El Vaticano da la raz¨®n a Arag¨®n en su litigio con Lleida por el patrimonio

'Hoy es un d¨ªa muy triste para nosotros', dijo ayer el portavoz del obispado de Lleida al conocer que el Vaticano no ha aceptado el recurso presentado por el anterior prelado, Ramon Malla, contra un decreto de la nunciatura del 29 de junio de 1998 que le obligaba a devolver los bienes art¨ªsticos reclamados por la di¨®cesis aragonesa. En un escueto comunicado, el obispado de Lleida se?ala que acatar¨¢ la resoluci¨®n porque 'se han agotado todas las v¨ªas jur¨ªdicas eclesi¨¢sticas' a su alcance.

Esta decisi¨®n favorable a Arag¨®n, contra la que no cabe ning¨²n otro recurso por la v¨ªa eclesi¨¢stica, implica que un n¨²mero todav¨ªa no determinado de piezas que hoy forman parte del fondo muse¨ªstico del obispado de Lleida deben retornar inmediatamente a su lugar de origen, en cumplimiento del decreto de segregaci¨®n promulgado por la Santa Sede el 15 de junio de 1995. La responsables de la di¨®cesis leridana conf¨ªan en que los miembros de la comisi¨®n de expertos de ambos obispados formada para la ejecuci¨®n del citado decreto puedan trabajar 'en un buen clima de di¨¢logo y (...) resolver el contencioso de forma satisfactoria para todos'.

Pero la Generalitat no est¨¢ dispuesta a quedarse con los brazos cruzados. Hace dos a?os, el Departamento de Cultura incluy¨® en el Cat¨¢logo del Patrimonio Cultural Catal¨¢n las cerca de 2.000 obras que forman parte de los fondos del Museo Diocesano, incluidas las procedentes de las iglesias aragonesas, con el fin de blindar sus colecciones art¨ªsticas y poner trabas legales al clero aragon¨¦s, que pretende la devoluci¨®n de m¨¢s de un centenar de piezas. La Ley del Patrimonio Cultural Catal¨¢n de 1993 establece que los bienes catalogados como colecci¨®n 'no pueden ser disgregados sin autorizaci¨®n del Departamento de Cultura'. Esta argucia legal abre la v¨ªa para posibles recursos ante los tribunales civiles y ante los organismos culturales internacionales.

El consejero de Cultura, Jordi Vilajoana, anunci¨® ayer que convocar¨¢ a los miembros del consorcio que ha de gestionar el futuro Museo Diocesano y Comarcal de Lleida -del que forman parte el obispado y el Ayuntamiento de Lleida, el Consejo Comarcal del Segri¨¤, la Diputaci¨®n de Lleida y la propia Generalitat- para analizar las consecuencias de esta decisi¨®n y elaborar una estrategia colegiada en defensa de la integridad del museo. Vilajoana precis¨® que la resoluci¨®n afecta a 65 piezas procedentes de las parroquias segregadas de Lleida, cuando las autoridades aragonesas reclaman m¨¢s de un centenar.

Montse Maci¨¤, directora del Museo Diocesano, declar¨® que es partidaria de que las instituciones y la sociedad civil luchen por la unidad de las colecciones muse¨ªsticas y apunt¨® que 'ser¨¢ bien recibida' cualquier acci¨®n pol¨ªtica o judicial que se emprenda a partir de ahora para retener todas las obras. 'Ahora corresponde a la comisi¨®n de expertos analizar la situaci¨®n jur¨ªdica de cada objeto reclamado. Para nosotros todas las piezas tienen un gran valor porque forman parte de una colecci¨®n centenaria', se?al¨® Maci¨¤.

Cautela en Arag¨®n

El fallo fue acogido con alegr¨ªa y cautela en Arag¨®n. El presidente de la comunidad aut¨®noma, Marcelino Iglesias, asegur¨® que la decisi¨®n 'da la raz¨®n a quien siempre la ha tenido' y que son las parroquias y el obispado de Barbastro-Monz¨®n los que deben decidir cu¨¢ndo regresan y d¨®nde se ubican esas obras. De momento el museo de Barbastro est¨¢ preparado para acogerlas y el Gobierno de Arag¨®n brindar¨¢ su ayuda para adecuarlo y lograr que se conserven en perfecto estado.

Iglesias confiaba ayer en que, 'tal y como siempre se ha dicho, el fallo ser¨¢ aceptado por todas las partes'. 'Espero que no haya otro contencioso', a?adi¨®. Arag¨®n mantiene vivo en el Constitucional otro conflicto con la Generalitat por la propiedad de los bienes de Sijena, una valiosa colecci¨®n de retablos, sarc¨®fagos y pinturas del monasterio que, seg¨²n se supo en 1996, las monjas que lo habitaban vendieron a los museos catalanes sin autorizaci¨®n del Vaticano ni conocimiento de Arag¨®n.