El progreso y los intereses personales
Tiene que ser realmente duro para aquellos que trabajan generosamente por el progreso de Andaluc¨ªa verse se?alados ante todos como individuos que s¨®lo se mueven por sus intereses personales. Despu¨¦s de tantos a?os 'sacrific¨¢ndose' por el socialismo, Isidoro Beneroso y Juan Manuel L¨®pez Benjumea son acusados de deslealtad al partido al que, al parecer, a¨²n pertenecen, el PSOE.
Los presidentes de El Monte de Sevilla y Huelva y de Caja San Fernando se ven as¨ª arrojados a las tinieblas por su propio partido, el mismo que les puso en la tesitura de ser elegidos, en su d¨ªa, m¨¢ximos responsables de dichas entidades de ahorro. S¨®lo les queda envolverse en la bandera de Sevilla para encontrar algo de refugio porque, salvo excepciones, en las filas socialistas ya tienen claro que no se les considera como suyos. La apelaci¨®n a la sevillan¨ªa puede que les d¨¦ algo m¨¢s de r¨¦dito, porque lo que nadie se ha tragado es que la publicaci¨®n de los errores de su gesti¨®n suponga nada menos que atentar contra el sistema financiero andaluz, tal y como quieren hacer creer.
En este escenario, el menos esperado por ellos, se celebran este martes los respectivos consejos de administraci¨®n de ambas cajas, en los que deber¨¢n dar explicaciones a sus integrantes sobre lo que dice la autoridad monetaria a trav¨¦s de sus demoledoras actas de inspecci¨®n. El blindaje de directivos, los excesivos riesgos en inversiones inmobiliarios, los pelotazos urban¨ªsticos todav¨ªa en el aire deber¨¢n constituir temas del obligado debate que los consejeros de dichas entidades se merecen, por las responsabilidades que sobre ellos tambi¨¦n recaen, no olviden esto, a consecuencia de la gesti¨®n que desarrollan sus presidentes, cuya idoneidad en el cargo queda ahora seriamente cuestionada.
As¨ª las cosas, cabe preguntarse si efectivamente son las personas m¨¢s adecuadas para pilotar la fusi¨®n de las cajas. Para el PSOE, est¨¢ claro que no, por lo que es f¨¢cil entender que tampoco lo son para el Gobierno andaluz que es quien, al final, tiene que aprobar o no dicha operaci¨®n. Un Ejecutivo que tampoco va a pasar por alto el desaf¨ªo que ha hecho la pareja de banqueros al mismo presidente de la Junta a trav¨¦s de la carta que suscribieron la semana pasada.
Para el an¨¢lisis m¨¢s pormenorizado, quedar¨¢ tambi¨¦n el papel que ha jugado en todo este proceso la representaci¨®n sindical de CC OO, que incluso ha mostrado su comprensi¨®n por el blindaje de los directivos, con el desmarcaje, eso s¨ª, de su secretario general, Julio Ruiz, y tambi¨¦n la funci¨®n de los andalucistas. El PA tiene aqu¨ª una ocasi¨®n m¨¢s de marcar distancias con respecto a la representaci¨®n que Pedro Pacheco mantiene en la Caja San Fernando, una posici¨®n, la del alcalde jerezano, sin duda alguna muy condicionada por la fort¨ªsima deuda que tiene contra¨ªda dicho Ayuntamiento con esta entidad y que pesa como una losa en las cuentas de la caja de Benjumea.
No se debe olvidar, tampoco, que esta semana dejamos atr¨¢s las elecciones en el Pa¨ªs Vasco y, con ello, se abre una nueva etapa pol¨ªtica en la que la Junta de Andaluc¨ªa espera que se produzca una verdadera ofensiva del Gobierno central y del PP contra Manuel Chaves, como principal enemigo a batir. Para esa contingencia dicen estar preparados, por lo que habr¨¢ que estar atentos a los pr¨®ximos acontecimientos cuando todav¨ªa quedan por cerrar acuerdos trascendentales en materia de financiaci¨®n auton¨®mica o en las transferencias de las pol¨ªticas activas de empleo.
Merece adem¨¢s no perder de vista el nuevo frente medioambiental que se abre en Andaluc¨ªa, territorio en el que han puesto sus ojos las principales empresas energ¨¦ticas para la puesta en marcha de nuevas centrales t¨¦rmicas. S¨®lo en la provincia de C¨¢diz est¨¢ en proyecto la ubicaci¨®n de unas siete nuevas instalaciones de este tipo. La petici¨®n de Chaves de una moratoria que paralice el desarrollo de estas iniciativas, a expensas de una serena y adecuada planificaci¨®n, supone un punto de inflexi¨®n para el movimiento surgido en Andaluc¨ªa contra estas plantas.
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