Insumisos en la c¨¢rcel
Queremos explicarle, apelando a su responsabilidad como comunicador social, la injusta situaci¨®n de abandono informativo por la que est¨¢n pasando docenas de j¨®venes que, por ser coherentes con sus ideas pacifistas, se declararon insumisos a la leva forzosa del Ministerio de Defensa y, en general, al desmedido y creciente presupuesto militar, que esquilma los recursos para prioridades como Sanidad, Educaci¨®n, Investigaci¨®n, o la propia Justicia y consolida un orden mundial injusto en el exterior, el de la OTAN. Nos parece un desprop¨®sito que el Gobierno no quiera reconocer que tiene presos de conciencia en las c¨¢rceles; seg¨²n el se?or Trillo 'no existen insumisos en la c¨¢rcel'. Eso ser¨ªa lo l¨®gico, que ante un delito inexistente, la insumisi¨®n a un servicio militar que ha dejado de ser obligatorio, los presos fueran tambi¨¦n inexistentes..., como lo son al parecer para los medios de comunicaci¨®n, como lo son para la mayor¨ªa del Parlamento (que tiene desde hace casi un a?o paralizada una proposici¨®n de ley para despenalizar la insumisi¨®n, presentada por IU), como lo son para el se?or Trillo, inexistentes muertos civiles. Pero no son inexistentes para algunos, sus familias, sus amigos y compa?eros. Son alrededor de 70 de nuestros mejores j¨®venes a los que necesitamos excarcelar y rehabilitar, son cerebros y corazones, manos y coraje, que necesitamos para trabajar por una sociedad mejor. Es 'escandaloso, parad¨®jico e inaceptable' (J. Llamazares dixit) que 70 ciudadanos permanezcan en la c¨¢rcel por un delito 'inexistente' hoy. Es urgente su excarcelaci¨®n, pero, en caso de que se tome esta determinaci¨®n, mientras est¨¦ vigente su inhabilitaci¨®n tampoco podemos conformarnos, los queremos rehabilitados y con todos sus derechos, porque as¨ª nos hacen falta. Quiz¨¢s a muchos les resulte extra?o este sentimiento de que alguien nos falta, pero les aseguramos que esa sensaci¨®n, es la de una generaci¨®n que aprendi¨® (porque los objetores e insumisos nos ense?aron con su cuestionamiento a la sinraz¨®n de la fuerza) e hizo suya la idea, de que los conflictos se pueden resolver pac¨ªficamente, que posee el hondo convencimiento de no ser ajenos a ninguna de las guerras, que tanto sufrimientos causan a tanta gente para beneficio de tan pocos.-
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