El hombre que aprend¨ªa r¨¢pidamente
Cuando la Transici¨®n se dio cuenta de que ten¨ªa nombre de mujer empez¨® a notarse por la ruptura del cors¨¦ informativo del R¨¦gimen y se llam¨® destape a la operaci¨®n de desnudar las carnes y convertir el desnudo en reclamo de cine, primero, y en portada de revista, despu¨¦s. En Espa?a ya es tradicional que la democracia la anuncien los desnudos y los cambios de sexo; as¨ª ocurri¨® en el tr¨¢nsito de Primo de Rivera a la II Rep¨²blica y se repiti¨® entre 1975 y 1982. Antonio Asensio ocupa un lugar relevante en la operaci¨®n destape en su sentido m¨¢s amplio, porque no se limit¨® a destapar las carnes de, sobre todo, muchachas con o sin flor, desde Marisol a Bibi Andersen pasando por Lola Flores, sino que convirti¨® su revista Intervi¨² en uno de los tres referentes informativos fundamentales del cambio pol¨ªtico, junto con EL PA?S y la prensa en la lengua de los nacionalismos aplazados. Referente fundamental porque junto a la exhibici¨®n de la piel humana -lo m¨¢s profundo en cualquier ser humano seg¨²n Val¨¦ry es la piel- Intervi¨² recuper¨® la memoria hist¨®rica ocultada por el franquismo y agredi¨® lo mucho que quedaba del r¨¦gimen mediante una pol¨ªtica de denuncia de esc¨¢ndalos y corrupciones. El semanario fue como una inmensa cesta de la abundancia que compensaba las hambres pasadas.
?De d¨®nde sal¨ªa aquel joven de aspecto excesivamente grave que en la primera redacci¨®n de la revista, un piso del ensanche barcelon¨¦s, me propon¨ªa colaborar en la revista horas despu¨¦s de hab¨¦rselo propuesto a Emilio Romero, consciente de que entr¨¢bamos en un complejo periodo de cohabitaciones? Hijo de impresor prematuramente fallecido, el joven Asensio se preparaba para ser uno de los empresarios de medios de comunicaci¨®n m¨¢s importantes del ¨²ltimo cuarto de siglo y era experto en escoger a las personas que pod¨ªan ayudarle a conseguirlo. Por ejemplo Jos¨¦ Ilario, responsable original de Bocaccio, Por Favor y corresponsable de Intervi¨², me dijo de Asensio: 'De momento parece como si no supiera nada, pero aprender¨¢ pronto'. Fue evidente. En cinco a?os, con todos los problemas de liquidez de este pa¨ªs y casi de este mundo, Asensio consigui¨® ser un gran empresario y si Invervi¨² fue su buque insignia, ah¨ª est¨¢ El Peri¨®dico o los esfuerzos para tirar adelante nuevas cadenas de televisi¨®n que sin la audacia casi temeraria de Antonio no hubieran existido. Posibilista dentro de lo que cabe, los medios que puso en marcha conservaron la suficiente independencia con respecto al poder como para hacerse necesarios y sobrevivir con la complicidad del p¨²blico. El inteligente posibilismo de Antonio Asensio se nota no s¨®lo en la supervivencia de los medios creados en los tiempos ascendentes de la Transici¨®n, sino tambi¨¦n en que no rebas¨® los l¨ªmites que pod¨ªan llevarle a la prensa de esc¨¢ndalo. Ah¨ª est¨¢ la arm¨®nica f¨®rmula de El Peri¨®dico -arm¨®nica tambi¨¦n en sentido ling¨¹¨ªstico, con su doble edici¨®n en castellano y catal¨¢n- para demostrar c¨®mo se puede hacer prensa popular con una elevada carga de honestidad informativa, modelo seguido luego por diversos diarios de ¨¢mbito local a los que ha servido de referente. Y ah¨ª est¨¢ tambi¨¦n la sensata pol¨ªtica editorial de Ediciones B.
Luego tambi¨¦n se dedic¨® al f¨²tbol como negocio y ten¨ªa tanta importancia social que era obligado invitarle a los grandes aquelarres. Yo conservaba en mi retina aquella primera impresi¨®n de Asensio que recib¨ª en la precaria redacci¨®n original de Intervi¨². Aquel casi muchacho hablaba como si estuviera aprendiendo a escuchar.
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