El terrorista de Oklahoma quiere que la televisi¨®n retransmita su muerte
Timothy McVeigh, el hombre que en 1995 mat¨® a 168 personas en un atentado contra un edificio de Oklahoma, ha declinado la posibilidad de solicitar clemencia y ha pedido que su ejecuci¨®n sea retransmitida por televisi¨®n. McVeigh ser¨¢ ejecutado con una inyecci¨®n letal el 16 de mayo en la prisi¨®n federal de Terra Haute, Indiana.
McVeigh, como preso federal, ten¨ªa derecho a solicitar un indulto presidencial que conmutara la pena de muerte por una cadena perpetua. Aunque resulta inimaginable pensar que George W. Bush pudiera conceder esa hipot¨¦tica demanda, fue el propio McVeigh quien renunci¨® a ello al dejar pasar el tiempo establecido para la solicitud. Sus abogados explicaron que una de las razones era su certeza de que las posibilidades de que Bush se la concediese 'eran remotas o inexistentes'. Los abogados tambi¨¦n contaron que McVeigh 'no cree que una cadena perpetua sea mejor que una pena de muerte'. La ejecuci¨®n de McVeigh ser¨¢ la primera de un preso federal en 37 a?os. Decenas de reclusos est¨¢n en el corredor de la muerte por delitos federales pero un sistema judicial complejo y un margen amplio para los aplazamientos ha permitido que transcurran casi 40 a?os sin ejecuciones.
El caso de McVeigh, el rostro del terror en EE UU, se ha complicado con su solicitud para que la televisi¨®n retransmita su ejecuci¨®n. Aunque pol¨ªticos y soci¨®logos entienden que su deseo es convertirse en un m¨¢rtir, la Oficina Federal de Prisiones estudia la posibilidad de que la ejecuci¨®n sea retransmitida por un circuito cerrado a un lugar que d¨¦ cabida a los cientos de familiares de v¨ªctimas que desean presenciarla. En donde ser¨¢ ejecutado s¨®lo caben ocho personas.
La misma oficina asegura que 'ni siquiera se ha planteado' la posibilidad de que alguna cadena de televisi¨®n tenga acceso a las im¨¢genes para retransmitirlas en directo o en diferido. Al menos 250 personas han presentado solicitudes para asistir a la ejecuci¨®n de McVeigh, aunque se espera que el n¨²mero final supere el millar. Posiblemente la se?al ser¨¢ enviada desde la prisi¨®n de Indiana a un edificio p¨²blico en Oklahoma en el que est¨¦n los familiares de las v¨ªctimas.
S¨®lo el padre de una de las v¨ªctimas, Bud Welch, se ha mostrado en contra. de la ejecuci¨®n de Timothy McVeigh. La hija de Welch, Julie, trabajaba como traductora de espa?ol para la Seguridad Social en el edificio que McVeigh destruy¨® con un cami¨®n cargado de bombas. Welch ha contado que su hija siempre se hab¨ªa mostrado contraria a la pena de muerte, y a?ade: 'El d¨ªa que matemos a McVeigh, le habremos ayudado a suicidarse'. Seg¨²n el cardenal de Chicago, Francis George, la decisi¨®n del preso de renunciar a cualquier apelaci¨®n 'es un acto de desesperaci¨®n y una petici¨®n de suicidio'.
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