Los votos de ultratumba

Los partidos de la oposici¨®n gallega, BNG y PSdeG-PSOE, admiten no tener pruebas de que se hayan emitido votos a nombre de emigrantes muertos -el m¨¦todo de escrutinio hace dif¨ªcil corroborarlo-, pero insisten en que mientras se mantenga el sistema actual es perfectamente posible que se suplante a un elector ya fallecido.

De ah¨ª que insistan, sobre todo los nacionalistas, en pedir que el voto por correo de los emigrantes siga los mismos tr¨¢mites que se exigen en Espa?a y que tambi¨¦n funcionan en el extranjero en el caso de las elecciones municipales: que las papeletas s¨®lo se env¨ªen a los votantes que lo hayan solicitado previamente con la debida identificaci¨®n.

Para ilustrar su convicci¨®n de que se han emitido votos a nombre de muertos, el dirigente del BNG Alfredo Su¨¢rez Canal relata su experiencia en las anteriores auton¨®micas: 'Yo mismo fui testigo, como los miembros de la Junta Electoral de Ourense, de que se abrieron varios sobres de votos que, en lugar de llevar una papeleta, conten¨ªan cartas para pedir que se borrase del censo a esa persona porque hab¨ªa muerto. Si el que hizo el env¨ªo hubiese introducido un voto en vez de la carta, se hubiese computado normalmente'.

Los errores en el censo, que no recoge muchas muertes, retornos a Espa?a o cambios de domicilio, propicia que el destino de las papeletas sea incierto. La diputada auton¨®mica del PSdeG Marisol Soneira, que recorri¨® Am¨¦rica como miembro de una comisi¨®n del Parlamento gallego, afirma que el vicec¨®nsul de Espa?a en Buenos Aires le reconoci¨® que en las ¨²ltimas auton¨®micas no se pudieron distribuir unas 13.000 papeletas y 'decenas de miles' se extraviaron 'por la desidia y el mal funcionamiento de los servicios de correos'.