Bush presenta un presupuesto con m¨¢s gasto militar y menos dinero para el medio ambiente
El presidente desoye al Senado e insiste en recortar los impuestos en 1,6 billones de d¨®lares
Bush mantiene ¨ªntegro su plan de reducir los impuestos en 1,6 billones de d¨®lares en la pr¨®xima d¨¦cada, pese a que el Senado vot¨® la semana pasada a favor de moderar esa cifra hasta 1,2 billones, y favorece especialmente a dos ministerios: Defensa, cuyo presupuesto global sube un 14% (hasta los 310.500 millones, unos 55 billones de pesetas) para modernizar el armamento y para mejorar los salarios de los militares, y Educaci¨®n, que recibe un 4,6% m¨¢s que en el ejercicio 2000-2001. Medio Ambiente, Transportes y Agricultura son las cenicientas del paquete presupuestario.
La canci¨®n de los Rolling Stones es un gui?o para los inquilinos del Capitolio, que deber¨¢n aprobar el presupuesto, pero el presidente deber¨ªa tambi¨¦n canturrearla a menudo. No est¨¢ nada claro, vista la opini¨®n contraria del Senado, que la reducci¨®n de impuestos acabe siendo aprobada en los t¨¦rminos deseados por George W. Bush, aunque el vicepresidente Dick Cheney afirm¨® el domingo que 'con un poco de insistencia' y con el apoyo de la C¨¢mara de Representantes, donde la mayor¨ªa es republicana, la Casa Blanca se saldr¨ªa con la suya.
Bush quiz¨¢ subestima el efecto movilizador que algunos de sus planes, sobre todo en el terreno ecol¨®gico, ejercen sobre las bases dem¨®cratas.
Los ecologistas, al ataque
El intento de buscar petr¨®leo en Alaska (ya descartado), el plan para reactivar la construcci¨®n de centrales nucleares y el rechazo a los acuerdos internacionales de Kioto sobre emisi¨®n de gases han puesto en pie de guerra a cientos de organizaciones que permanec¨ªan m¨¢s o menos postradas desde la campa?a electoral. El gasto en programas medioambientales b¨¢sicos, como los dedicados a combatir la contaminaci¨®n en el aire y el agua, se reduce en 2.300 millones de d¨®lares y queda en 26.400 millones.
El ¨¢nimo de los parlamentarios dem¨®cratas, desvanecida ya la ficci¨®n electoral del centrismo de Bush, es igualmente belicoso. '?ste es un presupuesto recalentado que ya ha sido rechazado por una coalici¨®n bipartidista en el Senado. Distribuye los recursos de forma totalmente err¨®nea y recorta inversiones dom¨¦sticas esenciales para hacer posible una enorme rebaja fiscal que s¨®lo favorece a los m¨¢s ricos', dijo Tom Kahn, l¨ªder de la minor¨ªa dem¨®crata en el Comit¨¦ de Presupuestos de la C¨¢mara de Representantes.
La reducci¨®n de impuestos es el elemento crucial del proyecto, porque el ep¨ªgrafe fiscal condicionar¨¢ todo el resto. El gasto global asciende un 5,6%, bastante menos que en el ¨²ltimo presupuesto de Bill Clinton (la subida fue del 8,7%), para encajar la reducci¨®n de ingresos fiscales. Varios de los proyectos de Clinton resultan suprimidos o muy amputados: la dotaci¨®n financiera para crear 100.000 nuevos empleos en distintos cuerpos policiales; un programa para mejorar la formaci¨®n de los pediatras en los hospitales; un plan para abrir centros de salud destinados a los m¨¢s pobres y a las personas sin seguro m¨¦dico. '?ste es un proyecto sin grasa', proclam¨® George W. Bush.
Previsiones optimistas
El cuadro macroecon¨®mico en que se basa el entramado presupuestario es rotundamente optimista, porque todo se proyecta contando con que la econom¨ªa estadounidense no sufrir¨¢ ninguna recesi¨®n y crecer¨¢ un 2,4% este a?o. Ese optimismo resulta curioso, despu¨¦s de todos los comentarios negativos realizados por Bush y Cheney sobre la situaci¨®n econ¨®mica para justificar la necesidad de bajar los impuestos. Aunque los indicadores de coyuntura publicados en marzo son los peores en muchos a?os, el presidente y el supervicepresidente aseguraron en la introducci¨®n al proyecto de ley que 'los indicadores de futuro han empezado a mejorar recientemente y apuntan a un crecimiento m¨¢s r¨¢pido en los pr¨®ximos meses'.
La Casa Blanca prev¨¦ un crecimiento del 3,3% en 2002 y del 3,2% en 2003 y 2004; un desempleo del 4,6% en 2002 y del 4,5% en 2003, y una inflaci¨®n del 2,7% este a?o y del 2,6% en 2002 y 2003. El optimismo se mantiene al abordar el super¨¢vit: en el pr¨®ximo ejercicio, cuya fecha de inicio es el 1 de octubre, Bush cuenta con recaudar 231.000 millones de d¨®lares m¨¢s de lo que piensa gastar.
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