Interior sanciona con 50.000 pesetas a la Universidad de Alcal¨¢ por saltar cinco veces su alarma sin motivo
El Ministerio del Interior ha sancionado con una multa de 50.000 pesetas a la Universidad de Alcal¨¢ de Henares por haber sonado cinco veces, sin motivo alguno y con las consiguientes molestias para polic¨ªas y vecinos de la zona, la alarma del teatro La Galera, situado en el interior de este recinto universitario.
Las cinco falsas alarmas se produjeron en los meses que van de abril a junio de 1998. Meses despu¨¦s, tras las quejas de los polic¨ªas que acud¨ªan al lugar y que s¨®lo acertaron a detectar fallos en el sistema, la Delegaci¨®n del Gobierno de Madrid opt¨®, el 7 de octubre de 1998, por imponer una multa de 50.000 pesetas a la Universidad alcala¨ªna por haber cometido 'una infracci¨®n leve del art¨ªculo 24.2 de la Ley 23/1992, de 30 de julio, que regula la seguridad privada de los edificios'.
La universidad apel¨® la sanci¨®n ante el Ministerio del Interior y pidi¨® que se revocase la multa. El ministerio, sin embargo, la ratific¨® el 21 de abril de 1999. Por este motivo, la universidad alcala¨ªna present¨® un recurso ante el Juzgado de lo Contencioso n¨²mero 21 de Madrid. El juez tampoco dio la raz¨®n a la universidad, y adem¨¢s dijo que no cab¨ªa recurrir en apelaci¨®n su fallo. Insatisfecha con esta decisi¨®n, la universidad recurri¨®, no obstante, ante la Secci¨®n Primera del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Aleg¨® que s¨ª cab¨ªa recurrir el fallo judicial por tratarse de un pleito entre dos administraciones p¨²blicas. Los cinco jueces de esta instancia judicial han desestimado el recurso por inadmisible y, paralelamente, convertido en firme la sentencia que impone la sanci¨®n de 50.000 pesetas a la universidad.
Los jueces recuerdan que el teatro La Galera fue objeto de cinco denuncias a lo largo de los meses de abril a junio de 1998 'por sonar sus alarmas sin que respondieran a situaciones de peligro'. Adem¨¢s, entienden que la resoluci¨®n del Juzgado 21 es irrecurrible, dado que en este caso una de las administraciones -la universidad- 'no act¨²a como consecuencia de ninguna actividad propia de una administraci¨®n p¨²blica, sino como usuaria de un servicio de seguridad privado'.
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