Una vida tras la c¨¢mara

Willy Ronis (Par¨ªs, 1910) so?aba con seguir los pasos de su madre y despuntar en el mundo de la m¨²sica. Pero el destino le hab¨ªa deparado otra ruta en el campo del arte y acab¨® brillando en la misma actividad de su padre, la fotograf¨ªa, una actividad que en su pa¨ªs le ha valido varios nombramientos, entre ellos el de comendador de las Artes y de las Letras y caballero de la Legi¨®n de Honor.

Desde que en 1916, con s¨®lo seis a?os, consigui¨® su primera c¨¢mara, se ha dedicado a plasmar la vida cotidiana en im¨¢genes. Hasta el pr¨®ximo 18 de mayo, en la FNAC El Triangle se exponen una cuarentena de los mejores trabajos, en blanco y negro, de este profesional curtido, al lado de figuras notables de la fotograf¨ªa como son Henry Cartier-Bresson y Robert Doisneau.

Hijo de emigrantes jud¨ªos, Willy Ronis se gan¨® pronto el prestigio como reportero y fue el primer franc¨¦s que trabaj¨® para la revista Life. Su mirada atenta le convirti¨® en brillante notario del d¨ªa a d¨ªa de su Par¨ªs natal, de sus calles, de sus gentes y de sus comercios, del patrimonio, pero tambi¨¦n de los movimientos sociales, sin dejar de lado incursiones en el mundo de la publicidad.

En la exposici¨®n de la FNAC El Triangle (organizada con motivo de su 90? aniversario y presentada por primera vez en la FNAC Montparnasse el pasado a?o) se re¨²nen algunas de sus fotograf¨ªas m¨¢s famosas, como Desnudo provenzal y la que muestra, en plena calle, a los ping¨¹inos de un circo, con otras menos conocidas, unidas todas ellas por un tono intimista.-