Lucha por el trabajo en domingo
La plantilla de Miniwatt defiende con fuego 312 puestos de trabajo de fin de semana
Los trabajadores de Miniwatt, filial de la multinacional holandesa Philips, est¨¢n en lucha. Defienden 312 empleos del llamado 'cuarto turno', un eufemismo con el que se designa a los trabajadores de fines de semana y festivos, en su mayor parte gente joven. Esta empresa produce tubos cat¨®dicos para televisores de 14 pulgadas. La direcci¨®n de Miniwatt ha decidido impulsar un expediente de regulaci¨®n empleo (ERE), con el argumento de que tiene ya mucho material almacenado y que la coyuntura internacional no aconseja mantener este 'cuarto turno'.
Miniwatt, situada junto a la Zona Franca de Barcelona, lucha por el mantimiento de estos empleos porque, seg¨²n la secretaria del comit¨¦ de empresa, Mar¨ªa Luisa L¨®pez, 'es una injusticia despedir a estos j¨®venes, porque es m¨¢s barato indemnizarles a ellos que a los mayores'. La medida de rescisi¨®n de empleo, que est¨¢ pendiente de ser aprobada por la Generalitat, ha encendido la mecha en una plantilla conocida por su conflictividad.
El personal afectado por el expediente de empleo, presentado a finales de marzo, son los contratados indefinidos a tiempo parcial que trabajan en los tres turnos de fin de semana y de festivos. Los trabajadores de Miniwatt decidieron el 9 de abril tomar el parqu¨¦ de la Bolsa de Barcelona y ayer, tomaron una de las principales arterias de Barcelona, la confluencia entre Paseo de Gr¨¤cia/ Diagonal. En una acci¨®n al estilo 'comando', las pancartas de 'Miniwatt en lucha, no a los despidos' se desplegaron s¨²bitamente en la Diagonal, al tiempo que una improvisada barricada empezaba a arder entre las miradas incr¨¦dulas de los transeuntes.
Tan sorprendidos por lo ins¨®lito del caso como los barandilleros de la Bolsa, los viandantes barceloneses vieron llegar ayer a la polic¨ªa y luego a los bomberos que, manguera en mano se prestaban a intervenir. '?Alto, Alto, compa?eros'. 'Aqu¨ª se trata de una protesta para defender nuestros empleos', les explicaron los trabajadores de Miniwatt al tiempo que les entragaban octavillas y explicaciones del conflicto que mantienen.
Los curiosos pudieron ver como la solidaridad obrera se impon¨ªa al presunto peligro de las llamas y la hoguera se mantuvo como una se?al de peligro en mitad del Paseo de Gr¨¤cia, entre gritos de '?Trabajo s¨ª, despidos no!' o '?Contra los despidos, huelga general!'. Luego, los trabajadores de la filial de Philips llevaron sus quejas al consulado de Holanda.
Los trabajadores de Miniwatt entienden que el expediente de regulaci¨®n de empleo 'es un fraude de ley, ya que lo que persigue la empresa es precarizar el empleo, cosa con la que no estamos de acuerdo', a?ade L¨®pez.
El polvor¨ªn de Miniwatt se ha prendido. O casi, se ha vuelto a prender. ?sta es una de las empresas catalanas de mayor conflictividad, con largas y enconadas batallas sindicales, e incluso judiciales. La ¨²ltima, precisamente, contra el trabajo en los d¨ªas festivos, que hoy se pretende defender a capa y espada.
Aquella batalla fue tan dura que provoc¨® un cierre patronal indefinido en 1991.
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