Hierba de invierno, fuego en verano
- Un consejo, sieguen. 'Quer¨ªa dar un consejo', dice Vicente, que asegura haber dedicado su vida a la agricultura. 'Sieguen un poquito la hierba que ha florecido tanto a lo largo de la ciudad si no quieren disgustos este verano con los calores. Esos matojos arden como la yesca y ahora es f¨¢cil cortarlo, no vaya a ser que luego sea el fuego el que aparezca', comenta.
- Enclaves conmovedores. 'Es conmovedor contemplar c¨®mo hay enclaves en Madrid donde familiares de motoristas o automovilistas muertos depositan flores para honrar su memoria', destaca In¨¦s. 'Lo que m¨¢s llama la atenci¨®n es la lealtad de estos familiares, casi siempre mujeres, que hace que no pasen apenas unas horas sin que las flores sean repuestas. Por eso', dice, 'pido a los j¨®venes que conducen que piensen en el sufrimiento que causa un accidente, que eviten esas escenas de dolor a los familiares. Si les imitaran a ellos, a esos familiares, en esa lealtad y en esa bondad que muestran, los accidentes mortales nunca se producir¨ªan'.
- Incorporaciones en la M-30. 'Echo mucho de menos alg¨²n tipo de se?alizaci¨®n en la M-30 sobre los accesos e incorporaciones', advierte Juan Pedro. 'Creo que en esas intersecciones es donde reside el mayor peligro y donde m¨¢s accidentes surgen', agrega. 'Creo que la polic¨ªa de tr¨¢fico cree que el automovilista tiene claras todas las prioridades y las normas de circulaci¨®n, lo cual no es cierto, ya que el conductor va enfrascado en miles de historias que le distraen y se limita a aplicar reacciones autom¨¢ticas a los est¨ªmulos que van surgiendo; pero este comportamiento tan autom¨¢tico es muy peligroso cuando se presenta algo fortuito, como una incorporaci¨®n a elevada velocidad. Por todo ello', concluye, 'no estar¨ªa nada de m¨¢s ese refuerzo de se?alizaciones'.
- Sin servicios. 'Es verdaderamente inadmisible que en el Retiro escaseen los servicios p¨²blicos', se lamenta Violeta. 'Ni los mayores, ni los adultos, ni, menos a¨²n, los ni?os pueden prescindir de instalaciones adecuadas y en suficiente n¨²mero como para atender a todos', protesta.
- Espect¨¢culo p¨²blico privatizado. 'Bien por Pedro Guerra el otro d¨ªa durante su actuaci¨®n en la plaza Mayor', aplaude ?ngel. 'Cumpli¨® con el p¨²blico con su calma creativa, pero no me parece bien que un acto de San Isidro 2001, es decir, un acto p¨²blico organizado por el Ayuntamiento, sufragado pues con los impuestos, precisamente en el coraz¨®n de la ciudad, que es de todos, se vea sometido a la l¨®gica privada de una emisora de radio, que condujo las actuaciones y antepuso su l¨®gica radiof¨®nica a la l¨®gica propia de un acto para todos, no ¨²nicamente para su audiencia. No s¨¦ si es una f¨®rmula moderna o no, pero debo decir que me pareci¨® fatal', se queja.
- Boda m¨²ltiple. 'El otro d¨ªa pas¨¦ por el Retiro y vi una boda m¨²ltiple de miembros hembras y varones de la comunidad china', recuerda Magdalena. 'Me pareci¨® algo muy bonito, por la dulzura de estas gentes y porque es, o al menos yo lo interpret¨¦ as¨ª, un signo de que est¨¢n integrados en nuestra ciudad y aqu¨ª piensan construir su futuro, lo cual implica que aman lo mismo que nosotros amamos, esto es, Madrid. Por eso', agrega, 'me parece que debemos ayudar a los pertenecientes a otros colectivos ¨¦tnicos y culturales, si no con la palabra, porque su lengua nos resulta muy dif¨ªcil, al menos con la sonrisa, para comunicarles que les aceptamos a nuestro lado'.
- Celo y astucia. 'Observo muchas veces la astucia y el celo empleados por la Polic¨ªa Municipal para impedir que en la Chopera del Retiro sean introducidas bebidas refrescantes por parte de ecuatorianos, bolivianos, colombianos o peruanos', afirma Alfonso, 'pero me encantar¨ªa ver el mismo celo policial en ense?arles a los transgresores qu¨¦ es lo que pueden hacer y qu¨¦ es lo que no les est¨¢ permitido. Quiz¨¢', a?ade, 'si colocaran en la puerta de acceso un tabl¨®n con la informaci¨®n pertinente no se producir¨ªan las lamentables situaciones que estos emigrantes deben sufrir cada s¨¢bado o domingo y todo por tratar de sacar unas pesetas'.
- M¨¢s calvarios. 'Los calvarios que nos esperan a los madrile?os en las zonas de Gran V¨ªa y Castellana son dos pesadillas que no se me quitan de la cabeza', comenta Andr¨¦s, que dice ser conductor de autob¨²s. 'Tras unos cuantos a?os al volante', explica, 's¨¦ que Madrid es como una malla de tejido, en la cual una peque?a alteraci¨®n en un extremo de la red causa siempre una serie de atascos en otros puntos de la malla. Por ello, me aterra pensar en lo que nos espera'.
- Peligros. 'Me parece muy peligroso el que en las actuaciones en p¨²blico de los grupos con equipo el¨¦ctrico, los cableados se tiendan por el suelo como si tal cosa, sobre todo en d¨ªas en los que llueve', subraya M¨¢ximo. 'Creo que existen riesgos evidentes para el personal', advierte.
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