Cad¨¢veres en el armario: el acoso laboral
El acoso moral en el trabajo est¨¢ alcanzando en las denominadas sociedades avanzadas unas dimensiones muy preocupantes. Seg¨²n el estudio aparecido en EL PA?S del pasado viernes 13 de abril, aproximadamente 750.000 trabajadores en Espa?a, un 5% de la poblaci¨®n laboral, sufren en diferentes grados acoso moral en sus puestos de trabajo (son datos que se desprenden de una encuesta de la Fundaci¨®n Europea para la Mejora de las Condiciones de Vida y de Trabajo, basada en 21.500 entrevistas). En el citado estudio se recoge un retrato robot del acosador, proporcionado por el psic¨®logo social de la Universidad de Alcal¨¢ de Henares I?aki Pi?uel, que a m¨ª me parece esclarecedor, y en donde aparece una met¨¢fora que refleja magistralmente la sordidez del universo personal del acosador: 'Cad¨¢veres en el armario...'. Los casos que yo he podido conocer corroboran ese perfil 'moral' del acosador: su cobard¨ªa, su complejo de inferioridad y, en la mayor¨ªa de los casos, su mediocridad profesional.
Es preciso acabar con los tres factores que, seg¨²n Pi?uel, necesita el acosador: el secreto, la verg¨¹enza (o el miedo) de la v¨ªctima y los testigos mudos (o impotentes), factores todos ellos que coadyuvan a la impunidad del acosador. Al margen de las soluciones personales que siempre se deben buscar para cada caso espec¨ªfico de acoso laboral, es urgente que se modifique la legislaci¨®n laboral y penal, en la l¨ªnea de los pa¨ªses de nuestro entorno, para que las v¨ªctimas de estos delitos puedan defenderse adecuadamente.-
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