Fusi¨®n

Los presidentes de las cajas de ahorro El Monte y San Fernando, Isidoro Beneroso y Juan Manuel L¨®pez Benjumea, sin sorpresa, encontraron en el PP y en la CEA sus m¨¢ximos valedores. Nadie sabe si estos apoyos ser¨¢n suficientes para mantenerse en la presidencia de estas entidades de ahorro. Me temo que estamos a las puertas de los tribunales, tal y como ha dicho el sindicato UGT, el PSOE-A y la Junta.

Es sorprendente que los empresarios hablen de vendetta, acusando a los socialistas de querer laminar a los dos presidentes. Lo que se quiere y desea es que se cumpla la ley y est¨¢ claro que la renovaci¨®n de los cargos debe hacerse paralelamente al proceso de fusi¨®n. Si Beneroso y Benjumea est¨¢n convencidos de que la fusi¨®n de ambas entidades pasa por mantenerse en sus bien remunerados cargos, lo tienen f¨¢cil: que se presenten y sean las asambleas generales respectivas las que decidan si deben ser ellos u otras personas quienes lideren el proceso.

Beneroso y Benjumea no deben tener bula para seguir en el cargo, entre otros motivos porque no gozan ya del benepl¨¢cito de quien los propuso, el PSOE, ni cuentan con el apoyo de quien debe velar por el cumplimiento de la Ley de Cajas, la consejer¨ªa de Econom¨ªa y Hacienda. Pero es que, adem¨¢s, en una fuga hacia delante, con el da?o que ello representa por estar a diario al pie de los caballos ante la opini¨®n p¨²blica, buscan refugio en la CEA o, quiz¨¢s mejor, en el todopoderoso grupo sevillano dentro de la patronal andaluza. Me imagino que un d¨ªa de estos solicitar¨¢n, si no lo han hecho ya, poder presentar a la consejera Magdalena ?lvarez y al propio presidente de la Junta, Manuel Chaves, los t¨¦rminos de la fusi¨®n. De celebrarse, el encuentro ser¨¢ de alto voltaje.

No est¨¢ en peligro la fusi¨®n anunciada y que cuenta con el respaldo del propio Chaves, que no de la Consejera. El problema radica en que, en cumplimiento de la Ley aprobada en el Parlamento, se proceda a la renovaci¨®n de sus ¨®rganos de Gobierno.

?Se puede poner en peligro el futuro de la fusi¨®n de las dos cajas sevillanas a causa de la actitud personal de dos presidentes?