El Gobierno de Colombia reitera su voluntad de negociar la paz con la guerrilla del ELN

El Gobierno colombiano devolvi¨® al terreno del Ej¨¦rcito de Liberaci¨®n Nacional (ELN) la posibilidad de revivir un proceso de paz que el grupo guerrillero dej¨® en el limbo al anunciar el jueves 'la suspensi¨®n indefinida' de los contactos previos al di¨¢logo. El ELN exigi¨® al Gobierno acciones decididas frente a los grupos paramilitares que quieren impedir el proceso de paz.

'Para dar inicio a la zona de encuentro [escenario del di¨¢logo de paz] y que sea sostenible, hay algunos puntos que le corresponde al ELN definir y aclarar', dijo Camilo G¨®mez, alto comisionado para la paz y el hombre que ha manejado en los ¨²ltimos meses los hilos del tira y afloja con el segundo grupo guerrillero del pa¨ªs. Repiti¨® que el Gobierno 'tiene clara' su lucha contra los grupos paramilitares. 'Me la juego por la negociaci¨®n. Estoy listo para reunirme ya', dijo G¨®mez el jueves por la noche al responder al pronunciamiento de Pablo Beltr¨¢n, tercer comandante eleno. Fue duro al referirse a la presencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), primer grupo guerrillero de Colombia, en el Magdalena Medio, donde se ten¨ªa previsto decretar la zona de encuentro con el ELN. Las FARC reforzaron su presencia tras pactar con el ELN para combatir a los paramilitares, que aprovecharon la Semana Santa para copar espacios elenos. Ayer, Manuel Marulanda, Tirofijo, m¨¢ximo l¨ªder de las FARC, apoy¨® la decisi¨®n de sus colegas guerrilleros de suspender los contactos con el Gobierno 'Si ellos no tienen garant¨ªas, no tienen por qu¨¦ correr riesgos', dijo.

?El ganador con la decisi¨®n del ELN fue Carlos Casta?o, el temido jefe paramilitar?, le preguntaron al alto comisionado para la paz, que respondi¨®: 'No creo que haya ganado nada. Si ese personaje al margen de la ley no quiere ayudar en la paz, por lo menos que no la entorpezca'.

En medio de este cruce de opiniones y demandas, crece el escepticismo. 'Veo todo muy dif¨ªcil', declar¨® a este peri¨®dico el catedr¨¢tico Alejo Vargas, otro de los que han trabajado por hacer realidad el di¨¢logo. 'La situaci¨®n es compleja. La opini¨®n est¨¢ incr¨¦dula y Gobierno y guerrilla no generan credibilidad'. El diario El Espectador se preguntaba ayer: 'A 16 meses de concluir el Gobierno de Pastrana, ?es viable insistir en despejar un regi¨®n que se asemeja m¨¢s a un campo minado?'. Y agregaba: 'Por ahora, salta a la vista que el que menos maneja los hilos de la regi¨®n es el Estado'.

En medio de esta especie de desesperanza, el jueves, en la regi¨®n del Alto Naya, donde los paramilitares aprovecharon la Semana Santa para matar a campesinos e ind¨ªgenas indefensos, continu¨® el rescate de cad¨¢veres. Oficialmente se habla de 40; los campesinos e ind¨ªgenas insisten en que sus muertos son m¨¢s de cien.