Joseph Kabila se re¨²ne con los l¨ªderes de los pa¨ªses aliados tras el multitudinario entierro de su padre

El nuevo hombre fuerte de la Rep¨²blica Democr¨¢tica de Congo (RDC), Joseph Kabila, se reuni¨® ayer en Kinshasa con los l¨ªderes de los pa¨ªses africanos aliados tras el entierro oficial de su padre, el presidente Laurent Desir¨¦ Kabila, asesinado el pasado d¨ªa 16 por un soldado. Adem¨¢s de los presidentes de Angola, Zimbabue y Namibia, que apoyan al r¨¦gimen de Kinshasa frente a la rebeli¨®n respaldada por Ruanda y Uganda en el este del pa¨ªs, la antigua potencia colonial, B¨¦lgica estuvo representada por su ministro de Exteriores, Louis Michel, quien advirti¨® de que la legitimidad del nuevo Gobierno congol¨¦s depende de su capacidad de di¨¢logo para pacificar el pa¨ªs. Kabila jurar¨¢ hoy como nuevo presidente.

Decenas de miles de personas desfilaron frente al f¨¦retro de Kabila. Tras una misa de cuerpo presente, los restos de Kabila fueron trasladados en las primeras horas de la tarde al Palacio de la Naci¨®n, donde recibieron sepultura en un mausoleo construido el pasado fin de semana en el jard¨ªn central del edificio, utilizado por el asesinado presidente como despacho de trabajo y que se alza junto al r¨ªo Congo. La inhumaci¨®n se produjo despu¨¦s de tres d¨ªas de honras f¨²nebres, que se iniciaron el s¨¢bado con la llegada de los restos desde Harare -adonde fue trasladado Kabila tras el atentado del martes para recibir tratamiento m¨¦dico, a Lubumbashi, capital de la provincia de Katanga, donde naci¨® el presidente. El ata¨²d, cubierto con una bandera congole?a azul con estrellas amarillas, fue tra¨ªdo el domingo a Kinshasa e instalado en el Palacio del Pueblo, sede del antiguo Parlamento, donde qued¨® custodiado por una guardia de honor, llegada desde distintos puntos del pa¨ªs y desde el exterior. Se prev¨¦ que el general Joseph Kabila, primog¨¦nito del l¨ªder asesinado, promovido interinamente al cargo de jefe del Gobierno de la RDC, jure hoy como presidente. Los soldados m¨¢s pr¨®ximos de su escolta no parec¨ªan portar armas durante las exequias oficiales, seg¨²n la BBC.