El 'complejo Donosti' tiene varios grupos de pistoleros 'liberados' pese a los ¨²ltimos arrestos
La itinerancia actual de los terroristas dificulta su identificaci¨®n y la desarticulaci¨®n de los 'taldes'
La Ertzaintza y la Guardia Civil creen que los asesinos del director financiero de El Diario Vasco, Santiago Oleaga, est¨¢n encuadrados en uno de los taldes del denominado complejo Donosti, un conjunto de grupos formados por liberados que a su vez se apoyan en una tupida red de laguntzailes (colaboradores) y de legales (sin fichar) dedicados a la log¨ªstica de los grupos. El entramado del terror se cierra con un abanico de chivatos, en muchos casos legales que remiten la informaci¨®n a Francia.
Tras las sucesivas operaciones de la Ertzaintza en febrero y marzo, en las que se desarticularon los comandos Ttotto y Gaua, y el arresto, a finales de febrero, por la Guardia Civil de parte de la infraestructura log¨ªstica de los asesinos en Guip¨²zcoa, ambos cuerpos han logrado hacer un poco m¨¢s de luz sobre el modus operandi de la nueva ETA surgida de la tregua. Y ha confirmado datos que obraban ya en manos de los expertos policiales a ra¨ªz de anteriores desarticulaciones del Vizcaya o del Araba.
En concreto, han constatado que la itinerancia de los activistas y de los comandos se ha impuesto a las estructuras compartimentadas y de residencia continuada de los terroristas en cada una de las provincias que tradicionalmente han dado nombre a los comandos etarras. El propio consejero vasco de Interior, Javier Balza, apunt¨® ayer en Radio Euskadi esta idea al analizar la autor¨ªa del intento de asesinato del vigilante jurado de la Universidad P¨²blica Vasca. 'Este tipo de atentados se pueden hacer desde un comando que est¨¦ actuando en otro territorio. ETA ha cambiado mucho su operativo', desde el final de la tregua y 'el estilo cl¨¢sico de situar un comando fijo en un determinado territorio son f¨®rmulas que en todos estos ¨²ltimos atentados se ha demostrado que ha dejado de ser as¨ª, que han dejado de actuar con ese estilo', dijo.
Informaci¨®n informatizada
La segunda constataci¨®n es que ETA ha desligado de los comandos la captaci¨®n de informaci¨®n, que en muchos casos descansa en activistas legales que remiten a Francia los datos sobre posibles objetivos. Posteriormente, la organizaci¨®n la reparte, en fichas informatizadas o en otros soportes, a los terroristas, encomend¨¢ndoles los objetivos. Esta informaci¨®n es actualizada por el propio comando, como se ha podido comprobar en alguno de los ¨²ltimos objetivos de ETA, del que los terroristas ten¨ªan datos viejos y anotaciones a mano con datos nuevos en los m¨¢rgenes de la informaci¨®n remitida desde Francia.
La tercera constataci¨®n es que la nueva ETA se ha nutrido de j¨®venes bregados en la violencia callejera y mucho de ellos con militancia constada por la polic¨ªa en organizaciones juveniles de la izquierda abertzale como Haika (antes Jarrai y Gazteriak). Todo esto dificulta la obtenci¨®n de pistas para identificar a los nuevos terroristas salvo las que provienen de las declaraciones de los terroristas detenidos, de los testigos o las dejadas por los propios activistas tras los atentados. Aunque no las hace imposible. Ser¨ªa el caso de los dos liberados del Donosti que huyeron tras la desarticulaci¨®n del comando Ttoto, a finales de febrero pasado, y que seg¨²n fuentes policiales, ser¨ªan Aitor Agirre y Asier Arzalluz. La polic¨ªa no descarta que ambos participaran en el asesinato, tambi¨¦n pistola en mano, del edil socialista de Lasarte (Guip¨²zcoa), Froil¨¢n Elespe.
Por todo ello, los expertos en informaci¨®n antiterrorista o los propios responsables pol¨ªticos, como el director de la Polic¨ªa, Juan Cotino, hablan con mucha cautela a la hora de apuntar las personas supuestamente identificadas y, lo que es m¨¢s dif¨ªcil, adscribirlas a un determinado talde, dada la itinerancia de los terroristas.
Por eso, la avalancha de nombres de presuntos miembros de ETA supuestamente identificados -seis de ellos en el complejo Donosti y otros tres en el comando Madrid- ha dejado perplejos a los responsables de informaci¨®n antiterrorista. Entre los seis nombres del complejo Donosti que maneja la Ertzaintza, aunque oficialmente nadie quiso ayer confirmar las identidades, estar¨ªan supuestamente personas que en su d¨ªa fueron detenidas por la Ertzaintza por pertenecer al comando Araba como Nerea Bengoa Ziarsolo. Bengoa fue arrestada en abril de 1995 como integrante del grupo que plane¨® matar al entonces consejero de Interior, Juan Mar¨ªa Atutxa. Tras pasar tres a?os en prisi¨®n obtuvo la libertad condicional, en plena tregua, pero no se present¨® al juicio en enero de 2000 y desde entonces est¨¢ huida. Otro de los identificados ser¨ªa Roberto Lebrero Panizo, conocido de la Ertzaintza desde que huyera en agosto de un piso de Vitoria tras la desarticulaci¨®n del Araba. Antes ya hab¨ªa sido procesado por un sabotaje. Otro conocido de la Ertzaintza es Aitor Garc¨ªa Aliaga, alav¨¦s detenido en su d¨ªa por des¨®rdenes p¨²blicos y amenazas contra la polic¨ªa. Estos nombres y alguno m¨¢s segu¨ªan ayer en cuarentena en cuanto a su adscripci¨®n al complejo Donosti. Recientemente, tambi¨¦n fue vinculado con este grupo el etarra Juan Luis Rubenach, pero las fuentes de la lucha antiterrorista prefieren mantener la prudencia.
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