400 compa?eros se van a la competencia

Las operaciones estrat¨¦gicas de la multinacional inglesa Williams Plc y de la sueca Assa Abloy han dividido la plantilla de la fabricante de cerraduras de Tesa en Ir¨²n (Guip¨²zcoa). El grupo Williams, que adquiri¨® en diciembre de 1996 Tesa por 25.000 millones de pesetas, decidi¨® a principios del a?o pasado que, siguiendo su din¨¢mica de compra y venta de sociedades, ya era hora de deshacerse de la divisi¨®n de cerraduras Yale, que engloba las marcas Tesa, Chubb y Yale. Williams y Assa Abloy acordaron la operaci¨®n, que se cerrar¨¢ en el ¨²ltimo trimestre de este a?o.

En un principio, la idea de Williams era vender todo Tesa a la competidora sueca pero las leyes antimonopolio han reducido el alcance de la operaci¨®n, as¨ª que s¨®lo pasar¨¢ a manos de Assa Abloy la divisi¨®n mec¨¢nica de la empresa guipuzcoana, por la que pagar¨¢ 85 millones de libras esterlinas (22.440 millones de pesetas). En total, el grupo sueco desembolsar¨¢ 765 millones de libras (201.960 millones de pesetas) por hacerse con las marcas Tesa, Chubb y Yale.

El grupo ingl¨¦s conserva la actividad m¨¢s rentable e internacional de la compa?¨ªa espa?ola -

El acuerdo entre los dos gigantes ha provocado una escisi¨®n en la plantilla de Tesa, que naci¨® en 1941 de la iniciativa de un grupo de emprendedores guipuzcoanos. Cuando la venta se materialice, los 400 trabajadores de la divisi¨®n mec¨¢nica de Tesa seguir¨¢n trabajando en la planta de Ir¨²n pero pasar¨¢n a ser competidores de sus antiguos compa?eros de la divisi¨®n electr¨®nica. De hecho, la plantilla de Tesa, ya bajo el paraguas de Assa Abloy, vender¨¢ las cerraduras VingCard, que rivaliza ferozmente con el modelo de Tesa en el segmento de cerraduras electr¨®nicas.

Para culminar la reestructuraci¨®n de sus empresas, el grupo Williams ha creado la sociedad, Tesa Entry Systems, que agrupa a la antigua divisi¨®n electr¨®nica. La nueva empresa no ha parado de crecer en plantilla desde que el grupo brit¨¢nico y la sueca Assa Abloy cerraron el acuerdo. Si en agosto del a?o pasado, trabajaban en la fabricaci¨®n de cerraduras electr¨®nicas 40 personas, a fecha de hoy, ya son 67 los trabajadores y se espera terminar el a?o con un centenar de empleados.

Lo que queda de Tesa en manos del grupo Williams es la joya de la corona de esta firma, que naci¨® en plena postguerra espa?ola y que ha conseguido ser l¨ªder mundial de cerraduras electr¨®nicas de hotel. Tesa Entry Systems, que fabrica y comercializa cerraduras electr¨®nicas para hotel y control de accesos, tiene m¨¢s de 1,8 millones de unidades instaladas en todo el mundo y presencia en m¨¢s de 115 pa¨ªses.

Mientras la planta de Tesa en Ir¨²n pasa a manos de la sueca Assa Abloy, su principal rival, la divisi¨®n electr¨®nica, se queda con las oficinas centrales en Atlanta (EE UU) y la planta de Guadalajara (M¨¦xico). A ¨¦stas se incorporar¨¢ el pr¨®ximo verano una nueva f¨¢brica, que se est¨¢ construyendo en Oyarzun (Guip¨²zcoa), con una inversi¨®n de m¨¢s de 1.000 millones de pesetas.

Williams ha apostado fuerte por la fabricaci¨®n de cerraduras electr¨®nicas y de control de accesos y s¨®lo el a?o pasado abri¨® oficinas en ocho pa¨ªses. Entry Systems espera cerrar con unas ventas de 18.000 millones de pesetas este ejercicio, en el que ha sacado al mercado un nuevo modelo de cerradura, que funciona tanto con banda magn¨¦tica como con tarjeta chip.

La entrada de Assa Abloy en Tesa es el ¨²ltimo cambio en el capital de esta empresa, que fue devorada por la vor¨¢gine compradora en la que estaba inmersa Williams en el bienio 1995-1996, cuando se hizo con 11 empresas del sector de la seguridad integral. Entre ellas, Tesa, que entonces ten¨ªa como accionista mayoritaria a la brit¨¢nica Newman Tonks, con un 33%, mientras el resto del capital estaba repartido entre peque?os socios locales.