilizaciones iniciadas por los inmigrantes en Lorca el domingo 14 se han redoblado en las ¨²ltimas jornadas, a pocas horas de la entrada en vigor de la Ley de Extranjer¨ªa, que contempla como causa de expulsi¨®n la falta de permiso de trabajo y residencia. Entre 150 y 200 extranjeros y vecinos partieron a las nueve y media de la noche de ayer de Fuente ?lamo para recorrer 22 kil¨®metros por v¨ªas secundarias hasta Murcia en demanda de regularizaci¨®n de los extranjeros establecidos en Espa?a. En la comunidad murciana, alrededor de 200 personas mantienen cinco encierros en las localidades de Lorca, Fuente ?lamo, Molina de Segura, Totana y Los Alc¨¢zares. Este ¨²ltimo, que protagonizan 59 ecuatorianos, bolivianos y marroqu¨ªes en la iglesia de la Asunci¨®n, comenz¨® alrededor de las 21.30 del s¨¢bado y coincide con la suspensi¨®n del encierro de Lorqu¨ª.
Los inmigrantes critican que el Ejecutivo proponga su regreso a su pa¨ªs de origen para tramitar el visado al considerar que existen f¨®rmulas legales para regularizar la situaci¨®n de quienes se encuentran en Espa?a, como la exenci¨®n de visado y la concesi¨®n de permisos por circunstancias excepcionales o de arraigo, informan Tereixa Constenla y Mar¨ªa Jos¨¦ L¨®pez D¨ªaz.
Bajo una pancarta que reza 'Huelga de hambre hasta morir' colgada desde el s¨¢bado a las puertas de la iglesia de Santa Mar¨ªa del Pi en Barcelona, unos 350 inmigrantes se han ido sumando al encierro para protestar contra la reforma de Ley de Extranjer¨ªa que entra en vigor ma?ana. De ellos, 328 se encuentran en huelga de hambre indefinida y 20 se niegan incluso a ingerir l¨ªquido. Los huelguistas han manifestado que no piensan comer hasta que se abran conversaciones para regularizarles.
Los encerrados pasaron la primera noche, muy fr¨ªa, apelotonados sobre unos cuantos colchones en el suelo. Hubo personas que llevaron comida, a lo que ellos respondieron con un cartel pidiendo mantas. 'Necesitamos s¨¢banas, cojines y caf¨¦', explic¨® Nurull Amin, ciudadano banglades¨ª que lleva tres a?os en Espa?a. 'No hemos podido dormir en toda la noche y algunos compa?eros ya est¨¢n enfermos', a?adi¨®, se?alando a su amigo hind¨² Parmama Ujit, que padece neumon¨ªa y no ha bebido agua desde el inicio del encierro. La mayor¨ªa son paquistan¨ªes, hind¨²es y marroqu¨ªes, adem¨¢s de un alto n¨²mero de ciudadanos de Bangladesh, Senegal y diversos pa¨ªses del este europeo, que llevan dos o tres a?os viviendo en Espa?a sin papeles.
Los inmigrantes encerrados han creado comit¨¦s de vigilancia y control para que los d¨ªas que deban pasar en el recinto adjunto a la iglesia se pueda convivir de forma organizada, seg¨²n explic¨® la portavoz de Papeles para Todos, Norma Falconi. Esta organizaci¨®n se ocupa de la limpieza y el orden de la sala que acoge a los inmigrantes, que optaron por Santa Mar¨ªa tras ver c¨®mo se les cerraban las puertas de la catedral.
Dos enfermeras y un m¨¦dico
El p¨¢rroco, Josep Mar¨ªa Vidal, aprueba por el momento la protesta, aunque se reunir¨¢ pr¨®ximamente con miembros de este colectivo para clarificar hasta qu¨¦ punto tolerar¨¢ el empeoramiento de la salud de los huelguistas. Los primeros desmayos y bajadas de tensi¨®n ya se registraron la primera noche de encierro. Un par de enfermeras y un m¨¦dico se ocupan de atender a los que ayunan. Muchos de ¨¦stos se han negado a recibir ayuda m¨¦dica y afirman que piensan aguantar hasta las ¨²ltimas consecuencias. Ya se ha repartido un manual para el huelguista de hambre y cada ma?ana se celebrar¨¢n reuniones en las que se informar¨¢ sobre cuestiones de salud y las eventuales novedades que pueda haber por parte del Gobierno.
El ¨²nico incidente que se registr¨® la primera noche de protesta fue la incursi¨®n en la iglesia de cuatro polic¨ªas de paisano que intentaron persuadir a los huelguistas de que abandonara la sala, sin ¨¦xito. Durante los pr¨®ximos d¨ªas, los representantes de los inmigrantes establecer¨¢n comunicaci¨®n con los encerrados en Murcia y otros puntos de Espa?a para tomar decisiones conjuntas de cara a la entrada en vigor de la nueva ley.
En Valencia, los 40 ecuatorianos que permanec¨ªan encerrados en una parroquia la abandonaron, al tiempo que se celebraba una concentraci¨®n ante la catedral, convocada por una asociaci¨®n de ecuatorianos y otra de argelinos. El martes se concentrar¨¢n ante el ayuntamiento para pedir amparo a la sociedad valenciana.
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