Del Castillo lee el curr¨ªculo de Racionero ante la petici¨®n del PSOE de su destituci¨®n

'?Tiene previsto el Gobierno el relevo del director de la Biblioteca Nacional?', pregunt¨® Leguina. 'No', le respondi¨® la ministra Del Castillo. Un mes despu¨¦s de que EL PA?S desvelara que la obra Atenas de Pericles, de Luis Racionero, reproduce sin entrecomillar p¨¢rrafos de Gilbert Murray de El legado de Grecia, este 'esc¨¢ndalo', seg¨²n lo calific¨® Leguina, se debati¨® ayer en el Congreso.

'Si al director de la Biblioteca Nacional de Francia le cogen copiando', dijo Leguina, 'no hubiera durado ni quince d¨ªas'. El diputado socialista reconoci¨® que el cargo de director de la Biblioteca Nacional es un 'nombramiento pol¨ªtico', y que se designa a una persona de confianza. 'Pero no debe de ser un cargo para agradecer los servicios prestados', espet¨® a la ministra. Leguina argument¨® que su partido no se queja de Racionero por su ideolog¨ªa, sino porque le han cogido copiando: 'Son hechos probados'.

Despu¨¦s aludi¨® al propio Racionero, quien calific¨® de 'intertextualidad' la similitud entre su obra y la original. 'Nada de intertextualidad. Se trata de un plagio, de cortar y pegar, de adornarse con oropeles que a uno no le pertenecen'. Y, parafraseando una canci¨®n de Raphael, dijo: 'Esto es un esc¨¢ndalo'. El estribillo le vino bien para concluir su intervenci¨®n con Julio Casares, autor del Diccionario ideol¨®gico de la lengua espa?ola. Esc¨¢ndalo, seg¨²n dicha obra, es la 'acci¨®n que es causa de que uno piensa mal de otro'. Y para que no se siga pensando mal del director de la Biblioteca Nacional, Leguina pidi¨® su destituci¨®n.

La ministra le respondi¨® con un detallado relato de la biograf¨ªa y el curr¨ªculo de Racionero. 'Cuando hay toda una vida de 60 a?os, que es la edad que tiene el se?or Racionero', dijo Del Castillo, 'hay detr¨¢s una biograf¨ªa, hay detr¨¢s muchos contrastes externos'. Y esa biograf¨ªa la repas¨® con todo detalle ayer la ministra entre las risas y los murmullos de la oposici¨®n. Aparte de su perfil de economista, ingeniero y autor de trabajos cient¨ªficos, Del Castillo cit¨® una veintena de libros en diversos g¨¦neros, mientras el alboroto crec¨ªa hasta hacer casi inaudible su intervenci¨®n.

La presidenta del Congreso, Luisa Fernanda Rudi, tuvo que interrumpir para pedir silencio. La ministra continu¨® con los premios: 'Anagrama de Ensayo, en 1983; Prudencio y Bertrana, en 1981; Azor¨ªn de Novela, en 1996...'. No dijo ni una palabra sobre Atenas de Pericles. Los aplausos desde los bancos del PP intentaron acallar los rumores y risas mientras Rudi pas¨® a la siguiente pregunta al Gobierno.