Las defensas del 'caso Raval' reclaman la absoluci¨®n por falta de pruebas

Visto para sentencia. El juicio por el caso de supuesta pederastia del Raval acab¨® anoche en la Audiencia de Barcelona despu¨¦s de 10 sesiones. Las defensas solicitaron la absoluci¨®n de los cinco acusados por falta de pruebas e indicios incriminatorios, aunque en el caso de Xavier Tamarit y Jaume Lli, los dos principales acusados, sus abogados reclamaron que se les aplique la eximente completa por la pedofilia que padecen y que, de esta manera, se les exculpe de su responsabilidad penal.

Las defensas coincidieron en reclamar la absoluci¨®n de sus clientes: no existen pruebas que les incriminen, ni siquiera indicios serios sobre los que pueda basarse una condena. En el caso de los tres padres juzgados por permitir los abusos sexuales que padecieron sus hijos o su utilizaci¨®n con fines pornogr¨¢ficos, las defensas se?alaron que, si el tribunal opta por esta v¨ªa, sus clientes tambi¨¦n deben ser absueltos porque desconoc¨ªan esos hechos delictivos, jam¨¢s los permitieron y no se lucraron con este supuesto uso de sus hijos para fines sexuales.

En el caso de Josefa Guijarro, para quien el fiscal solicita 15 a?os de c¨¢rcel por permitir que se fotografiara desnudos a cuatro de sus hijos y que se abusara de ellos, la defensa argument¨® que su clienta es 'pobre de solemnidad'. El letrado Gabriel Oliver critic¨® que las acusaciones hubiesen utilizado en el juicio la miseria 'como prueba inculpatoria' y precis¨® que si cambi¨® de piso lo hizo porque fue desahuciada al no poderlo pagar, no por huir del control de los servicios sociales.

Momento equivocado

Este letrado explic¨® igualmente que Guijarro no es 'la madame que pintaron' los medios de comunicaci¨®n, 'que prostitu¨ªa a todo el mundo'.

En t¨¦rminos similares se expresaron los abogados de Antonio Duran y N¨²ria Mart¨ªn, para los que el fiscal pide sendas penas de 10 a?os de prisi¨®n como autores de un delito de abusos sexuales por omisi¨®n. La acusaci¨®n sostiene que los padres permitieron que Lli abusara de su hijo O. a cambio de algo de dinero. Buenaventura Sansa, defensor de la madre, se pregunt¨® por qu¨¦ el resto de padres de los ni?os que presuntamente sufrieron abusos sexuales estaban en libertad. M¨¢s contundente fue Lourdes Sancho, abogada del padre, quien cuestion¨® todas las pruebas inculpatorias. En su opini¨®n, la fiscal¨ªa 'adulter¨® la situaci¨®n familiar de estos padres para fundamentar la acusaci¨®n'.

La abogada asegur¨® que los padres estaban convencidos de la bondad de Lli hacia su hijo y puntualiz¨®: 'Su ceguera nunca fue inductora ni favorecedora de ning¨²n delito'. Como el resto de las defensas, acab¨® su informe reflexionando sobre el efecto devastador que ha tenido en las vidas de los acusados el proceso judicial y las consecuencias irreversibles que ya han sufrido. Record¨® que en el verano de 1997, cuando estall¨® el caso, la Generalitat les retir¨® la patria potestad de los ni?os, que probablemente no recuperar¨¢n, ni siquiera con una sentencia absolutoria.

Remei Pascual y Jordi Crespo, defensores de Xavier Tamarit y Jaume Lli, respectivamente, tambi¨¦n reclamaron la inocencia de sus clientes y solicitaron que se les aplique la eximente completa por pedofilia. Seg¨²n estos abogados, esta conducta es un trastorno reconocido por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud. La fiscal¨ªa solicita 77 a?os de prisi¨®n para Tamarit y 25 para Lli. La sesi¨®n de ayer hubo de suspenderse unas horas a los cinco minutos de iniciarse debido a que Josefa Guijarro se vio afectada por la neumon¨ªa que padece.

Tamarit afirm¨® ante el tribunal que 'entender¨ªa' que se le condenara por tocamientos, 'pero no por violaciones o prostituci¨®n, que considero horribles. Si yo hiciera eso no ser¨ªa digno de seguir viviendo'. Admiti¨® que pod¨ªa haber hecho alg¨²n da?o ps¨ªquico, 'pero nunca he tenido la voluntad de hacer da?o a un ni?o', precis¨®. 'No escog¨ª ser como soy, pero lo he asumido [la pedofilia] y me he sometido voluntariamente a un tratamiento de castraci¨®n qu¨ªmica', asegur¨®.