El juez prolonga dos meses m¨¢s la prisi¨®n preventiva de Milosevic
Un juez de instrucci¨®n orden¨® ayer en Belgrado prolongar por dos meses la prisi¨®n preventiva del ex presidente de Yugoslavia Slobodan Milosevic, de 59 a?os. Milosevic se encuentra encarcelado por las acusaciones de abuso de poder en el ejercicio de su cargo y malversaci¨®n de fondos p¨²blicos. Al mismo tiempo, la fiscal del Tribunal Penal Internacional para los cr¨ªmenes cometidos en la antigua Yugoslavia (TPI), la suiza Carla del Ponte, insiste en la exigencia de la extradici¨®n inmediata de Milosevic a La Haya.
Los jueces acordaron prolongar la prisi¨®n preventiva de Milosevic para evitar su fuga o que intente influir a los testigos. Tienen todav¨ªa pendiente los jueces de instrucci¨®n el interrogatorio de una docena de testigos para tratar de probar que Milosevic cometi¨® los delitos que se le imputan, tales como la apropiaci¨®n indebida de una suma de dinero estimada en 130 millones de d¨®lares (algo m¨¢s de 24.000 millones de pesetas).
Seg¨²n la legislaci¨®n serbia, la prisi¨®n preventiva de un acusado puede prolongarse hasta un plazo m¨¢ximo de seis meses. Si en ese periodo no se encuentran motivos para el juicio, el acusado tiene que quedar en libertad. Los correligionarios de Milosevic, del Partido Socialista de Serbia (SPS), y su esposa, Mira Markovic, dirigente del partido neocomunista Izquierda Yugoslava (JUL), exigen que pueda defenderse de los cargos en r¨¦gimen de libertad. Tambi¨¦n acusan a las autoridades de mantener encarcelado al ex presidente a pesar de su precario estado de salud.
Hipertensi¨®n, no amago
El pasado 11 de abril, los m¨¦dicos ordenaron el traslado de Milosevic al hospital Militar de Belgrado, como consecuencia de un proceso de hipertensi¨®n, que sus partidarios presentaron como amago de infarto. Tras los ex¨¢menes m¨¦dicos, se dispuso el regreso de Milosevic a la prisi¨®n central de Belgrado. Su estado no inspira inquietud y se cree que su tensi¨®n arterial no es excesiva para su edad y puede tratarse con medicamentos en la c¨¢rcel.
En el exterior siguen las presiones del TPI para conseguir la extradici¨®n de Milosevic a La Haya. La fiscal Del Ponte declar¨® al diario de Ginebra Le Temps que espera tener a Milosevic en su poder antes de final de a?o: 'Para entonces podremos presentar un acta de acusaci¨®n que incluya no s¨®lo los cr¨ªmenes en Kosovo, por los que se dict¨® la orden internacional de captura, sino tambi¨¦n por otras acciones que vamos a imputarle relacionadas con Croacia y Bosnia'.
El Gobierno de Yugoslavia, y sobre todo el presidente Vojislav Kostunica, se niega a entregar a Milosevic a La Haya. Belgrado argumenta que la Constituci¨®n proh¨ªbe la extradici¨®n de los s¨²bditos nacionales a un Estado extranjero. El TPI replica que no se trata de un Estado extranjero, sino de un tribunal internacional creado por la ONU. Ante la presi¨®n internacional para extraditar a Milosevic, las autoridades de Serbia y Yugoslavia responden que preparan una ley que permita la extradici¨®n de ciudadanos yugoslavos a un tribunal internacional.
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