EE UU reanuda sus maniobras en Vieques pese a las protestas de Puerto Rico
Detenidos 13 puertorrique?os que actuaban como escudos humanos para parar los ejercicios
La indignaci¨®n era ayer el sentimiento dominante en Puerto Rico y entre las comunidades puertorrique?as en el territorio continental estadounidense ante la reanudaci¨®n de los ejercicios de bombardeo de la Marina de EE UU en la isla de Vieques. Los bombardeos tuvieron que ser interrumpidos al poco de su reanudaci¨®n, porque grupos de manifestantes hab¨ªan logrado romper las barreras policiales y militares y hab¨ªan penetrado en el ¨¢rea de tiro. Un m¨ªnimo de 13 personas, incluidas ocho que hab¨ªan entrado en barca, fueron detenidas.
La noche anterior, la juez federal Gladys Kessler hab¨ªa rechazado en Washington la demanda contra la reanudaci¨®n de los bombardeos presentada por Sila Mar¨ªa Calder¨®n, la gobernadora puertorrique?a. Al amparo de esta decisi¨®n judicial, la Marina estadounidense sigui¨® adelante con sus planes y comenz¨® a utilizar de nuevo la peque?a isla de Vieques como campo de tiro. El Pent¨¢gono inform¨® que estaban siendo empleadas bombas 'inertes', es decir, sin carga explosiva. Pero esto no tranquiliz¨® a los ciudadanos de Puerto Rico, donde, adem¨¢s de en Vieques, se registraron protestas callejeras en la ciudad de San Juan.
Las maniobras comenzaron con un bombardeo por aviones A-4 del portaaviones USS Enterprise, que arrojaron nueve proyectiles, pero tuvieron que ser interrumpidas al detectarse la presencia en la zona de un grupo de civiles. Cuando ¨¦stos fueron detenidos por fuerzas de seguridad all¨ª desplazadas, dos destructores del grupo de combate naval del Enterprise comenzaron a martillear Vieques.
Tras su derrota en el tribunal de la juez Kessler, Eugene Gulland, un abogado que representa al Gobierno de Puerto Rico, anunci¨® que ¨¦ste piensa seguir adelante su batalla contra las maniobras a trav¨¦s de conversaciones con el presidente estadounidense, George Bush. Kessler rechaz¨® el argumento puertorrique?o de que la reanudaci¨®n de los bombardeos supone una amenaza para la salud de los 9.000 habitantes de Vieques y viola la ley contra el ruido aprobada el lunes por las autoridades de la isla. El Departamento de Justicia argument¨® que la Marina puede seguir con sus pr¨¢cticas mientras se resuelve el problema legal planteado por el ruido.
La Marina estadounidense utiliza Vieques para pr¨¢cticas de tiro desde 1941 y afirma que no tiene otro lugar en el Atl¨¢ntico para realizarlas. En los dos ¨²ltimos a?os, cientos de puertorrique?os han sido detenidos al intentar situarse como escudo humano frente a los bombardeos. El movimiento naci¨® despu¨¦s de que, en abril de 1999, un avi¨®n del cuerpo de marines arrojara por error dos bombas fuera de su objetivo, matando a David Sanes Rodr¨ªguez, un civil que trabajaba como guarda en Vieques.
Oposici¨®n un¨¢nime
Tras las largas y tensas negociaciones desarrolladas en el periodo final de la presidencia de Bill Clinton, la Marina de EE UU decidi¨® reemprender a partir de ayer sus operaciones, pero empleando proyectiles sin carga explosiva. Los arrojados ayer pesaban unos 227 kilos. Washington tambi¨¦n hizo saber que aplicar¨ªa la ley con rigor a todos aquellos que penetren en un 'per¨ªmetro de seguridad' terrestre y mar¨ªtimo situado al este de Vieques. Las condenas pueden llegar hasta 10 a?os de prisi¨®n.
Entre los que ayer violaron esa norma y se declararon dispuestos a arrostrar las consecuencias figuraban el alcalde de Vieques, D¨¢maso Serrano, del gubernamental Partido Popular Democr¨¢tico; la senadora Norma Burgos, del Partido Nuevo Progresista, partidario de la plena integraci¨®n en EE UU, y Rub¨¦n Berr¨ªos, l¨ªder del Partido Independentista Puertorrique?o. Este dato da muestra de que la oposici¨®n a las maniobras es un¨¢nime en la isla. La Marina de EE UU, que piensa continuar sus operaciones este fin de semana, calific¨® Vieques de 'un tesoro nacional para practicar desembarcos anfibios'. Los militares desean utilizar la isla como campo de tiro durante 90 d¨ªas al a?o.
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