La mejor obra del escultor Gragera

La estatua de Juan ?lvarez Mendiz¨¢bal, erigida en la plaza del Progreso, hoy Tirso de Molina, fue obra del artista c¨¢ntabro Jos¨¦ Bartolom¨¦ Gragera y Herboso, cuenta el historiador Enrique Pardo Canal¨ªs. Este escultor naci¨® en Laredo en 1818. Nieto de un general progresista, estudi¨® Leyes y Filosof¨ªa en Oviedo, donde gan¨® un concurso de pl¨¢stica. Becado, viaj¨® a Madrid para estudiar en San Fernando. Aqu¨ª permaneci¨® hasta su muerte, en 1897. Artista delicado y de s¨®lida formaci¨®n neocl¨¢sica, destac¨® por sus bustos de pol¨ªticos y juristas, algunos de los cuales pueblan el Museo Rom¨¢ntico -esa joya de la calle de San Mateo- y del Palacio del Congreso de los Diputados.

Gragera apenas esculpi¨® estatuas de grandes dimensiones. La que dedic¨® a Mendiz¨¢bal fue, con certeza, la mejor de cuantas salieron de su taller, seg¨²n cr¨ªticos de la ¨¦poca. Esculpida en Madrid y fundida en bronce en los hornos Eck de Par¨ªs, cost¨® 108.000 reales de vell¨®n. Med¨ªa m¨¢s de tres metros, otro tanto la peana en piedra berroque?a que a¨²n se conserva como soporte de la estatua de Tirso, cuyo rostro, por cierto, ha sido desfigurado por la erosi¨®n. Mostraba al pr¨®cer gaditano con gran naturalidad.

Mendiz¨¢bal era hombre de aspecto y porte agradables: Juan y Medio le llamaban por su elevada talla y, seg¨²n sus rivales, por mostrarse un punto pagado de s¨ª mismo. En la efigie de Gragera, Mendiz¨¢bal, de expresi¨®n resuelta y decidida, avanzaba su pie izquierdo y bland¨ªa, en su mano derecha, uno de los decretos desamortizadores que tanto signaron su pol¨ªtica. Ve¨ªa ce?ida su figura por una gran capa con vuelo, s¨ªmbolo de los obst¨¢culos con los que el liberalismo top¨® siempre que trat¨® de aplicar sus propuestas, al decir librepensante de la ¨¦poca.

Hasta 16 a?os la estatua hubo de permanecer almacenada; tal era el remilgo de Isabel II por no molestar a los clericales. A¨²n as¨ª, fue erguida el 16 de septiembre de 1868, v¨ªspera de la la revoluci¨®n. Retirada la estatua en 1939, su peana recibi¨® en 1943 la del mercedario Tirso de Molina, obra de Rafael Vela.