200.000 personas exigen en Madrid la reforma del Plan Hidrol¨®gico
Los manifestantes, en su mayor¨ªa llegados en autocar desde Arag¨®n, toman la capital
'Y luego dir¨¦is que somos cinco o seis'. 'Haremos un pantano, en la Puerta del Sol'. Con estos gritos y pitadas ensordecedoras o peque?as orquestas, miles de manifestantes se divert¨ªan ayer mientras llenaban el paseo del Prado y la calle de Alcal¨¢. La marcha, que desbord¨® las previsiones de los organizadores y tuvo algo de ca¨®tica por el exceso de gente, lleg¨® hasta la Puerta del Sol. Los primeros promotores de esta idea, grupos ecologistas contrarios a las obras hidr¨¢ulicas previstas en el plan, estaban euf¨®ricos y hablaban de 'hecho hist¨®rico'. Pedro Arrojo, de la Plataforma de Defensa del Ebro, estaba impactado: 'Es impresionante. Nunca se imagin¨® el Gobierno esta protesta'.
Pero la marcha, una de las m¨¢s multitudinarias contra una medida del Gobierno, tambi¨¦n estaba convocada por grupos pol¨ªticos. Gaspar Llamazares, coordinador de IU, tachaba de 'moci¨®n de censura al plan' la protesta y aseguraba que 'la manifestaci¨®n demuestra que hay un gran clamor contra una pol¨ªtica que centra sus intereses en las grandes constructoras y tambi¨¦n que Arag¨®n no es la ¨²nica comunidad que no est¨¢ de acuerdo, hay otras muchas que gritan contra un proyecto que va contra el desarrollo sostenible y todo tipo de equilibrios'. De hecho, entre los manifestantes hab¨ªa aragoneses, pero adem¨¢s catalanes, riojanos, andaluces, murcianos, valencianos y madrile?os.
Tras una lenta marcha que por la cantidad de p¨²blico recordaba a las manifestaciones contra la banda terrorista ETA, a la una y veinte de la tarde, en la Puerta del Sol, el actor zaragozano Jos¨¦ Luis Pellicena le¨ªa el comunicado contra un plan 'que no contempla la nueva pol¨ªtica del agua' . Tras la lectura, el acto p¨²blico concluy¨® con miles de personas siguiendo en la Puerta del Sol a Jos¨¦ Antonio Labordeta, diputado de la Chunta Aragonesista, mientras entonaba sin m¨²sica su canci¨®n Canto a la Libertad.
Adem¨¢s de los convocantes, los principales dirigentes del Gobierno aragon¨¦s (formado por PSOE y Par) y de la oposici¨®n en Catalu?a (PSC, ERC, IC) estaban tambi¨¦n all¨ª. Y los l¨ªderes sindicales de ambas comunidades.
Los socialistas se quejaron de que TVE no emitiera ni una sola declaraci¨®n de sus dirigentes, cuando el resto de las cadenas s¨ª lo hicieron. El PSOE no convocaba la manifestaci¨®n, pero s¨ª la apoyaba con su presencia. A pesar de ello, ?lvaro Cuesta, de la ejecutiva socialista, logr¨® colarse en la cabeza de la manifestaci¨®n junto a los convocantes.
Los l¨ªderes pol¨ªticos iban delante, pero la masa no la compon¨ªan los afiliados de sus partidos u organizaciones sino gentes llegadas de todos los pueblos, movilizadas por los ayuntamientos. De hecho, hab¨ªa incluso algunos concejales del PP y de CiU de la zona de Tortosa (Tarragona). Adela Domeque, jubilada de El Villar de los Navarros (Zaragoza), estaba junto a los ecologistas: 'A los aragoneses nos han robado mucho y los de mi pueblo hemos venido a decir no al plan'.
Theo Oberhuber, coordinador de Ecologistas en Acci¨®n, organizaba la cabecera y aseguraba que 'este no es el Plan Hidrol¨®gico Nacional, es el plan del trasvase del Ebro'.
Lo cierto es que hab¨ªa miles de lemas y de pancartas. Mientras los contrarios al recrecimiento del pantano de Yesa gritaban 'Rodr¨ªguez Zapatero tambi¨¦n es pantanero', los dirigentes del PSOE aragon¨¦s y catal¨¢n pasaban a su lado con otros lemas.
La manifestaci¨®n fue por encima de todo una fiesta para todas las personas que hab¨ªan recorrido cientos de kil¨®metros y aprovecharon la jornada soleada en Madrid para disfrutar de la protesta, que dur¨® hasta pasadas las tres de la tarde. Tambores, gaiteros, petardos, disfraces, trajes y c¨¢nticos regionales invad¨ªan las calles centrales de la capital. Por todas partes hab¨ªa banderas rojigualdas, pero no las espa?olas, sino las aragonesas y catalanas, con cuatro barras.
Sara, de 11 a?os, ven¨ªa de Zaragoza en autob¨²s: 'Es que no nos tienen en cuenta y hoy queremos que sepan que existimos y que ese plan es malo para Arag¨®n y para m¨¢s gente'. Los paisanos del R¨ªo Ara de Huesca recordaban que su comarca est¨¢ muerta por un pantano, el de J¨¢novas, que lleva m¨¢s de 20 a?os en barbecho para finalmente no hacerse.
La gente sigui¨® entrando en la Puerta del Sol hasta tres horas despu¨¦s de que comenzara la marcha. Al final llegaban los catalanes del Delta del Ebro, y el ninot de Aznar adelantaba las fallas, ardiendo sobre un palo mientras los sindicatos recog¨ªan las banderas. Los manifestantes improvisaban comidas sobre el asfalto. Los autobuses aguardaban el regreso y en la Gran V¨ªa una tienda de discos no perd¨ªa la oportunidad de emitir a todo trapo el Canto a la Libertad de Labordeta.
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