El Congreso aprueba por unanimidad la Agencia de Seguridad Alimentaria

La crisis de las vacas locas precipit¨® la creaci¨®n de esta agencia, un proyecto que aprob¨® el Consejo de Ministros el 15 de diciembre de 2000. Pero el boceto de este nuevo organismo mostraba signos evidentes de una d¨¦bil eficacia y escasa financiaci¨®n, como tuvo que reconocer la propia ministra de Sanidad, Celia Villalobos. El proyecto se modific¨® posteriormente para incluir la mayor parte de la propuesta alternativa que present¨® el PSOE.

Entre los objetivos de este nuevo organismo figura el ofrecer garant¨ªas e informaci¨®n a los ciudadanos y agentes econ¨®micos del sector agroalimentario. Pero quiz¨¢ la m¨¢s importante de sus misiones ser¨¢ la de coordinar a las distintas Administraciones p¨²blicas cuando se d¨¦ una situaci¨®n de crisis alimentaria, como ocurri¨® con las vacas locas. De esta forma pasar¨¢ a ser el centro de referencia de ¨¢mbito nacional desde el que se tomar¨¢n las decisiones en situaciones de emergencia.

La principal caracter¨ªstica de la Agencia es que incorpora un ¨®rgano de direcci¨®n que, seg¨²n sus autores, la dotar¨¢ de autonom¨ªa de acci¨®n y de cierta independencia del poder pol¨ªtico. La direcci¨®n tendr¨¢ 12 miembros: cuatro propuestos por el Gobierno, cuatro por las comunidades aut¨®nomas, dos por los ayuntamientos, uno por los consumidores y otro por los agentes econ¨®micos. El proyecto incluye adem¨¢s un comit¨¦ cient¨ªfico que se formar¨¢ por convocatoria p¨²blica y siguiendo criterios de excelencia investigadora.

A pesar de ello, y del consenso que se logr¨® ayer en el Parlamento para su aprobaci¨®n, la patronal alimentaria y los consumidores consideraron el proyecto presentado en diciembre falto de poder ejecutivo y de capacidad para coordinar a las comunidades aut¨®nomas. Uno de los problemas que surgen cuando se da una situaci¨®n de crisis suele ser el choque de competencias entre administraciones. De este asunto en concreto se encargar¨¢ una Comisi¨®n Institucional. Para la Federaci¨®n Espa?ola de Industrias de la Alimentaci¨®n y la Bebida (FIAB), que representa a las 5.000 principales empresas alimentarias del pa¨ªs, una grave carencia del proyecto ser¨¢ su incapacidad para supervisar y coordinar la ejecuci¨®n de las competencias de control de las comunidades aut¨®nomas.

El ¨®rgano rector de la Agencia ser¨¢ el Consejo de Direcci¨®n, cuyo presidente ser¨¢ tambi¨¦n el presidente del organismo. Habr¨¢ tambi¨¦n un director ejecutivo que ser¨¢ el representante legal de la agencia y que ejercer¨¢ las funciones de direcci¨®n que no correspondan al presidente. El Gobierno se reserva el nombramiento de esta figura, a propuesta del presidente del Consejo de Direcci¨®n.

Los recursos econ¨®micos de esta Agencia saldr¨¢n de los Presupuestos Generales del Estado, as¨ª como de fondos comunitarios y de aportaciones que se obtengan como consecuencia de convenios y conciertos con entes p¨²blicos. La intenci¨®n primera del Gobierno de recurrir a la financiaci¨®n privada se abandon¨® para evitar colusiones de intereses.

La Agencia se encargar¨¢ de elaborar y promover estudios de investigaci¨®n, de asesorar a las Administraciones p¨²blicas y de informar sobre la posici¨®n de Espa?a en los asuntos de esta ¨ªndole que se traten en la Uni¨®n Europea.