La banda Calexico despliega su m¨²sica fronteriza

Barnes y Convertino son dos m¨²sicos de estudio con una larga trayectoria. 'Hemos trabajado muchas veces juntos y eso ha creado una din¨¢mica que hace de nuestra colaboraci¨®n algo muy c¨®modo y natural. En 1996 empezamos a hacer unos acordes, muy ac¨²sticos, muy sueltos, con instrumentos que ¨ªbamos coleccionando: vibr¨¢fonos, marimbas, acordeones, mandolinas, chelos, contrabajos... Compusimos algunos temas y los toc¨¢bamos en forma de d¨²o, que es m¨¢s barato y sencillo. Tras nuestro primer ¨¢lbum, The black light, pudimos invitar a participar a otros m¨²sicos que conocimos en Europa: alemanes y franceses', afirma Joey Barnes.

Ninguno de los dos miembros de Calexico tiene ascendente mexicano, pero su m¨²sica emana con frecuencia un aire mariachi. 'Somos, sobre todo, aficionados a la m¨²sica moderna. No puedes evitar sentirte calado por distintos tipos de m¨²sica. John y yo somos aficionados al jazz, cl¨¢sica, rock, rap, a la m¨²sica electr¨®nica, experimental, algo de pop'.

Los miembros de Calexico se sienten muy c¨®modos en Europa. Vienen con mucho inter¨¦s y curiosidad. 'Estuvimos en un festival en Bilbao, y cre¨ª percibir que a los m¨²sicos y al p¨²blico les gustan las experiencias intensas con la m¨²sica, un rock de garaje muy oscuro, como de los a?os sesenta, que ya no interesa al resto de Europa'.

'Mezclamos influencias que van desde el fado portugu¨¦s hasta el flamenco, Eric Satie, la vieja canci¨®n italiana, valses al acorde¨®n o jazz americano de los a?os cincuenta y sesenta. En nuestro nuevo ¨¢lbum, Hot rail, usamos una trompeta que suena en un tema como los clarines en una corrida de toros y en otra como Miles Davis. Nos gusta el contraste y la experimentaci¨®n'.